ADMINISTRACIÓN CULTURAL
Más de 20 entidades culturales apoyan la reforma del ICAS y piden una reunión a la oposición y sindicatos
Instan a corregir el «nefasto funcionamiento actual y convertirlo, de forma rotunda y urgente, en una herramienta eficaz y adaptada a las necesidades actuales»
El sector cultural de Sevilla pide el apoyo de la oposición en el Ayuntamiento a la reforma del ICAS
Después de que el consejo de administración del Instituto de la Cultura y las Artes (ICAS) del Ayuntamiento de Sevilla rechazase recientemente la reforma de los estatutos promovida por el Gobierno local del PSOE, una asignatura pendiente del Consistorio; 24 entidades , colectivos o asociaciones del sector cultural han respaldado la modificación de los nuevos estatutos , que implican crear una agencia pública empresarial, proponiendo a los partidos y sindicatos detractores de la medida una reunión para «buscar una solución».
Estas entidades, como la Asociación de profesionales y compañías para el desarrollo de la danza en Andalucía (PAD), Noletia , Circada , la Asociación de Profesionales de la Gestión Cultural (GECA), ZEMOS98 , La Suite , Nocturama , la Asociación Escenarios de Sevilla , Surnames , la Orquesta Barroca de Sevilla , el gremio de librerías o la Asociación de Amigos del Libro Antiguo ; abogan por «una profunda transformación de la Delegación de Cultura de Ayuntamiento y del ICAS para corregir el nefasto funcionamiento actual y convertirlo, de forma rotunda y urgente, en una herramienta eficaz y adaptada a las necesidades actuales de los diferentes sectores de la industria cultural local, antes de que acabe irremediablemente ahogada».
Así, avisan de que es «un clamor compartido por todos los profesionales culturales de diferentes sectores sobre la asfixia a la que les conduce un sistema que no está preparado para atender las exigencias derivadas de los importantes cambios de paradigma en la realidad cultural, nuevos enfoques y nuevas necesidades que requieren medios y herramientas más ágiles y sensibles con la realidad de la creación y la gestión cultural».
De este modo, tras revisar la propuesta de nuevos estatutos, con la creación de la nueva agencia pública empresarial local Cultura de Sevilla como ente sucesor del ICAS, estos colectivos apoyan el texto, señalando especialmente que el mismo incluye aspectos como que la citada agencia pública empresarial « se rija por el derecho privado , excepto en las cuestiones relacionadas con la formación de la voluntad de sus órganos» y lo regulado para este tipo de entes en la Ley de Haciendas Locales , la Ley de Contratos del Sector Público , la regulación del empleo público, la legislación patrimonial y la de bienes de las entidades locales.
Convenios con otros entes
Además, señalan el hecho de que la nueva entidad se encargue de «la planificación, programación, gestión, producción y difusión de las políticas culturales» del Ayuntamiento y que pueda suscribir «convenios y acuerdos con otros entes públicos o privados para el impulso y promoción de la cultura».
También respaldan que la futura agencia pública empresarial gestione los teatros municipales , el Espacio Turina, la Factoría Cultural, el espacio Santa Clara, la organización de festivales como el de Música Antigua, la Bienal de Flamenco o el festival de cine; así como que se encargue del Museo de la Cerámica de Triana, de la cripta arqueológica de la Encarnación o de la Casa Fabiola, entre otros aspectos.
Ante el citado rechazo de los nuevos estatutos en el seno del consejo de administración del ICAS, al oponerse PP, Cs, Adelante, Vox, CCOO y CSIF, las citadas entidades reclaman «a todos los grupos políticos, tanto en el seno del consejo de administración de ICAS, como en el pleno del Ayuntamiento, así como a los sindicatos, que atiendan» estas «voces, plurales y diversas pero unidas en esta reivindicación común» .
«Escuchar» todas las opiniones
En concreto, proponen una reunión y debate para «escuchar opiniones a favor y en contra de la modificación» y «buscar soluciones», toda vez que por ejemplo, CCOO avisaba de que la operación implica una «privatización» del ente con efectos sobre la plantilla y Cs opinaba que la medida «puede acabar provocando nuevos inconvenientes en la gestión» cultural.
« Estamos abiertos a escuchar propuestas y a discutir todos los matices u objeciones que se planteen , pero no a que intereses ajenos a la cultura dinamiten todo en lo que creemos y defendemos. Jamás entenderemos ni apoyaremos de ningún modo que una reforma necesaria y urgente caiga en saco roto y quede en el olvido», avisan estos colectivos.
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