Festuival del Custodio
(Video) San Rafael, la medicina de Dios onmipresente en todos los rincones de Córdoba
Las estatuas en memoria del Arcángel reinan en la ciudad desde los puntos monumentales más señeros al interior de los establecimientos des restauración y los domicilios
La identidad cordobesa: del estoicismo al tópico senequista
La Medicina de Dios protege Córdoba por doquier. El Arcángel San Rafael está presente en todo lugar: en los pretiles de los puentes, en los hornacinas de las iglesias, sobre las tumbas de los cementerios, en los cruces de caminos, en los estantes de las tabernas, en las carteras de los cordobeses.
Nunca falta. Nunca falla. Siempre ahí. Vigilante. Atento. Y discreto, como mandan los cánones de esta ciudad ensimismada y melancólica, lejana y sola que escribió el poeta, rebosante de una belleza turbadora.
No hay rincón que quede desprotegido al manto sanador del Custorio que hoy, 24 de octubre de 2021 , viste a los vecinos de fiesta, aunque el traje de gala sea un chándal con el que remover un perol en el recinto ferial de El Arenal .
Si al Córdoba CF le va por fin bien es porque el Arcángel vela los destinos del equipo desde el graderío, porque es él quien acerca el balón a la portería contraria y le da tino al defensa y al guardameta para que el esférico no le dé una alegría al equipo visitante. Si la plaza de la Compañía no está sola es porque él está allí como un centinela incansable que aviva las conversaciones de los veladores y el asueto dominical de los cordobeses y de los turistas.
De Bodegas Campos al Ayuntamiento
Si el vino sabe como sabe en el Pisto de San Miguel y si las berenjenas con miel no tienen rival en Bodegas Campos es porque el Custodio se mete en las barricas y en los fogones. Si el gobierno de la ciudad anda derecho y tiene tino con sus desiciones es porque la pintura de Antonio del Castillo luce en la planta noble.
Si las mujeres atormentadas y enigmáticas que pintó Julio Romero de Torres desarman a quienes las miran en El Potro es porque allí, en todo lo alto, hay un Triunfo de San Rafael que hace sus deberes, como los cumple con una obedicencia de siglos en la Puerta del Puente o en el retablo de la esquina de las calles Lineros y Candelaria .
Y si esta mañana la ciudad amanece sana y dispuesta de encuentros, de abrazos y de felicitaciones es porque el Custodio sigue allí. En su iglesia del Juramento .
Noticias relacionadas
