Los socialistas empiezan a contar votos

Lo que está en juego son nada más y nada menos que 405.000 votos, una parroquia muy apetecible que el PSOE está empezando de tratar a conquistar porque se prevé que la próxima cita electoral, la del 26 de junio, tenga unos resultados tan apretados como la del 20D, cuando los socialistas vencieron a los populares en Andalucía por el ajustado margen de cien mil votos.

Así, el PSOE va a presentar una proposición no de ley en el Parlamento andaluz para pedir un «trato justo» a las pensiones de los emigrantes retornados, a los que el Ministerio de Hacienda les exige una regularización fiscal específica, iniciativa a la que ha pedido a todos los grupos políticos que se sumen.

Según el PSOE hay varias sentencias que condenan a Hacienda a reconocer estas pensiones públicas de ciudadanos españoles que han cotizado en otros países extranjeros de la misma manera que las pensiones públicas cobradas en España.

Se trata de un problema que afecta a unos 180.000 emigrantes retornados, un colectivo muy numeroso y especialmente sensible. Y más en estas fechas con las urnas tan cerca.

El voto rogado

Otro problema muy diferente son las papeletas de los 225.000 andaluces que viven en 155 países de la Unión Europea. El sistema de voto rogado para estos emigrantes que se puso en marcha hace una legislatura ha resultado ser un «gravísimo error» según reconocía el propio secretario de Organización del PSOE andaluz, Juan Cornejo.

El sistema actual, muy complejo y que puede llegar a costar entre 50 y 60 euros a quienes quieran votar por los desplazamientos y certificados que se necesitan, ha reducido el número de estos votantes a un 5%, lo que supone una grave preocupación para los partidos, sobre todo el PSOEy el PP.

Es más, todos están de acuerdo en volver a cambiar este sistema, pero tendrá que ser ya en la próxima Legislatura.