Una escultura de Hitler arrodillado, vendida por más de 15 millones de euros

La subasta ha batido el récord de su creador, Maurizio Cattelan, el mismo que acaba de instalar un urinario de oro puro en los baños del Guggenheim de Nueva York

También se ha subastado la pieza de Jeff Koons «Un balón en total equilibrio en un tanque»

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La temporada de subastas de arte en Nueva York ha comenzado fuerte. Este domingo la casa Christie's adjudicaba una estatua de Hitler arrodillado del artista italiano Maurizio Cattelan (el mismo que acaba de instalar un retrete de oro Guggenheim de Nueva York) por más de quince millones de euros.

La controvertida pieza muestra por detrás un niño pequeño arrodillado en oración. Sin embargo, cuando el espectador llega a verle de frente se encuentra con la imagen inconfundible de Hitler. Con esta obra, Cattelan, de 55 años, ha batido su récord, establecido en casi siete millones de euros.

Cattelan realizó la escultura en 2001 con cabello humano, cera y resina de poliéster y se trata de una de las tres ediciones que existen

, que fue incluida en la retrospectiva del artista que llevó a cabo el Guggenheim neoyorquino en 2011.

La misma casa subastaba también «Un balón en total equilibrio en un tanque», de Jeff Koons. El polémico artista creó esta pieza, en la que un balón de baloncesto aparece en suspensión dentro de una vitrina de agua destilada, en 1985. Se estimaba que alcanzaría los diez millones de euros, pero lo ha superado ampliamente, ya que ha alcanzado los 13 millones de euros.

Ambos trabajos se incluían en la subasta de Christie's titulada «Destinados a fracasar», en la que el propósito es «arrojar luz a los trabajos cuyo envoltorio pone en entredicho lo que el mercado del arte está dispuesto a llamar ''éxito'' en la búsqueda de crear algo nuevo e innovador», explica Loic Gouzer, el especialista en arte de posguerra de la firma.

En el caso de Cattelan, «el artista desafía los tabús de la representación al disfrazar el mal bajo un manto de inocencia», apunta este experto.

Ver los comentarios