Accidente ocurrido recientemente en la N-IV
Accidente ocurrido recientemente en la N-IV - LA VOZ
INFRAESTRUCTURAS

Clamor entre los agentes sociales para acelerar el desdoble de la antigua N-IV

Los dos accidentes ocurridos en menos de un mes con cuatro muertos levanta una ola de protestas en favor de la obra

CÁDIZ Actualizado: Guardar
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La cuarta víctima mortal en menos de un mes en la antigua N-IV ha reactivado las movilizaciones en favor del desdoble de esta carretera que discurre de forma paralela a la autopista de peaje entre Sevilla y Cádiz (Ap-4). El accidente ocurrido el pasado martes en el kilómetro 588, a la altura de Las Cabezas, ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de quienes viven junto a esta vía de circulación que discurre entre las localidades sevillanas de Dos hermanas, Las Cabezas, Los Palacios, Lebrija y El Cuervo y se adentra en la provincia de Cádiz por el término municipal de Jerez. La protesta de alcaldes, vecinos y conductores no forma parte de un y culebrón de verano.

Al contrario. El pasado 4 de julio fallecían en el kilómetro 609 del tramo de Lebrija tres jóvenes sevillanas tras empotrarse su coche contra otro que venía de frente.

La N-IV, conocida como la Carretera de Andalucía, nace en Madrid y muere en Cádiz. El tramo entre Sevilla y Jerez es el único de su trazado que aún queda por desdoblar y soporta una media de 20.000 vehículos al día. La intensidad de circulación la han convertido en un punto negro del mapa nacional. Más de cien personas han perdido la vida en los últimos quince años en los casi 80 kilómetros que aún restan por desdoblar. Es una carretera muy utilizada por camiones y, especialmente, por los vecinos de las poblaciones que jalonan su recorrido.

La situación ha llegado al límite. De hecho, la patronal de empresarios de Cádiz elaboró a mediados del pasado año un informe con las principales prioridades empresariales de la provincia de cara a las elecciones generales del 20 de diciembre. Entre ellas destacaba la culminación de algunas infraestructuras claves para el desarrollo de la provincia y figuraba como urgente el desdoble de la N-IV y la eliminación del peaje de la AP-4. Se trata de una reivindicación histórica de los agentes sociales de Cádiz, ya que esta carretera funciona como canal de distribución de las mercancías que salen de Cádiz con destino a Madrid. Las empresas de transporte se resisten a circular por la autopista debido al sobrecoste que produce para sus intereses el peaje.

Los dos últimos accidentes han generado un nuevo ambiente de crispación, mayor si cabe que en otras ocasiones, debido a su inmediatez, donde los alcaldes de Las Cabezas, Lebrija, Villafranca y los Palacios han tomado partido para exigir sin más dilación su desdoble. Los regidores se han dirigido por carta al Ministerio de Fomento para que acelere las obras y no dilate más en el tiempo el proyecto.

La conversión de este tramo en autovía se fraguó en 2006, pero los recortes en obra pública generados por la crisis económica dieron al traste con el desdoble. El PP rescató el proyecto en 2014 y reservó la primera partida para su financiación en los presupuestos de 2015. Así, el Ministerio de Fomento consignó ese año los primeros nueve millones de euros para iniciar la obra de desdoble de 8,4 kilómetros en el tramo entre Dos Hermanas y Los Palacios.

Más de un centenar de personas ha perdido la vida en este tramo en los últimos quince años

La primera fase de la obra supone una inversión de 43,6 millones de euros, según la oferta que se hizo con la obra, cuyo plazo de ejecución es de 36 meses. Los trabajos comenzaron a primeros de 2016, sin embargo, las quejas de los alcaldes y vecinos no se hicieron esperar al advertir una paralización de los mismos al poco tiempo de iniciarse. Desde la Delegación de Gobierno en Sevilla se puso de manifiesto que la ralentización obedecía a unos informes técnicos solicitados por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. Alcaldes, vecinos y empresarios se han cansado de esperar y exigen ahora la culminación de la obra cuanto antes y su extensión hasta Jerez.

El exceso de circulación de camiones que soportan algunas vías del país llevó al Ministerio de Fomento a plantear en 2014 una iniciativa sin precedentes para desviar parte de esta circulación a las autopistas de peaje más próximas. El acuerdo entre Fomento y la patronal del Transporte se alcanzó en la primavera de 2015. El plan se puso en marcha como experiencia piloto entre el 1 de julio y hasta el 30 de noviembrecon carácter voluntario para los camioneros. La medida se aplicó en seis tramos de carreteras que sumaban 326 kilómetros, entre ellas la antigua N-IV. Fomento asumíó el 50% del peaje y con la medida se logró desviar unos 200 camiones del siniestro tramo de la N-IV entre Dos Hermanas y Jerez. No obstante, la intensidad media de paso de vehículos por esta carretera se redujo durante los años de la crisis, sin embargo, la mejora económica ha devuelto a la N-IV la circulación y los accidentes.

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