Con el cartel de ‘entradas agotadas’ se abría una noche inolvidable para los afortunados que consiguieron hacerse con las entradas a tiempo. El poblado de Sancti Petri estaba hasta los topes, no cabía ni un alfiler; como está siendo habitual en los conciertos más esperados.
A pesar de eso, Raphael consiguió que la noche fuera de lo más acogedora y con el carisma que tanto le caracteriza demostró que estaba ‘Loco por cantar’ en Chiclana. Sus 56 años de trayectoria musical se reflejaron en las tablas del artista andaluz sobre el escenario. Bajo un manto de estrellas Raphael deleitó a todos con su voz inconfundible y consiguió que el público disfrutara de ‘Infinitos bailes’; acompañado de sus nuevos y renovados temas. Aún así, Raphael no se olvidó de sus clásicos más emblemáticos que disfrutó junto a su público.
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