Jóvenes a caballo en la Feria de Córdoba
Jóvenes a caballo en la Feria de Córdoba - VALERIO MERINO
TRADICIÓN

Los caballos recuperan su sitio en la Feria de Córdoba

La jornada del jueves marca el máximo con más de 200 animales en montura y en enganches

CÓRDOBA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El caballo está creciendo muy significativamente en esta edición de la Feria de Córdoba, aunque más de la mano de los enganches que de las monturas individuales. Según apuntó Joaquín Zurita, presidente de la Asociación Andaluza de Doma de Campo, en este año el número de animales es superior al de otras ediciones y la mayor presencia se dio este jueves, con 136 jinetes, 7 amazonas, 25 limoneras (enganches con un caballo), 47 troncos (con dos) y 7 cuartas (con 7), además de otro tipo de enganches. Fue el único día en que las monturas individuales fueron superiores. Así, el domingo, pasaron por El Arenal 91 jinetes y 4 amazonas. Además, hubo 23 limoneras, 40 troncos y una cuarta, que lleva cuatro animales.

El sábado también había sido muy activo, con 31 jimenes, 10 amazonas y 110 enganches, con abrumador protagonismo de las limoneras y troncos sobre los demás vehículos de caballos.

La actividad decayó el lunes, como en todo el recinto, con 14 jinetes y poco más de treinta enganches, con mayoría (22) de aquellos que necesitan dos caballos. El martes volvió a ser un día de mucha actividad para quienes van en montura a la feria, con 36 jinetes, dos amazonas, 31 limoneras, 38 troncos y dos cuartas, cifras ligeramente por encima de las que se dieron el miércoles. Los datos existen gracias al control que se realiza en la entrada en El Arenal, junto a la portada, donde tienen que detenerse todos los responsables de estos animales. Allí los agentes de la Policía Local piden la documentación necesaria, que incluye un seguro de responsabilidad civil obligatorio y un certificado veterinario de que el animal está en buenas condiciones de salud para pasar al recinto.

Una inspección comprueba que los animales están en buen estado y tienen la documentación en regla

Más allá de eso, los agentes realizan además una inspección visual para comprobar que el animal no es víctima de malos tratos, y eso incluye por ejemplo las señales visibles de que se hayan utilizado espuelas. También es necesario, apuntó Joaquín Zurita, que los caballos que entren al recinto se encuentren «herrados en perfectas condiciones».

A partir de entonces, se permite que pasen al recinto y discurran por las calles señalizadas como apropiadas. Según Joaquín Zurita, desde hace años existen lugares de atención a los que se puede entrar sobre el msmo caballo, que hacen que los jinetes, amazonas y responsables de los enganches puedan atender a los animales.

Ver los comentarios