TRIBUNALES

Crimen de Cabra | El juez concluye la investigación del caso, que será juzgado por un tribunal popular

El juzgado procesa al único detenido que permanece en prisión preventiva a la espera de juicio

El crimen ocurrió en la avenida Victoria Kent de Cabra en septiembre de 2019 ÁLVARO CARMONA

P. García-Baquero

El único investigado por el crimen del joven A.P.M., de 26 años en la avenida Victoria Kent de Cabra en septiembre de 2019 será juzgado por un tribunal popular . El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Cabra ha dictado auto de transformación de la causa abierta contra J.A.F., de 25 años en un jurado popular, según han confirmado a ABC fuentes del TSJA.

El juez concluye de este modo la instrucción del caso después de que una investigación exhaustiva por parte de la Policía Nacional cotejara el ADN hallado en la escena del crimen de Cabra y concluyera que coincidía con el del presunto autor de las puñaladas, J.A.F., de 25 años. La Policía Científica dio entonces traslado a la Autoridad Judicial del informe de las muestras recogidas en el lugar de los hechos en el que descartaban de esta forma la participación de una tercera persona en el crimen.

Durate este tiempo, el presunto autor de los hechos permanece en la prisión de Sevilla , sin que haya aportado demasiados detalles en sus declaraciones en sede judicial para aclarar el suceso, según han indicado fuentes de la investigación. Lo que sí se conoce hasta ahora, pese a que el arma aún no ha podido ser localizada , es que para cometer el crimen utilizó un cuchillo de unos 30 centímetros y hoja ancha para asesetar más de una veintena de puñaladas mortales rompiéndole las costillas a su paso. Estas mismas fuentes señalaban a ABC, que el arma aunque aún no fue localizada, «tenía una gran envergadura porque sólo un arma de estas características podría atravesar y romper las costillas de un joven sin partirse».

De esta forma, el presunto asesino de 25 años, J.A.F., que ingresó en la prisión acusado de homicidio podría enfrentarse también a un delito de tenencia ilícita de armas, ya que lo que utilizó no fue un cuchillo convencional o una navaja de bolsillo.

La investigación que acaba de concluir contó además con la declararación de la acompañante de la víctima así como los amigos de los implicados y familiares para inentar que arrojasen luz sobre las causas del asesinato pero sus declaraciones no fueron tampoco muy esclarecedoras.

Aparte de los datos que aparecen en el informe de la Policía Científica donde quedan cotejados estos restos de ADN hallados en el lugar del crimen, los expertos recopilaron el contenido de los móviles (fotos, whatsapp y llamadas) que fueron retirados. Lo que sí se sabe es que no hay nada raro en el móvil de la joven que lo acompañaba esa noche en el coche, la única testigo del crimen, según podo conocerse del transcurso de la investigación.

Secreto de sumario

Hay que recordar que el Juzgado de Instrucción 1 de Cabra decretó el secreto de sumario a las pocas horas de los hechos acontecidos en la madrugada del jueves al viernes del 20 de septiembre de 2019. Eran las 3.30 de la madrugada. Agustín P. M. estaba en su coche con la joven A.O.A. en la calle Victoria Kent del sector residencial R2 cuando se vieron sorprendidos por el presunto agresor.

Fuentes consultadas por ABC Córdoba apuntaron ya a que vícitma y verdugo no se conocían pero sí tenían referencias en común . Vivían a unos 300 metros el uno del otro en el casco urbano de Cabra. El presunto asesino en el número 44 de la calle Priego. Llevaba varios años en Cabra procedente de Honduras , viviendo con su familia en un inmueble concurrido por una popular frutería en sus bajos. La víctima, en la calle Doña Leonor. Su pandilla de amigos, empleo inestable, aparente vida normal.

Sin embargo, esas mismas fuentes explicaron que el joven asesinado A.P.M. y el hermano del posible agresor D.A.F., de 18 años , sí se conocían, de hecho, ambos protagonizaron un altercado que acabó con la intervención de los agentes tres meses antes del crimen.

Los únicos que quisieron poner tierra de por medio poco después del crimen fueron los familiares del presunto asesino que decidieron abandonar su domicilio en Cabra y marchar hacia la zona de Levante para evitar represalias por parte de los vecinos.

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