Recolección de la uva en los viñedos de Montilla-Moriles en la pasada campaña
Recolección de la uva en los viñedos de Montilla-Moriles en la pasada campaña - ABC
CAMPAÑA 2015-16

Montilla-Moriles: Unos vinos «históricos» para conquistar el mercado

Las elevadas temperaturas produjeron una óptima fermentación y unos caldos de «excelente» calidad

CÓRDOBA Actualizado: Guardar
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La campaña de la vendimia en la zona Montilla-Moriles se cerró en octubre del pasado año con una disminución de la producción de en torno al 15 por ciento con respecto a la anterior pero con unos vinos actualmente en el mercado con una calidad «extraordinaria». Una vez más, la climatología estuvo detrás de esta bajada al ser la causante de que los frutos fuesen más pequeños y estuviesen deshidratados. Pero también fue la culpable de que la graduación alcohólica de las disintas variedades recolectadas haya sido muy superior a la de años anteriores.

Los bodegueros consultados por ABC señalan que una de las señas de identidad del fino cordobés se lo imprime las altas temperaturas. Si bien es cierto que el calor deshidrata la uva y merma la producción, también lo es que eleva el porcentaje de azúcar del fruto, que cuando fermenta da lugar a una graduación de alcohol difícilmente inigualable en otras zonas productoras, imprimiendo a estos caldos su quintaesencia.

«No recuerdo ninguna otra campaña con una fermentación tan alta», señala el gerente de la cooperativa La Unión, Antonio Martínez. «La calidad de los vinos ha sido extraordinaria y estos vinos habría que almacenarlos en barricas como recuerdo de una cosecha extraordinaria», indica el directivo de la entidad vitivinícola de Montilla.

Una década buscando la excelencia

La cosecha pasada los niveles de azúcares y ácidos en el grano de la uva fueron mayores de lo previsto ante los malos augurios. Pese a descender la producción, la calidad de la uva fue excelente, ya que las altas temperaturas de los últimos meses elevó los niveles de azúcares y facilitó una óptima fermentación natural.

A falta de que el Consejo Reguladora haga el balance definitivo de la campaña pasada y proceda a calificar con nota la cosecha, cabe decir que la última vez en que se logró la máxima valoración de los vinos recolectados fue hace 10 años, en la campaña 2004-2005. Aquellos caldos obtuvieron la calificación de «excelente». Por su parte, la valoración del marco regulador a la campaña de 2014-15 fue de «buena». Habrá que esperar a ver qué nota logran los caldos de esta temporada, que cuentan con el aval y la máxima satisfacción de los productores por su calidad.

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