«Me llevan conociendo 50 años en el barrio, la parroquia y la hermandad y me respetan»

La hermandad del Amor ha iniciado una nueva etapa gestora. En esta ocasión, a través de la presidenta Rafaela Vázquez Cañete, una de las históricas de la cofradía. Fundadora de la cuadrilla femenina de la Encarnación e hija de Francisco Vázquez, ex hermano mayor de esta corporación, ya formó parte de la anterior gestora y ha decidido asumir la responsabilidad por el bien de la hermandad y, sobre todo, para que pueda celebrarse sin problemas la estación de penitencia el próximo Domingo de Ramos .

Varias son las razones que da a conocer Rafaela Vázquez para explicar el porqué de su decisión. Para empezar, fue el vicario de Jesús Divino Obrero , quien se lo pidió. A ello hay que sumarle que ella se sentía con el deber de concluir algunos trabajos iniciados por la anterior gestora. Destaca en este sentido, la nueva mesa de palio de la Encarnación , «ya que la actual se encuentra en muy mal estado». Lógicamente, le mueve –y mucho- que no haya problemas en la procesión.

Una vez acabada la Semana Santa tiene previsto abandonar la presidencia y ni siquiera se le pasa por la cabeza optar al cargo de hermana mayor. Para asumir esta etapa que tiene por delante considera muy importante «el equipo», del que forman parte Rafael Mantero (tesorero) y Juan Carlos Jiménez (secretario) .

Pero cómo afrontará el ambiente de crispación que hay en la hermandad. Para empezar, Rafaela Vázquez se siente respaldada. «Me llevan conociendo desde hace 50 años en el barrio, la hermandad y la parroquia y me respetan». Además, para lograr la pretendida unión, parte de la premisa de « hacer lo que me ha enseñado mi padre, que es que todos somos iguales y podemos ir de la mano ».