Spiriman: «Me siento feliz, me han llamado compañeros llorando cuando se han enterado»

Las dimisiones del viceconsejero de Salud, Martín Blanco, y del gerente del SAS, José Manuel Aranda, saben a victoria en Granada. Lo que comenzó con un vídeo para denunciar la fusión hospitalaria –que ahora va a ser derogada– se ha convertido en un auténtico terremoto que no ha parado de azotar a la Junta de Andalucía en los seis últimos meses. Y lo que queda.

El principal artífice está pletórico. El médico granadino Jesús Cándel, conocido por su personaje Spiriman, se siente bien, «feliz». Lleva todo el día recibiendo llamadas de sus compañeros, algunos lacrimosos, para darle la enhorabuena. Han sido seis meses de pelea: cruces de duras declaraciones, manifestaciones multitudinarias... Cuando ya todo estaba hecho y nadie en Granada creía que la reordenación sanitaria tenía vuelta atrás, Candel lo ha conseguido. La derogación de la orden de fusión es el primer paso hacia la corrección de un modelo que no ha funcionado, lo que demuestra que «hay gente dentro de la Administración que tiene gana de escuchar y cambiar».

Candel quiere seguir dando la batalla, que prácticamente acaba de empezar. Advierte que seguirá denunciando con la Asociación Justicia por la Sanidad hasta llegar al origen de las fusiones hospitalarias «para defender y blindar nuestra sanidad pública». «¿Qué pasa con todos los que han ideado esto?», se pregunta. Ahora apunta a la consejera de Hacienda, que también lo fue de Salud, María Jesús Montero. «La asociación debe hacer justicia con esa gente que ha hecho tantas irregularidades, no ya ante el Parlamento, sino también ante la justicia».

Las plataformas lo celebran

Las Plataformas en Defensa de la Sanidad Pública de Granada, un heterogéneo ente que aglutina sindicatos, asociaciones de profesionales y partidos políticos, a excepción del PSOE, ha valorado en una nota de prensa lo acontecido este martes. Aplauden la derogación del decreto de fusión: «La ciudadanía y los profesionales han hecho posible lo que parecía imposible».

También las dimisiones de Blanco y Aranda son motivo de celebración para las plataformas, que esperan una buena predisposición por parte del nuevo equipo para abordar la reordenación sanitaria «de forma completa».