Estreno

Los Compadres: «En España nos reímos de todo, hasta de la muerte»

Alfonso Sánchez y Alberto López regresan, junto a Estefanía de los Santos, en la comedia negra «Para toda la muerte»

Estefanía de los Santos, Alfonso Sánchez y Alberto López, este jueves en el Cine Cervantes Juan Flores

Jesús Morillo

Los Compadres , es decir, Alfonso Sánchez y Alberto López están de vuelta. Y lo hacen con «Para toda la muerte » una comedia negra que supone todo un cambio de registro dentro del cine que han facturado desde la productora Mundo Ficción . «El multiverso enterista se expande. Nos queda poco para ser la Marvel », bromea Alfonso Sánchez.

«Sin duda es un cambio de estilo totalmente, aunque cada una de nuestras películas ha sido un cambio de estilo. Esta es totalmente distinta. El tipo de comedia y de gags es distinto, el tempo de la película es distinto, los personajes son distintos... Eso es lo interesante de la película, meter personajes pero nunca abandonar el universo en el que estamos y también los espectadores, que están enganchados al venenillo del enterismo », explica el director de la película.

Los sevillanos estrenan este viernes «Para toda la muerte» , que dirige Alfonso Sánchez, y donde el protagonismo recae, sobre todo, en Alberto López, un opositor que lleva años viviendo en casa de los padres de su novia cuyo único objetivo en la vida será convertirse en funcionario .

Logra aprobar el examen, pero cuando está en plena celebración le comunican que se ha quedado sin plaza y que se queda el primero en la lista de suplentes , por lo que concibe el plan de matar al que la ha ganado para poder acceder a ella y a la felicidad junto a su novia.

Este es el arranque de una película, producida por Mundo Ficción, Enciende TV y Set Magic , que dirige Alfonso López, con guión de su colaboradora habitual Ana Graciani , en la que pueden rastrearse, según el director, referencias al cine español de los años sesenta, de «Atraco a las tres» a «El pisito» , a dramaturgos como Jardiel Poncela y Alfonso Paso , pero también al cine de Hollywood .

«La película es un homenaje directo a ese cine español de los años sesenta, pero también a Blake Edwards y a Tarantino , en este último caso, por los diálogos», explica el realizador, quien hace hincapié en la música «maravillosa» que ha compuesto Pablo Fernández , clave para el ritmo de la película.

En un piso de la plaza de Cuba

Porque «Para toda la muerte» se desarrolla, fundamentalmente, en un piso de la plaza de Cuba , es decir, en un ambiente cerrado , en el que son los diferentes y sorprendentes giros de guión y, sobre todo, el trabajo de los actores, entre los que se cuentan adictos a diversas aficiones o una enfurecida madre de familia, los que llevan hacen avanzar una película que termina volviéndose coral .

Estefanía de los Santos y Alberto López en «Para toda la muerte» ABC

Porque junto a Alberto López, que encarna al opositor José Vicente , también tienen protagonismo Fernanda Orazi («Taxi a Gibraltar»), María Cabrera («Señor dame paciencia») y el propio Alfonso Sánchez. A ellos se suman, personajes de entregas anteriores en pequeños papeles, como la cajera del banco (Antonia Gómez) de «El mundo es nuestro» o el cameo de Carlos Telmo , que apareció en «El mundo es suyo» .

Pero en el reparto destaca, sobre todo, Estefanía de los Santos , a la que se ha visto recientemente en películas como «Jaulas» y series como la segunda temporada de «La peste» , y que es otro de los grandes alicientes de esta «Para toda la muerte».

«El personaje está escrito pera Estefanía, una de las mejores actrices que hay en Españay sevillana», señala el director, para quien Alberto López «es lo más parecido que tenemos en España a Jack Lemmon » y que encarna la s desdichas del opositor José Vicente, a quien puede verse como toda una metáfora de Españ a.

«En este es un país en el que la mayor salida que ve la gente para triunfar es una oposición, resulta una metáfora extraordinaria. Antonio Banderas decía que en Estados Unidos todo el mundo emprendía y aquí todo el mundo quería ser opositor. Claro, porque en Estados Unidos te valoran por tu talento y aquí por tu lealtad y relaciones personales y sociales », señala.

Lo más miserable

Por ello, «cuando los parámetros para poder prosperar dependen de una cosa tan intangible, eso genera una ansiedad extraordinaria como ciudadanos brutal. Esto significa también hablar realmente de lo que somos como país . Durante mucho tiempo hemos querido ser como lo s europeos del Norte , qué cosa más absurda, si es que somos lo que somos. Cuanto antes nos aceptemos como somos, mejor, porque ese será el punto para prosperar y tira para adelante».

La desesperación del personaje de Alberto López, pero también la de buena parte de sus compañeros de reparto, es la que termina de configurar una comedia negra, en la que la situación de partida termina sacando lo más miserable de los personajes y que pregunta al espectador «¿somos todos tan buenos o tan malos como parece?».

El personaje que interpreta Alfonso Sánchez en la película ABC

«Cuando eres buena persona y tienes que matar , como mi personaje, y no por una razón concreta o por algo más espiritual o por tu familia, sino que tienes que matar por algo material, entonces ahí se complica el concepto y luego el hecho de matar», explica Alberto López sobre uno de los nudos argumentales de la película.

Popular como los Quintero

« Se usa el humor en la desesperación , con la comedia negra. La risa es la distancia más corta entre dos personas y es una forma muy empática de contar las cosas y también hacer pensar al espectador», añade el actor.

Humor que tiñe en buena medida algunas de las mejores obras que han hablado de este país, desde la novela picaresca a las películas de Luis García Berlanga. Porque como resume el director de la película, «en España nos reímos de todo, hasta de la muerte».

Porque esta película utiliza la comicidad para hablar de la realidad actual evitando los sermones y buscando siempre la complicidad con el espectador. «Esta es una película popular y nosotros somos creadores populares, en el sentido, por ejemplo, del teatro que hacían los Álvarez Quintero . Criticarlos, me parece un signo de elistismo y de estupidez muy grande», concluye Alfonso Sánchez.

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