Una participación «disfrazada»

Aunque el promotor del plan ha sido el hasta ahora concejal de Participación Ciudadana, Paco Cano , ahora pasará a ser responsabilidad de la nueva concejala que ha entrado en el equipo de Gobierno tras la dimisión de David Navarro, Rocío Saéz .

A pesar de que la participación y la transparencia han sido una de las máximas del equipo de Gobierno liderado por José María González Santos ‘Kichi’ desde su llegada a la Alcaldía en 2015, esta política inclusiva y de puertas abiertas a la ciudadanía prometida en su primer discurso de investidura no ha llegado a materializarse .

Es más, durante todo este tiempo ha habido un distanciamiento con las asociaciones de vecinos (con una trayectoria histórica en participación) a favor de otras asociaciones y entidades que incluso han nacido en los últimos años.

Ahora, con este plan, el Gobierno local pretende que la participación ciudadana en la capital gaditana se convierta en una realidad.

En el borrador del mismo se argumenta que la simbología de la mesa o el tablero, «ayuda a visualizar la idea de un lugar para compartir, para nutrirse, para debatir, para aprovisionarse, para participar . La comunidad, la ciudad, es una mesa donde alimentarnos de manera colectiva».

El tablero de la mesa (una especie de Laboratorio de la Ciudadanía ), según el equipo de Gobierno, servirá como escenario de un conjunto de acciones pedagógicas, formativas, performativas e informativas transversales destinadas a crear conciencia de ciudadanía, a generar compromiso de colectivo, a potenciar redes de cuidados autogestionadas, a fortalecer tejidos, a difundir derechos, a informar sobre procesos y posibilidades de participación, a desarrollar sistemas de apoyos y ayudas, a promocionar la devolución social y el retorno al colectivo, a defender la pluralidad de voces y sensibilidades como elemento enriquecedor, a facilitar la accesibilidad, la información y la transparencia en la comunicación entre institución y ciudadanía y a «formar una ciudadanía activa, comprometida y responsable».

En definitiva, una escuela contemporánea de ciudadanía en la que tengan cabida talleres, charlas, acciones colectivas, arte colaborativo, exposiciones, debates, encuentros en los que la ciudadanía sea el sujeto político activo y central. Para Adelante Cádiz, « a participar se aprende participando y, por ello, «queremos facilitar competencias y habilidades para asumir la responsabilidad que la participación conlleva».

El tablero está sustentado por cuatro patas: Cádiz habla, Cádiz debate, Cádiz convive y Cádiz piensa .

La primera de ellas, Cádiz habla , pretende ofrecer a la ciudadanía canales tecnológicos de participación para «garantizar que sea consultada en asuntos estratégicos para la ciudad o cuando así se solicite por una parte sustancial de la propia ciudadanía». Igualmente promueve los debates, la posibilidad de presentación de propuestas o ideas, la notificación de incidencias, etc.

Para el desarrollo de esta pata se pondrán en marcha varias herramientas como la página web www.decidecadiz.com ; un canal de whatsapp; páginas o perfiles de la delegación de Participación Ciudadana en las redes sociales; espacios abiertos a la ciudadanía participativa en los medios públicos (Onda Cádiz TV y radio), así como en las pantallas municipales; además de un teléfono fijo o un buzón presencial para llegar a ese núcleo de población que no puede acceder a las TICs.

Por otro lado, en la segunda pata, Cádiz debate , se generarán espacios de deliberación como mecanismos de organización participativa. Dentro de estos espacios está previsto la adaptación del actual Reglamento de Participación Ciudadana a la Ley Andaluza y la creación de creará una Comisión Ciudadana de Participación.

La tercera pata, Cádiz convive , pretende poner en marcha las Comunidades de cuidados vecinales, un espacio de atención primaria para el cuidado y apoyo de las personas. Asimismo, los Espacios de Convivencia.

El equipo de Gobierno deja claro en el borrador que existen varios espacios y locales municipales cedidos a asociaciones o colectivos concretos «cuyo uso no está siendo el adecuado y no producen devolución social». En este apartado, el Gobierno de Kichi podría encontrarse de frente con numerosas asociaciones que llevan años ejerciendo su labor en determinados espacios y que ahora, tras la aprobación de este plan, podrían salir de ellos.

Argumentan que «hay que reivindicar el valor de uso de los espacios frente al valor de cambio de estos» añadiendo que para evitar estos usos perversos de espacios y locales públicos, vamos a poner en marcha el proyecto Cádiz convive mediante el que recuperaremos varios espacios municipales cuyo objeto social no se desarrolla según los intereses ciudadanos y serán cedidos a proyectos colectivos en los que varias entidades o colectivos pongan en marcha un espacio para la ciudadanía de cogestión con la institución municipal.

Uno de estos espacios serán las Bóvedas de San Carlos , que serán puestas a disposición de proyectos que trabajan la idea de reutilización y reciclado.

Por otro lado, el Casino gaditano , donde una vez que el Ayuntamiento recuperó la gestión de este espacio municipal, aseguran que «se está reconveniando con los distintos actores implicados en su gestión para poner en orden una situación compleja y que afecta a terceras personas (trabajadores de la Asociación Casino gaditano)».

Destacar que la gestión del Centro de Negocio situado en la tercera planta está siendo desarrollada por IFEF y la coordinación general del proyecto se lleva a cabo desde la delegación de Empleo. Igualmente están implicadas las delegaciones de Patrimonio Municipal, Urbanismo y Cultura.

Otro espacio será el de Aires de Cádiz (que cambiará de nombre). La cesión de este espacio situado en las murallas de Santa Elena estaba en un proceso de contencioso administrativo judicial. Según confirman «se ha llegado a un acuerdo con la coral concesionaria y se va a poner en marcha un espacio dedicado a la música más abierto y cogestionado entre tres asociaciones. De igual manera, la Escuela de Música Moderna y Jazz de la UCA tendrá posibilidades de desarrollar actividades allí, así como el propio Ayuntamiento». Por último, la asociación Buenavista, que tras problemas judiciales y enfrentamientos entre asociaciones, se ha recuperado el espacio.

No obstante, hay más espacios en estudio, según consta en el borrador.

La última pata es la de Cádiz se Piensa , un proyecto dirigido a crear un Plan de Ciudad participado para la próxima década y que se ajuste a las directrices de la Agenda 2020/2030 de la ONU.

Una vez presentado el borrador, está previsto que con el inicio de septiembre se abran las mesas de reflexión.