Desde mi rincón

Es para hartarse

Si participación, la democracia se queda en partitocracia, lo que acaba en despotismo

Zona del futuro parque del Canal Valerio Merino
José Luque

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Estoy convencido que «sin participación ciudadana no hay democracia». Sin participación la democracia se convierte en partitocracia que, más temprano que tarde, deriva en despotismo . Entiendo por participación ciudadana el proceso que promueve la intervención informada y responsable de los ciudadanos en la toma de decisiones del colectivo en el que se integran. Centrándonos en Córdoba, los ciudadanos que la conformamos tenemos derecho a estar informados de manera puntual y clara de los proyectos que se desarrollan en la ciudad a nuestro cargo, y debemos participar libremente en ellos si aspiramos a conseguir esa Córdoba que queremos.

En varias columnas he escrito sobre el llamado cinturón verde , proyecto estrella de la Corporación actual. Y lo he hecho con espíritu crítico porque creo que Córdoba merece un proyecto mucho más generoso y valiente que el que presumimos se hace. Con el rimbombante nombre de Parque del Flamenco nos venden lo que, según parece, va a quedarse en una arboleda con una senda para andar o hacer deporte. Creo que perdemos la ocasión de hacer algo a la altura de la Córdoba que la historia nos entregó. Algo que cuando esté terminado no sea valorado como mucho mejor que el erial que teníamos, pero mediocre para lo que Córdoba merece. Confieso que esta mi opinión ha generado comentarios que, por su origen, producen tristeza. Dicen que criticar la gestión del actual gobierno es hacer campaña a la oposición . A quienes así piensan les digo que critico la gestión del actual gobierno porque esperaba mucho más de ellos. Pero pensar que por hacer crítica constructiva de la labor de unos es ensalzar a los otros es cosa de necios.

Permitidme decir que cuando los responsables de un grupo o sus correveidiles censuran a quienes participando democráticamente hacen crítica constructiva de su gestión, al tiempo que alaban y valoran a quienes interesada y falsamente los elogian, no sólo demuestran no ser demócratas , sino que se descalifican como líderes válidos del colectivo al que se deben.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación