Un «camello» de 79 años

A sus 79 años, se alejaba del habitual prototipo del anciano jubilado. Y no solo porque hiciera gala de una gran movilidad y una ajetreada «vida social». Si no porque estaba al frente de un negocio de venta de cocaína que operaba en la zona de ocio del Centro de la capital malagueña. La Policía Local, tras vigilancias, seguimientos e indagaciones, ha logrado su captura en una intervención en la que también fue arrestada su esposa, de 72 años.

El citado cuerpo afirmó en un comunicado que las pesquisas de los agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP) determinaron que el individuo se desplazaba por la ciudad con un turismo o una motocicleta, contactaba telefónicamente con los compradores y finalmente efectuaba las transacciones a pie.

Los agentes comprobaron, además, que el hombre utilizaba papel de un supermercado doblado en pliegues para envolver la sustancia.

La investigación culminó cuando, después de una vigilancia y seguimiento, los responsables del caso comprobaron cómo realizaba varias transacciones de cocaína, por lo que procedieron a su identificación. Durante este procedimiento, se le intervinieron en uno de sus bolsillos 250 euros en billetes fraccionados, procedentes presuntamente de la venta de droga.

También fueron intervenidos dos envoltorios de papel que contenían cocaína, y otros 13 similares que se localizaron en la guantera de la motocicleta en la que se desplazaba.

Posteriormente, en el registro de su vivienda se intervinieron 93,5 gramos de cocaína en roca, dos balanzas de precisión, una escopeta de caza y cartuchos, una pistola de fogueo y un total de 24.100 euros en el interior de bolsas ocultas en diferentes lugares de la vivienda, tales como bajo cuadros y adornos, o en huecos entre los cajones de una cómoda antigua.

Tras este registro fue detenida su mujer, también por un presunto delito contra la salud pública.