Ayuntamiento y Hermandad Matriz llegan a un principio de acuerdo respecto a la subida de tasas a las filiales

Las gestiones llevadas a cabo en las últimas fechas por la Hermandad Matriz de Almonte con respecto a la modificación de la ordenanza 2.22 reguladora de la tasa por puestos, barracas, casetas de venta, espectáculos o atracciones situadas en terrenos de uso público e industrial, callejeras, ambulantes y rodaje cinematográfico que incrementaba en un 135% el coste del uso del suelo por parte de las filiales durante la Romería del Rocío, han dado sus frutos.

Tras múltiples conversaciones el Consistorio almonteño y la Matriz han llegado a un principio de acuerdo por el que la tasa «sólo seincrementaría en unos pocos céntimos de euros», nada que ver con la subida inicial que ascendía de 1,70 euros el metro cuadrado que venían abonando hasta el momento a 4 euros para el suelo utilizado para la acampada de personas, mientras que el suelo para depositar carros y para el asentamiento de animales pasaba a costar de 1,40 euros a 3,30.

La nueva tasa, que además no se haría efectiva hasta la Romería del Rocío del año 2018 según lo acordado entre ambas instituciones, será aprobada en un próximo Pleno municipal. Este punto en concreto contribuirá «a calmar un ambiente bastante enrarecido» desde que se conoció la noticia de la subida de la tasa, señala el presidente de la Hermandad Matriz de Almonte, Juan Ignacio Reales. Además permitirá a las hermandades planificar con seguridad sus próximos presupuestos anuales de cara a las romerías venideras.

La medida será también expuesta por parte del Consistorio en la próxima Asamblea General de Hermandades donde los representantes públicos locales explicarán las razones de la misma.

El Ayuntamiento de Almonte estaría así reconsiderando una postura inicial que no tuvo en cuenta cómo afectaba la subida de la tasa al funcionamiento de la Romería, ni la opinión o el consejo de la Hermandad Matriz de Almonte, que se apresuró a manifestar su disconformidad con la medida y a presentar una batería de alegaciones que junto con las conversaciones establecidas con el Consistorio han dado como fruto este principio de acuerdo que queda a expensas de su aprobación oficial en Pleno.