«El agua ya estaba tocando el techo del local cuando pudimos hallarla»

Flotando en el agua. Así fue como se encontraron, según José Manuel Borrego, jefe de Bomberos de Estepona, a la mujer fallecida en las inundaciones de Málaga. «Estaba en los sótanos del club, el agua llegaba hasta el techo y la chica se encontraba flotando en la estancia. Sin vida», describió Borrego, quien explicó que, «tras rescatar el cadáver, se puso en manos de la Policía Nacional». Los bomberos tardaron en acceder al Club California de Estepona. Cuando lo consiguieron, sólo encontraron el cuerpo inerte de la joven rumana de 26 años en el citado local de alterne. Se intentaron maniobras de reanimación sobre el cuerpo, pero nada se pudo hacer por ella.

«Se ha abierto una investigación sobre lo sucedido», añadió el jefe de Bomberos, que caída la noche del domingo seguía atendiendo incidencias en la Costa del Sol.

La chica, que se vio atrapada en el club, falleció tras llamar pidiendo auxilio y dar aviso a Emergencias. «Me llamó y le dije que se subiera en la barra, mientras llegaban los bomberos», aseguraba una amiga de la víctima en la puerta del local de alterne. Una mujer a la que la fallecida, supuestamente, llamó pidiendo auxilio al verse encerrada. 

Las informaciones sobre lo sucedido hablan de que se habría subido a la barra, como relataba la amiga, buscando tiempo hasta el rescate. Pero no se pudo hacer nada por su vida. Su cadáver fue rescatado en el interior del edificio, como si se hubiera hecho en el corazón de un pantano. Entraron los bomberos y la encontraron flotando, sin vida y con pinta de haberse ahogado. Las llamadas de socorro no surtieron efecto. Estaba atrapada en el interior del local, que se convirtió en una trampa mortal en el día de lluvia.

Los rescates de personas se prolongaron durante todo el domingo con mejor suerte. Pese al volumen de agua acumulado en la capital, la Costa del Sol y el Gudalhorce, no hubo que lamentar más víctimas mortales en Málaga. No fue así en La Línea de la Concepción (Cádiz), donde un empleado de una empresa eléctrica halló la muerte, durante la noche del domingo, arrastrado por una riada mientras estaba trabajando en un centro de transformación.