«Birkenau», de Gerhard Richter
«Birkenau», de Gerhard Richter - Museum Frieder Burda

«Después de Auschwitz, sigue habiendo arte»

El Museo Frieder Burda de Baden-Baden (Alemania) inaugura este sábado una exposición con cuadros de Gerhard Richter, entre ellos el conjunto de cuatro lienzos titulado «Birkenau», junto a documentos de quince supervivientes del Holocausto

BERLÍN Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Adorno dijo que después de Auschwitz ya no era posible escribir poesía, pero Gerhard Richter, el pintor alemán y el artista vivo más caro del mundo, no está de acuerdo. «No es cierto. Se siguen escribiendo poemas y se siguen pintando obras de arte. Lo que sí es cierto es que en la pintura sobre Auschwitz hay un elemento nuevo. La fotografía que da testimonio del Holocausto nos enfrenta a un grado de verdad que nos remueve tan profundamente que cualquier intento de aproximación por parte de la pintura nos resulta, en contraste, indefensa e insatisfactoria», ha dicho el artista con motivo de la exposición que inaugura este sábado, 6 de febrero, el Museo Frieder Burda de Baden-Baden.

Junto a documentos de quince supervivientes del Holocausto, se exponen algunas de sus obras, entre las que destaca «Birkenau», que lleva el nombre del mayor campo de exterminio nazi y en el que murieron más de seis millones de judíos europeos.

Esta obra, un gigantesco lienzo pintado en 2014, fue presentada por primera vez hace un año en el Museo Albertinum de Dresde, pero entonces llevaba por título «Cuadros abstractos». «El título, la palabra Birkenau, arrastra tal efecto energizante que desborda. Por eso al principio evité utilizarlo, aunque no oculté cuál era el tema de la obra», explica el cambio, «mi propio concepto de la obra ha sufrido un proceso que ha durado mucho tiempo. En realidad, al principio, llegué a trabajar con fotos del campo de concentración, coros de mujeres prisioneras, lo concebía como una obra para el Reichtag, pero después abandoné el proyecto y solo mucho más tarde, al recuperarlo, tomó una línea abstracta que es lo que vemos aquí».

Consta de cuatro grandes pinturas abstractas basadas en fotografías en blanco y negro que hizo en secreto un prisionero judío del campo de concentración Auschwitz-Birkenau en agosto de 1944. Completan su significado bosquejos que Richter ha ido confeccionando desde la década de 1960. «Tuvo que pasar un tiempo hasta que pudiese encontrar la forma adecuada», reflexiona a sus 83 años sobre los colores sombríos que se superponen hasta que no se distingue la montaña de cadáveres de la foto.

Richter ha reconocido que el trasfondo de esta obra no la hace susceptible de entrar en el mercado del arte y considera que su destino es ser albergada en un museo o institución estatal, pero todavía no tiene destino y «esa es una cuestión que sin duda llevará todavía mucho tiempo», ha dicho. Y uno de los inconvenientes, aunque prefiera no comentarlo, es el precio. La próxima de sus obras a la venta es JImagen Abstracta», que será subastada por Sogyeby,s el 10 de febrero con un precio de entre 14 y 20 millones de libras.

Ver los comentarios