La dieta DASH previene los ataques de gota
La dieta DASH previene los ataques de gota - PEXELS
ALIMENTACÓN SALUDABLE

Las dietas ricas en frutas, verduras y cereales previenen la gota

Las personas que siguen una dieta rica en dulces y carnes rojas y procesadas tienen un mayor riesgo de padecer episodios de este tipo de artritis

MADRID Actualizado: Guardar
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La gota es una enfermedad causada por el exceso de ácido úrico en la sangre –o lo que es lo mismo, por la hiperuricemia– y la consecuente formación y acumulación de cristales de este ácido úrico en distintas partes del organismo, muy especialmente en las articulaciones, lo que causa una hinchazón y un dolor extremo. Una enfermedad que, por lo general, resulta más común en los varones que ya han superado los 40 años y que se encuentra directamente asociada a los estilos de vida ‘poco saludables’, caso del exceso de peso o del abuso del alcohol. Tal es así que las personas con predisposición a padecer gota deben cuidar, y mucho, su alimentación. Y en este contexto, investigadores del Hospital General de Massachussets en Boston (EE.UU.) han demostrado que la dieta denominada ‘DASH’, rica en frutas, verduras y granos enteros, es muy útil para prevenir la gota.

Como explica Hyon K. Choi, director de esta investigación publicada en la revista « The BMJ», «la dieta DASH supone un enfoque dietético preventivo muy atractivo para el riesgo de gota. Y además, también sirve para tratar la hipertensión arterial, enfermedad que padece la mayoría de los pacientes con gota. Así, la dieta DASH tiene el potencial para matar dos pájaros de un tiro».

Menos gota

La dieta DASH es un tipo de alimentación inicialmente diseñado para disminuir las cifras elevadas de presión sanguínea –de hecho, ‘DASH’ es el acrónimo del término ‘enfoques dietéticos para frenar la hipertensión’ en la lengua inglesa– y que se suele recomendar a aquellas personas que necesitan reducir su riesgo cardiovascular. Una dieta que, asimismo, parece también los niveles de ácido úrico en sangre. Entonces, ¿es posible que también sirva para prevenir la gota?

Para responder a esta pregunta, los autores analizaron los historiales médicos de 44.444 varones con edades comprendidas entre los 40 y los 75 años que, sin historial de gota, habían respondido cada cuatro años a distintos cuestionarios sobre sus hábitos alimenticios entre 1986 y 2012.

La dieta DASH se presenta como un enfoque dietético preventivo muy atractivo para el riesgo de gota
Hyon Choi

Los autores incluyeron a los participantes en dos ‘estilos’ de dieta en función de su modo de alimentación: dieta DASH, lo que implicaba que habían comido una gran cantidad de frutas, verduras, legumbres, productos lácteos semi o desnatados y cereales enteros, así como que habían evitado el exceso de sal, las bebidas azucaradas y las carnes rojas y procesadas; o una dieta occidental, caracterizada por una elevada ingesta de cereales refinados, dulces, carnes rojas y procesadas y patatas fritas.

Durante los 26 años de seguimiento se registraron 1.731 casos de gota. Y de acuerdo con los resultados, la dieta DASH redujo en hasta un 32% el riesgo de padecer gota –frente a un incremento del riesgo de hasta un 42% en el caso de seguir una dieta occidental–. Un beneficio, además, que resultó totalmente independiente de los principales factores de riesgo para la aparición de la gota, caso de la edad, el índice de masa corporal (IMC), la presión sanguínea elevada y el consumo de café y alcohol.

Dos pájaros de un tiro

En definitiva, y además de prevenir o tratar la hipertensión arterial, la dieta DASH, como indican los autores, «se asocia a un menor riesgo de gota, sugiriendo que esta disminución de los niveles de ácido úrico en los individuos con hiperuricemia se traduce en un menor riesgo de gota. En el otro extremo, la dieta occidental se asocia a un mayor riesgo de padecer gota».

Es más; como concluye Hyon Choi, «nuestros resultados también alientan la realización de estudios de intervención para evaluar los efectos de la dieta DASH sobre los niveles plasmáticos de ácido úrico en los pacientes con gota y en los ataques o agudizaciones de la gota».

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