Guerra abierta del cine contra el PSOE por la ley audiovisual
Los productores independientes lamentan que han pedido audiencia con Miquel Iceta, ministro de Cultura, y ni siquiera les ha respondido
Pedro Almodóvar, Isabel Coixet o Antonio de la Torre, entre otros nombres ilustres, han firmado un manifiesto que respalda a los productores
Por su parte, las cineastas denuncian que «esta norma perjudica a las mujeres» y que «el PSOE ha incumplido sus promesas»
Podemos, ERC y Bildu presionan al PSOE para defender al cine independiente en la ley audiovisual
El cine español se ha levantado contra el Gobierno de Pedro Sánchez , poniendo sobre sus hombros el peso de la responsabilidad de llevar al Congreso una ley, la audiovisual , que «da la puntilla» a un sector que siempre fue cercano al PSOE. Los productores independientes, reunidos sin fisuras este miércoles en el Ateneo de Madrid, han denunciado que el Ejecutivo quiere aprobar una norma que va contra la directiva europea, que además «se ha traspuesto tarde y mal» y que «desequilibra un ecosistema» ya de por sí frágil.
«Para nosotros es la guerra, y este acto es una declaración de intenciones», dijo María Luisa Gutiérrez , de AECINE, que todavía espera que «impere el sentido común» y los diputados «voten en conciencia» este jueves en el Congreso , donde se juegan la aprobación de la ley. Tal y como ha ido contando ABC en los últimos días, el grupo socialista incluyó una enmienda técnica en la comisión del Congreso que acaba de facto con la producción independiente. En concreto, la modificación del artículo 110.1, que permite que las productoras dependientes de las cadenas, por un mero formalismo pasen a ser categorizadas como independientes, pudiendo acceder al cinco por ciento de inversión que la nueva norma obliga a cadenas privadas y plataformas para este tipo de producción.
La guerra abierta contra el Ejecutivo de Sánchez llega en el último momento del trámite de la ley, tres años después de que se aprobara la directiva europea, un tiempo en el que el sector denuncia que han sido «ignorados». «Nos sorprende que el gobierno socialista no nos haya escuchado», apunta Jordi Oliva , presidente de PROA. «Nosotros hicimos alegaciones en las dos consultas públicas y no se nos escuchó, pasó el trámite tal cual como se planteó. Y después, cuando descubrimos la "enmienda técnica", escribimos a Miquel Iceta (ministro de Cultura) y ni nos ha contestado», señala Oliva, que denuncia que el sector ha sido «abandonado por el Gobierno». «No es justo cuando se llenan la boca con que España es la panacea audiovisual. Lo es para los de fuera, pero para los de dentro es una verdadera tortura», remató.
A última hora del miércoles, la plataforma de productoras difundió un manifiesto de apoyo «por la justa reclamación de la protección del productor independiente» en la que denunciaban que el jueves «se puede aprobar la sentencia de muerte para la industria audiovisual española por un simple cambio de una palabra en la enmienda técnica introducida por el PSOE ». En el manifiesto, firmado por Pedro y Agustín Almodóvar, Icíar Bollaín, Isabel Coixet, Antonio de la Torre o Álex de la Iglesia, entre más de un centenar de cineastas, se señalaba que la reclamación «no es ideológica, sino unos derechos básicos», además de evidenciar «su escándalo por el atropello que pretende llevarse a cabo en España».
A contrarreloj y entre amenazas
El sector se ha reunido a la carrera para presionar a los diputados a 24 horas de la votación clave. Si mañana se aprueba la ley, se envía al Senado, donde se ratificaría tal y como está o, en caso de votar en contra en la Cámara Alta, volvería al Congreso, donde se abriría el debate de todos los artículos. Algo que ningún partido quiere con la multa de Bruselas en el aire. Por lo que los socios de Gobierno de Sánchez han pactado este miércoles una enmienda transaccional para modificar los cambios del PSOE en el texto, lo que de, aprobarse, tumbaría la enmienda del 110.1 y daría algo de aire a los independientes.
