POLICÍA NACIONAL

La jefa de Atención a la Familia en Córdoba: «Es duro denunciar a un hijo, pero sólo así podemos ayudar»

Francisca Prieto dirige un departamento de la Policía donde todo es «material sensible»

Francisca Prieto Merlos, en su despacho de la Comisaría de Policía Valerio Merino

Pilar García-Baquero

En un modesto despacho de la maltrecha Comisaría Campo Madre de Dios , la inspectora jefe Francisca Prieto coordina todos los casos de malos tratos ya sean entre parejas, menores, o de hijos a padres, que están a la orden del día. Por sus manos pasa todo «material sensible» por lo que la cautela al hablar en una entrevista con ABC de casos concretos es extrema.

¿En qué consiste su trabajo?

Al entrar por la mañana vemos todo en lo que se ha actuado de noche, desde denuncias a traspasos con detenidos, los que están en calabozos. Las funciones de la Grume están ligada a menores , desde la investigación, información y asistencia. Todos los delitos relacionados con menores pasan por esta unidad: desde violencia doméstica , de género a sexual. Se trata de un bloque donde tratamos tanto menores infractores como víctimas, independientemente del hecho. Desde el acoso escolar al «sexting» pasando por desapariciones . A nivel nacional no es así. Somos los encargados de dar el adecuado tratamiento policial cuando hay menores de por medio.

¿Hay más menores infractores que víctimas?

No sabría decirle. Depende del día. Hay semanas que tenemos cinco casos y otras ninguno.

¿Y por qué tipo de delitos?

Sí es cierto que hay bastantes casos de «bullying» , aunque Córdoba es bastante tranquila a nivel de seguridad. A veces la gente se asombra por las noticias que llaman la atención pero no es una ciudad conflictiva. Ni en menores ni en violencia de género. Córdoba está dentro de la media.

¿Qué situaciones son más sensibles?

En esta unidad, todas las situaciones son sensibles. Si tenemos en cuenta que desde la visión de esta unidad es la prevención , la investigación de infracciones penales como violencia de género, doméstica y sexual, además de la protección y el auxilio de las víctimas y todo lo relacionado con los menores, situaciones sensibles, todas.

¿Cómo se actuó en el caso del niño de 5 años menor de Ciudad Jardín que abandonó su madre?

Ahí, intervino un grupo de agentes que se encontraba en esa zona esa madrugada, uniformados en la calle, y fue una compañera la que tranquilizó al niño hasta que llegaron los bomberos, pero todos tenemos esa profesionalidad. Este fue un caso excepcional , puntual, porque no hay casos prácticamente de este tipo. Nuestra intervención consistió en estar un rato tranquilizándolo, mientras buscábamos a algún otro familiar, algún adulto, y atender al menor inmediatamente. En estos casos, lo primero es valorar si el niño está bien, llevarlo a Pediatría para que un médico lo examine. Lo comunicamos a Fiscalía de inmediato, vemos qué ha ocurrido y en qué situación estaba.

«Hay veces que las mujeres no son conscientes de ser víctimas de la violencia»

¿Y en violencia de género?

El Grupo de Investigación además de recepcionar la denuncia se encarga del tratamiento de los detenidos , la información de derechos a la víctima, e invitarle a qué recursos la podemos derivar. Lo primero que hacen es la primera valoración del riesgo, desde no apreciable a extremo pasando por bajo, medio y alto, Se le van a dar recursos tanto personales como policiales. No saldrá de Comisaría sin antes tener un Plan Personal de Seguridad a ella y a sus hijos. El Grupo de Protección empieza en cuanto tenemos conocimiento del hecho. Cualquier víctima de malos tratos, ya sean la mujer, sus hijos, su entorno.

¿Cómo se sienten cuando llega el juicio y la mujer retira la denuncia?

Hay veces que no son conscientes de que son víctimas de violencia . O que no quieren denunciar, o se echan atrás, eso no lo podemos evitar. Les aconsejamos y el equipo de protección le acompaña en todo el proceso judicial o policial, con un teléfono 24 horas permanente . Y el día del juicio le acompañan para que no caigan en dudas y se echen atrás. Pese a todo que no ratifiquen en el juzgado no lo podemos controlar. Lo más duro no es el final. Es que pongan la denuncia.

¿Y en los casos en los que son los hijos los que pegan a sus padres?

Son bastantes los casos, y llegan los padres a informarse y se enfrentan con la tesitura de ¿Cómo voy a denunciar a mi hijo? Nosotros somos conscientes de lo duro que es esa situación pero les decimos que si no denuncian no le podemos ayudar. No estamos en la mente del agresor , se le puede proteger pero quien hace las cosas es el maltratador no estamos en su mente.

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