Sin dejar de trabajar y a miles de kilómetros de casa, así es la Navidad de los militares gaditanos en el exterior

Allí, cuentan a este periódico, «no dejan entrar ni a la pena ni a la tristeza, aunque sí hay algunos suspiros de melancolía por estar tan lejos de casa en Navidad». Con 235 personas a bordo, y tras haber cumplido ya los dos meses y medio sin bajar a tierra, la fragata 'Reina Sofía' «es una gran familia que celebra la cena y comida de Navidad juntos. De los congeladores y despensas del barco, salen los productos navideños embarcados en España para la ocasión », trasladando a los hombres y mujeres que componen su dotación, «muy cerca de las mesas de sus casas. No faltan los polvorones y algún ‘cocinillas’ hasta se atreve con recetas de pestiños».

Además, dentro de las medidas de seguridad permitidas y del cumplimiento de la misión, el barco de la Armada Españoal intenta amenizar estas fechas tan señaladas. De hecho, han organizado diferentes actividades como concursos de belenes, villancicos o postales . El objetivo, «no perder la sonrisa».

Para Nochevieja y Año Nuevo, la 'Reina Sofía' tiene previsto visitar el puerto de Duqm en Omán . Aunque tendrán que permanecer en el barco, también intentarán que esa noche sea especial. «El casting para dar las campanadas ya está abierto y no descartan tomarse las uvas dos veces, una en horario omaní y otra en horario peninsular», cuentan divertidos.

A pesar de estar en puerto, la pandemia del Covid-19 limita por completo los movimientos de la dotación, que permanece en una burbuja libre de coronaviru s desde su salida de Rota el pasado dos de octubre. «Si no fuera así, podrían recibir visitas de familiares y amigos con quien compartirían la Navidad», detallan desde el buque. Pero este año no podrá ser.

Advierten de que, aprovechando su proximidad a Oriente, los Reyes Magos llegarán previsiblemente a la 'Reina Sofía' antes que a España … La ilusión también llegará al barco gracias a ellos y a los paquetes que han enviado los familiares de los miembros de la dotación.

Un equipo, el de la fragata 'Reina Sofía' que quiere mandar «un mensaje de esperanza e ilusión a todos los gaditanos en unas fechas tan señaladas y después de un año tan complicado . Enviamos todo nuestro cariño y los mejores deseos para un 2021 libre de Covid y que desde Oriente, pronto podamos recibir por fin, unas ansiadas vacunas».

Pasarán estas fiestas muy lejos de sus casa, echando de menos a la familia y los amigos. «Los cafés, caminar por el Paseo Marítimo», rememora el marinero Pablo Vázquez Poce . «Las comidas navideñas con las bromas entre hermanos, aunque este año estaría complicado», añade el cabo Luis Alberto Rodríguez Bilbao .

Las nuevas tecnologías hacen que puedan sentir a su gente más cerca, tanto con llamadas como con videollamadas «se nota mucho más cercano el apoyo de la gente que se deja en casa», asegura el marinero Vázquez, algo que facilita enormemente la misión. Regresarán a casa en un par de meses e intentarán aprovechar el tiempo perdido con los suyos. El cabo Rodríguez tiene claro qué será lo primero que hará a la vuelta, «respirar profundo ese aroma inconfundible de Cádiz mientras atravieso el Puente de la Pepa y poder decir, '¡Aquí estoy, Cadi!' Además, ver a mis sobrinos y darle un beso muy fuerte a mi madre».

En Malí los infantes de Marina del Segundo Batallón de Desembarco del Tercio de Armada también celebran la Navidad. Cenan todos juntos, aunque algunos están de guardia o de patrulla. «Estoy totalmente seguro de que pasaremos muy buenos momentos rodeados de risas, estupendos compañeros y sobre todo grandes amistades», explica antes de Nochebuena el soldado Salvador Callealta Vega . Todo ello, puntualiza el soldado Sergio Ceballos Delgado , «manteniendo las medidas de seguridad e higiene anticovid».

Unas «Navidades diferentes» que intentan animar también con videollamadas a sus familias y seres queridos. Y es que, como afirma el soldado Ceballos, «a nuestros familiares se les juntará la pandemia con que estemos fuera nosotros». Esta rotación de infantes de Marina de San Fernando desplegó en el país africano el pasado mes de noviembre y allí permanecerá durante seis meses, realizando cometidos de protección y patrullas en la misión de la Unión Europea EUTM-Mali. « Este año serán unas Navidades especialmente difíciles por la situación que estamos viviendo . Es una época donde la familia se reúne y está más unida, sin embargo no podremos juntarnos nosotros con ellos por estar de misión y ni siquiera toda la familia allí por las circunstancias», declara a LA VOZ el soldado Callealta.

Piden a la gente que disfrute de las fiestas pero con prudencia. Y dejan un mensaje, «desde Kulikoro, de parte de EUTM - Mali XVII, os deseamos una Feliz Navidad y un prospero Año Nuevo. Con deseo de que venga el nuevo año 2021 cargado de buenas noticias para todos los gaditanos y así dejar atrás un año tan duro como el 2020. ¡Felices Fiestas!».