En caso de que esto no suceda, todas las asociaciones de productores han anunciado que aumentarán la presión al Gobierno, incluso amenazan con pedir amparo a Europa porque la ley audiovisual que ahora está en el Congreso, enmienda incluida, va «contra la directiva». «La base de la directiva europea de 2018 es 'proteger al productor independiente' y la 'diversidad cultural'», señaló María Luisa Gutiérrez, para denunciar que la norma europea dejaba a los estados varios caminos para lograr esos objetivos.
Sin embargo, el PSOE eligió uno «muy pequeño». Se refiere a que Francia ha pedido una inversión mínima del 20 por ciento , e Italia del 17 por ciento. «La transposición que han propuesto, lejos de acercarnos a Europa, nos aleja, porque los propios obligados pueden cumplir con la obligación invirtiendo en sí mismos», desgranó. «Por eso la ley tiene que encauzar la definición de productor independiente, para no dejarnos en desventaja con los demás».
Iceta, desaparecido
La gran ausencia en toda esta batalla que el cine independiente lleva dando los últimos días es la de Miquel Iceta. El ministro de Cultura no se ha posicionado ni en defensa de la ley de su Gobierno ni para apoyar a un sector que siempre le fue cercano. «A Cultura solo le pedimos que nos defienda», exclamaron en el Ateneo de Madrid. Porque la negociación de la ley audiovisual se ha llevado desde el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital. «Ellos tienen otras prioridades, que no es la de potenciar el talento español, pero Cultura no ha tenido ni la capacidad ni a veces la voluntad de reaccionar para revertir la situación», lamentó Oliva.
Por su parte, José Nevado , director general de PATE productores, señaló que «quien toma las decisiones es el presidente». «No sabemos si entregar a Economía esta ley es la mejor solución, pero el problema es que tiene que dar una solución porque somos empresas que queremos hacer negocio y defender la identidad cultural frente a las multinacionales de fuera, y no solicitamos tener mejores condiciones que el resto, solo las mismas», remató.
Conviene recordar que la tramitación de esta ley nació viciada desde el principio. En diciembre, cuando Nadia Calviño, vicepresidenta y ministra de Economía, presentó el proyecto de ley, ERC la usó como moneda de cambio para aprobar los Presupuestos Generales del Estado. Los independentistas exigieron que las grandes plataformas internacionales incluyeran en sus catálogos un porcentaje mínimo de obras en catalán o las restantes lenguas cooficiales, algo a lo que el Gobierno se negó. Como contrapartida, ERC consiguió que una parte de ese 5 por ciento destinado a los productores independientes se destinara a la producción en catalán.
Las mujeres cineastas, también contra la ley
La asociación de mujeres cineastas CIMA también denuncian que se hayan «desestimado y maltratado» las enmiendas a los artículos 113, 114, 116 y 117 que ellas plantearon para proteger la inclusión de una cuota adecuada, «tanto en los catálogos y las emisiones anuales, como en el dinero destinado a la producción por parte de los prestadores de servicio de comunicación audiovisual televisivo, para las obras dirigidas o creadas exclusivamente por mujeres».
Según señalan en un comunicado, sus alegaciones y sugerencias de enmiendas se han realizado « en la confianza de creer contar con un gobierno que aseguraba que nunca haría una Ley que perjudicara a las mujeres ». «Pues bien –denuncian las cineastas– el todavía proyecto de ley que no solo perjudica claramente a las mujeres , sino que las hace retroceder».
«Nuestros derechos se desvanecen en declaraciones ajenas a un verdadero compromiso de cambio y avance hacia la igualdad. Si se pierde la oportunidad de dejar estas medidas claramente expuestas en esta Ley, se perderán decenios en el camino hacia la igualdad, lo que resulta extremadamente grave», reza el comunicado, en el que desvelan que contaban « con una promesa del PSOE que ha sido incumplida ».
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