MERCADO DE TRABAJO

Cádiz quema el sueño laboral de los jóvenes

Los menores de treinta años que están en paro superan a los que trabajan en la provincia, que se coloca a la cabeza del desempleo juvenil

CÁDIZ Actualizado: Guardar
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La tan cacareada recuperación económica debe llegar por barrios y desde luego ni se ha acercado a los jóvenes. Desde que comenzó a disminuir el paro el trabajo ha sido únicamente para los que tienen experiencia previa. Las empresas han vuelto a recurrir a aquellos que conocen la actividad, sin dar cabida siquiera para el aprendizaje de los que quieren meter cabeza. Hace años que la tasa de paro joven se instaló por encima del 50% en Cádiz y no ha bajado de ese terrible tope. Todavía son más los menores de treinta años que están en paro que los que tienen una ocupación sin que ningún plan, curso de formación o inversión pública haya logrado avances.

El Observatorio Argos, dependiente de la Consejería de Empleo, ha elaborado un informe sobre la situación con los datos de 2015 que muestra una imagen todavía amarga.

Los parados de 16 a 29 años suman en Cádiz 56.400 –el 51% de los que están en edad de trabajar y quieren hacerlo–, aunque no son todos los que están registrados como demandantes en las oficinas del SAE. Si bien el número es menor que en 2014, continúan siendo demasiados para darle la vuelta al titular de esta estadística.

¿En qué se emplean?

El sector que genera un mayor número de contratos es, sin duda, los servicios. Si vamos a lo concreto, se concentran en la restauración, la seguridad y el comercio. Las empresas que los prestan hicieron el año pasado un total de 69.956 contratos a jóvenes menores de 30, que ocupan cuatro de cada diez puestos en estos ámbitos. Le siguen los operadores y montadores de instalaciones, que firmaron 41.739 acuerdos, también con alta temporalidad.

El siguiente nicho de empleo es el de la construcción y la industria, que piden trabajadores cualificados. Sin embargo, les ofrecen un empleo mucho más estable y mejor remunerado. Los técnicos y profesionales de apoyo ocuparían el cuarto lugar con un total de 11.597 contratos en 2015. A la cola se sitúa el campo y la pesca, que apenas superan los 2.500 empleos y que cada vez ofrece menos salidas a los que empiezan en el mercado de trabajo.

Respecto a la calidad de esa contratación, habría que destacar que apenas un 2,5% de los empleos que se han ofrecido a menores de treinta años son indefinidos, el resto tuvo fecha de caducidad y en muchos casos, demasiado corta.

¿Dónde trabajan?

Los demandantes gaditanos tienen una enorme movilidad. Un total de 10.808 con edades de 16 a 29 años trabajan fuera de su provincia, ocupando puestos de tipo muy variado. La hostelería y el turismo en zonas como Baleares o el Levante les sirve como salida temporal. También prueban suerte en la construcción, que se empieza a reactivar en la costa mediterránea y el interior. Madrid es su principal destino, prácticamente el 40% de ellos están allí. Le sigue Cataluña, que ha recibido casi el 14%, y en tercer lugar las Islas Baleares (11,5%). En estos últimos años Canarias ha sido otra de las regiones receptoras que, a pesar de su elevado desempleo, logra dar ocupación en hoteles y servicios relacionados con el turismo.

Por el contrario, Cádiz es la provincia que menor número de trabajadores jóvenes de fuera ha acogido. Fueron apenas 2.390 en 2015, según recoge el informe del Observatorio Argos, que la coloca en último lugar. El número es casi la mitad que Córdoba, que sería la penúltima, con lo que poco sentido tiene continuar comparando con el resto de provincias.

¿Cuál es su formación?

Los que menos paro tienen son los titulados universitarios o los que cuentan con un título de Formación Profesional de grado superior. Son un total de 5.559 los que estaban inscritos como demandantes en las oficinas del SAE de la provincia a finales del año pasado que cuentan con este nivel de formación.

Sin embargo, los que sólo tienen estudios secundarios multiplican por cinco esa cifra –un total de 29.092–. Fueron ellos los que firmaron un mayor número de contratos, en su mayoría de carácter temporal y peor remuneración. En menor medida están los desempleados que no han llegado a superar la ESO, que apenas representan a uno de cada diez demandantes que tiene registrados el Servicio Andaluz de Empleo.

¿Lo tienen más difícil las mujeres?

La enorme brecha que separa a hombres y mujeres cada mes en el registro general de demandantes empleo se diluye conforme baja la edad. Ellas son más numerosas, pero representan el 50,9% –un total de 19.756–. Sin embargo, son las que firman menos contratos, bien porque logran acceder con más facilidad a puestos indefinidos o porque tienen menos cabida en sectores como la seguridad, la construcción o la industria, que son eminentemente masculinos.

¿Qué municipio tiene más paro?

Los grandes municipios son los que acumulan las mayores bolsas de desempleo juvenil. Sin embargo, son también los que más movimiento registran. Jerez se situaría a la cabeza si sólo se tuviera en cuenta el número de demandantes, que supera los 6.000. Pero dada su enorme población, la tendencia es mejor que en otros municipios como Sanlúcar, que tiene nada menos que 2.721, que representan el 22% de su población joven.

La Bahía de Cádiz acumula igualmente grandes concentraciones de demandantes de 16 a 29 años. La mayor proporción se encuentra en San Fernando, llegando a representar el 18% del total de su población comprendida entre esa horquilla. Elevada es también la demanda juvenil en Puerto Real e incluso en la capital gaditana, que tiene 3.346 trabajadores menores de treinta en paro.

Tampoco ofrece mejores salidas el Campo de Gibraltar, con ciudades como Algeciras y la Línea que superan los 5.000 demandantes entre los dos. Por el contrario, los municipios pequeños registran menos paro juvenil, pero es también por la marcha de estos trabajadores a núcleos más grandes que les ofrecen un catálogo amplio de oportunidades.

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