«Biografía del silencio»: una tabla de salvación

Pablo d’Ors (Madrid, 1963) es un autor que se ha prodigado más en la novela que en el ensayo. Como narrador goza de una larga trayectoria , con cerca de diez títulos (desde «Las ideas puras» en el año 2000, a «Entusiasmo» , en 2017), y más que reputada con un discurso anclado en la mejor tradición literaria centroeuropea. En 2012, hace ya ocho años, llegó su «Biografía del silencio. Breve ensayo sobre meditación», el que sería su segundo «experimento» en el universo de la no-ficción. Recuerdo aquella primera edición de un libro sumamente breve, pequeño y muy discreto en sus pretensiones. En una palabra que le va muy bien al discurso que desarrollaba: humilde. Sin embargo, una cosa es lo que uno pretenda y otra muy distinta lo que resulte. Los lectores casi siempre tienen la última palabra y en esta historia se decantaron desde el primer momento por esta obra de aparente sencillez pero de muy hondo calado .

He aquí otro ejemplo del boca a boca. Y así han pasado ocho años y cerca de 150.000 ejemplares vendidos de aquella «Biografía del silencio», que abundaba en verdades como puños sobre el hombre contemporáneo y su necesidad de encontrar un camino de salvación o redención; de dar respuestas a un sinfín de preguntas que vagan en nuestras cabezas y que, en el fondo, tienen que ver con estar en paz con uno mismo. La novedad que presenta esta versión -ya no en la editorial Siruela que le dio la primera oportunidad sino en Galaxia Gutenberg- es que las palabras de Pablo d’Ors han sido traducidas al mundo de la imagen. El pretigioso pintor mallorquín Miquel Barceló sintetiza la síntesis -la redundancia es aquí intencionada- del mensaje de Pablo d’Ors. «Como casi todo el mundo -apunta-, también yo ando siempre persiguiendo lo que me agrada y rechazando lo que me repele. Estoy un poco harto de vivir así: atraído o repelido, corriendo en pos de algo...».