Ciclismo
Alexey Lutsenko vence en el 'sterrato' y estrena el palmarés de la Clásica Jaén Paraíso Interior
El ciclista kazajo, tras más de 40 km en solitario, gana la primera edición de esta nueva carrera andaluza
Los andaluces de Jaén no son solo aceituneros altivos. También son unos entusiastas de la bicicleta que tienen cotas, ciudades monumentales... y caminos de tierra. Vaya si tienen caminos de tierra. Si no, que se lo pregunten a Alexey Lutsenko, vencedor de la primera edición de la Clásica Jaén Paraíso Interior , disputada este lunes 14 de febrero por las carreteras de esta provincia andaluza. Una nueva carrera de un día que sembraba mucha expectación por sus particulares características y cuyos tramos de sterrato han sido determinantes para el desarrollo de la prueba a la vez que han cosechado emoción y buenas críticas del público.
El ideólogo de esta clásica no es otro que Pascual Momparler , seleccionador nacional de ciclismo en ruta y director de una competición que ha llegado con la intención de quedarse y asentarse. Se trata de un trabajo conjunto con la Diputación de Jaén , completamente volcada con el mundo de la bicicleta, y que no escatima a la hora de ofrecerse para acoger visitas de la Vuelta a España, las etapas reinas de la Ruta del Sol o, ahora, esta Clásica Jaén Paraíso Interior.
196 kilómetros de logitud, 3.100 metros de desnivel positivo acumulado y siete tramos de tierra (con un total de 40 km) abriéndose paso por el característico mar de olivos de la provincia de Jaén han sido el abono perfecto para el nacimiento de esta carrera cuya línea de salida se ubicaba en Baeza y la de meta en Úbeda después de un hermoso y duro circuito con final en cuesta.
El pelotón, roto desde lejos
Tras varias fugas que no llegaron a buen puerto y un pelotón cada vez más mermado, se levantó bravo Lutsenko (Astana Qazaqstan Team), dejando atrás al resto de hombres fuertes. De esta forma, a unos 45 kilómetros de meta ya marchaba solo por delante el kazajo , uno de los grandes favoritos para la victoria final, especialmente tras la baja de Alejandro Valverde por prevención sanitaria. Aunque parecía que no hacía mucho terreno, poco a poco fue sacando tiempo a sus más directos perseguidores, que rápidamente quedaron reducidos a Lennard Kämna (BOH), Tim Wellens (LTS), Loïc Vliegen (IWG), Connor Swift (AKS) y Thibault Ferasse (BBK). A 22,3 km de meta, tras terminar el sexto tramo de tierra y hacer el penúltimo paso por meta, la diferencia se mantenía en el medio minuto. El grupo perseguidor, que se había quedado únicamente con los cuatro primeros, veía como la ventaja aumentaba hasta el minuto. Ya no fueron capaz de recortar diferencias hasta la entrada en meta de Lutsenko. El podio, a casi un minuto del de Astana, lo completaron los belgas Wellens y Vliegen .
La herida generosa del sudor de los corredores , que diría Miguel Hernández, ha sido el único líquido que ha bañado durante las casi cinco horas que ha empleado la cabeza de carrera las carreteras y polvorientos caminos jiennenses, una tierra asolada por la sequía que en caso de día lluvioso podría hacer aún más desafiante esta clásica. No obstante, el desafío, incluso sin agua, ha llevado hasta la extenuación al ganador, Lutsenko, con momentos de visible cansancio y fatiga en los compases finales de la carrera.
Para redondear este día histórico para los enamorados del ciclismo quedan curiosidades como el dorsal 14 que Lutsenko portaba en este 14 de febrero, así como la gran aceituna dorada que el corredor de Astana recibió como trofeo que acredita su victoria, la primera en el palmarés de la Jaén Paraíso Interior.
Una carrera con visos de crecimiento
La Strade Bianche italiana, una carrera que recorre la Toscana nacida en 2007 pero que en una década muchos consideran como el sexto monumento del ciclismo, es el espejo en el que se mira la recién nacida clásica jiennense, cuya organización se marcó como uno de los principales objetivos el no dar oportundidad alguna al aburrimiento . Objetivo conseguido.
El arte renacentista de los soberbios conjuntos monumentales de Andrés de Vandelvira en Baeza y Úbeda, ciudades patrimonio de la humanidad por la Unesco desde 2003 , constituía el escenario ideal para dar un paso más en el renacimiento del calendario español de ciclismo en ruta, que año a año va ganando enteros para recuperar espendor en cantidad (a finales de mes nacerá la O Gran Camiño en Galicia) y ganar una diversidad y calidad sin precedentes.
💚Qué bonita está la meta de Úbeda.
— Clásica Jaén Paraíso Interior (@ClasicaJaen) February 14, 2022
Solo una vuelta al circuito final, solo un tramo más de sterrato.
Lutsenko va con 48” de ventaja. #ClásicaJaén22 pic.twitter.com/wtt6stqOjb
No cabe duda de que la Jaén Paraíso Interior, única entre las pruebas españolas y sin nada que envidiarle a las competiciones de las que bebe, tiene todos los ingredientes para trascender y convertirse en un referente en el calendario nacional e internacional. La clásica de los andaluces de Jaén es una carrera que ha llegado para quedarse.
Jaén no dice adiós todavía al ciclismo, puesto que el miércoles 16 arranca la Vuelta a Andalucía , una carrera por etapas que un año más tendrá su clímax en esta provincia. La segunda etapa volverá a terminar en Alcalá la Real y la última recorrerá íntegramente carreteras jiennenses para decidir el vencedor de la ronda andaluza.
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