PASIÓN EN CÓRDOBA

Cada vez más cofradías de Córdoba contratan seguros de lluvia para Semana Santa

Ejemplo de estas previsoras corporaciones son la Sentencia o la Expiración

Costalero de la Sentencia en el interior de la parroquia de San Nicolás de la Villa de Córdoba Rafael Carmona

Eloy Moreno

La previsión meteorológica, aunque se acerque, no es exacta 100 por cien . La confianza puesta por las cofradías de Córdoba en distintos canales meteorológicos, o en expertos en las ciencias de la Meteorología, hace que, en muchas ocasiones éstas se arriesguen y pongan sus pasos en la calle o se vean obligadas que suspender su estación de penitencia.

Más de un susto se han llevado las corporaciones en estos años por culpa de las precipitaciones que han sorprendido a las hermandades en las cofradías en plena calle. Sin ir más lejos, está el ejemplo de la fuerte «tromba de agua» que calló el Domingo de Ramos del año 2016 y que obligó a la cofradía de la Entrada Triunfal a refugiarse en el instituto Góngora. Otras veces hay que suspender la estación de penitencia y, claro, el gasto que esto acarrea también supone un problema para la corporación.

En este sentido y de una forma previsora, varias cofradías de la ciudad se han animado a contratar un seguro de lluvia. «Nosotros venimos haciéndolo de unos año atrás, ya que, desgraciadamente, algún año puede llover y de esta manera poder paliar con parte de los gastos de la estación de penitencia », ha explicado el hermano mayor de la Sentencia, José Salamanca .

Así, por ejemplo, el seguro de la mutua de seguro UMAS, se encarga de cubrir los gastos ocasionados por la suspensión de las salidas por fenómenos climatológicos de lluvia o viento , siempre y cuando se cumplan una serie de factores determinados. De esta forma, gastos como las flores, cirios y otros aspectos que incluyen la salida procesional se verían solventados.

En este sentido, cubriría el gasto ocasionado por la lluvia cuando «la precipitación recogida dentro del periodo comprendido entre las cinco horas inmediatamente anteriores al inicio del acto descrito y hasta que transcurran sesenta minutos despues de haberse iniciado, fuese superior a tres litros por metro cuadrado». Por otro lado, en el caso del viento , se cubrirían los gastos cuando la velocidad sostenida del mismo -calculado en intervalos de diez minutos - «sea superior a 62 por hora, medidos dentro del periodo indicado en el párrafo precedente».

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