Crítica de Danza
Víctor Ullate, 30 años de excelencia y danza
La compañía del maestro coreógrafo presenta en el Cartuja Center un gran programa aniversario
Quien le iba a decir a Víctor Ullate en el año 1988 que iba a poder celebrar los treinta años de la compañía de Danza que acababa de fundar. Porque la supervivencia de las compañías de Danza en nuestro país es poco menos que milagroso, basada en el esfuerzo y la tenacidad. En este caso la compañía no llegaba sola, sino que se sustentaba en una escuela que ha sido uno de los grandes graneros de la danza española con nombres de todos conocidos. Uno de estos nombres, Eduardo Lao se convertiría años después en director artístico de la compañía Víctor Ullate Ballet, y actualmente es Lucía Lacarra , una de las mejores bailarinas españolas y alumna de Ullate, quien ha tomado las riendas de la compañía del maestro.
Y con estos mimbres llegó este fin de semana el Víctor Ullate Ballet Comunidad de Madrid para celebrar en el teatro Cartuja Center Cite de Sevilla el 30 aniversario de su fundación , con un programa que hacía un recorrido por distintas coreografías realizadas por Víctor Ullate y Eduardo Lao.
Se inicia la función con «Seguiriya» , una obra del año 2000 donde vuelca Ullate todo su amor por el flamenco y la danza española. Trepidante inicio que sigue con fragmentos de obras como «Samsara», «Tras el espejo», «Burka», «Coppélia», «Wonderland», «Carmen», «Arrayán», entre otras piezas.
La compañía, ahora dirigida por Lucía Lacarra , sigue teniendo esa excelencia que siempre la ha caracterizado. Ese sello del estilo Ullate que nos ha ofrecido durante años un elenco técnicamente impecable, con limpieza de ejecución e interpretación y que nos lleva a la emoción.
Muchos son los momentos a destacar, como la pieza «Voilá c’est ça» con música de Mahabharata y que interpreta Josué Ullate, impresionante su puesta en escena. O el paso a dos de «Samsara» con Lucía Lacarra y Josué Ullate, un dúo que expresa toda la química de la danza. Con Lacarra hemos recuperado para nuestro país a una de las mejores bailarinas que ha tenido la danza española.
Seguimos impactados por la calidad del elenco con pasos a dos de Keiko Oishi y Dorian Acosta en «Wonderland» y de la misma pieza otro paso a dos con Mariano Cardano y Jordan Kindell. De las impecables puntas de Martina Giuffrida en «Coppélia» a los contraluces de las mujeres bajo las telas en «Burka», o «Sola», un paso a dos con música de Arvo Pärt con el que Lucía Lacarra y Christian Oliveri ponen punto final.
La compañía inicia ahora una nueva andadura. Ullate ha sido principalmente un maestro generador de estrellas (María Giménez, Tamara Rojo, Igor Yebra, Ángel Corella, Joaquín de Luz, la misma Lacarra), y ahora se dedicará a su Fundación. Este espectáculo pone punto final a tres décadas de creación, un relato cronológico de una página brillante de la danza española donde Víctor Ullate se erige como la expresión más auténtica de un estilo neoclásico propio, en el que, como no podía ser de otra forma, impone la importancia de la música tal y como aprendió de su maestro Maurice Béjart.
«30 años de Danza» ofrece además la posibilidad de hacer una revisión de la obra de Ullate/Lao y que nuevos públicos se acerquen a esta compañía versátil que hoy se enfrenta a nuevos retos y a un nuevo futuro de la mano de Lucía Lacarra. Mucha suerte en el empeño. Una gran herencia para una gran bailarina. El público despidió al maestro por palmas por sevillanas, y él acordándose de sus años junto a Antonio el bailarín, se arrancó con sus brazos para hacer compás. Gran noche de danza.
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