Desde Irak también quieren dejar un mensaje de «esperanza y ánimo» dos legionarios gaditanos , el sargento J.I.L.R. y el soldado J.S.B., «para aquellas familias que han sufrido la pérdida de su puesto de trabajo y que a duras penas llegan a fin de mes o han padecido el fallecimiento de un ser querido». «Espero que este nuevo año nos devuelva a todos nuestra vida cotidiana y costumbres, que consigamos reunir a todos los miembros de la familia sin ningún tipo de recelo o temor y podamos volver a fundirnos en un fuerte abrazo con todas aquellas personas que estimamos y que en este momento sienten la ausencia de sus seres queridos», narra el sargento. «Creo que si algo hemos aprendido en esta aciaga época es que el humano no está capacitado para vivir aislado y en soledad, necesitamos el incondicional cariño y apego de nuestros seres queridos. Por lo tanto, cuando la vacuna nos retorne a nuestros hábitos diarios, no perdamos la oportunidad de abrazar, besar y expresar todo aquello que verdaderamente sientes por dichas personas, sin olvidar que hubo un tiempo en el que tuvimos limitada nuestra libertad de emoción», detalla. Al tiempo que desean «un feliz y próspero año nuevo a todos los gaditanos y que este año puedan cumplir todos sus objetivos, metas y proyectos de futuro».

En Irak, enmarcados en la misión de la OTAN, estos militares gaditanos destinados en el del Tercio 'Duque de Alba' 2º de la Legión, intentan, junto con sus compañeros, que las fechas marcadas de Navidad sean «especiales y diferentes» , sin olvidar la prioridad, «cumplir con nuestras misiones diarias». Así pues, «aprovechamos el suministro de productos procedentes de nuestros familiares y compañeros como turrón, jamón y queso para compartirlo y disfrutar» de estos días.

Estar fuera de casa es algo «intrínseco con nuestra profesión» afirman. Pero este año todo es más complicado. « Seguimos muy de cerca y con preocupación todo lo que acontece en España a cerca de la Covid-19. Cuesta no empatizar cuando aparecen reflejadas en la prensa las cifras diarias de nuevos casos y fallecidos, o cuando hablamos con nuestros familiares y conocemos la noticia de algún que otro miembro de la familia afectado por ello», declaran.

Pensando en lo primero que harán a la vuelta, ya se imaginan un escenario sin Covid. El sargento J.I.L.R. lo tiene claro, «visitar a toda mi familia sin excepción y, si el virus lo permite, realizar un viaje con mi pareja, recompensándola por todo el esfuerzo y sacrificio que está llevando a cabo». Al igual que el soldado J.S.B, «lo primero que haré será ver a mi familia e invitarles a comer. Y, por supuesto, bajar a la plaza de Loreto con mis amigos de toda la vida» .

El buque escuela de la Armada Española Juan Sebastián de Elcano , que se encuentra realizando su undécima vuelta al mundo recibirá el Año Nuevo en Manzanillo (México) puerto en el que permanecerá desde el 24 de diciembre al 1 de enero, fecha en la que pondrá rumbo a Honolulú.

«Serán unas navidades atípicas, marcadas no solo por el distanciamiento con nuestras familias y seres queridos , sino por las restricciones a la movilidad provocadas por la Covid. En principio se organizan cenas y actividades a bordo del buque para esparcimiento y entretenimiento de la dotación», detallan a este periódico desde el Elcano.

Una dotación que, como señala el sargento José María Lavilla Gómez, es una «familia» que se reconfortan los unos a los otros. «Son unas Navidades diferentes, tanto para los que se encuentran en casa como para nosotros que estamos navegando, la marcada diferencia que está generando esta pandemia nos afecta incluso en la distancia», declara el marinero Jesús Ruiz Rocha . «A pesar de estar separado de mis seres queridos, a bordo toda la dotación colabora para que ese sentimiento de lejanía sea mitigado por la calidez y compañerismo reflejado día a día a bordo haciendo de estas navidades unas fiestas únicas».

«Estas navidades son atípicas para toda la población española debido a la adversa situación que vivimos en el mundo a día de hoy y, por supuesto, también lo es para la dotación de este barco compuesta por 236 españoles. Para muchos de nosotros esta será la primera Navidad que pasaremos lejos de nuestros hogares y para otros miembros de la dotación será la segunda Navidad que pasarán lejos de sus familias», declara el guardiamarina Pedrós Martínez-Vares . «Es innegable que pasar estas fechas lejos de nuestra familia y lejos de nuestro país es un reto a superar, sin embargo, navegando a bordo de este buque e integrándome por primera vez en la dotación de un barco de la Armada Española, me he dado cuenta de que mis compañeros y yo somos unos afortunados por estar formando parte activa de esta bonita hazaña. Afortunados de estar completando una vuelta al mundo que representa mucho más que cualquier otro viaje realizado por este barco. Afortunados por estar navegando a vela en un barco único y por lugares que jamás hubiese visto de otra manera. Representa la capacidad de los españoles para sobreponernos a los obstáculos que se interponen en nuestro camino, representa el firme compromiso de una dotación volcada en el servicio a nuestro país y representa la voluntad de los marinos españoles de ser fieles transmisores de la herencia que hemos recibido de navegantes tan ilustres como el que da nombre a este barco. Creo que este viaje es un compromiso con España y con su historia que no se podía dejar pasar por alto y por todas estas razones no cambiaría por nada del mundo pasar las navidades de esta manera».