Manuel Fernández: «Ha sido un año complicado, de muchas dificultades»

Un año difícil, complicado, con distintas adversidades... Para la cofradía de Expiración estos últimos doce meses no han sido sencillos. Manuel Fernández asumió el cargo de hermano mayor en junio de 2015. Fue elegido por los miembros de la junta de gobierno. Desde entonces todos han trabajado para solventar los inconvenientes que les han surgido. «A mi me eligieron de pronto por sorpresa. Era algo que yo no esperaba porque no tenía experiencia ni nada pero había que asumirlo, dí el paso adelante con la cofradía y con la ayuda de mis compañeros».

El estado de la iglesia Castrense ha marcado en gran parte el año para Expiración. El verano pasado se anunciaba que las obras para arreglarla comenzarían a finales de 2015.

«Llegó finales de año y nos dicen que el dinero estaba aprobado pero que la obra comenzaría a mediados de 2016. Pero tampoco sabíamos si podríamos salir desde allí el Viernes Santo», explica Fernández. Finalmente esta pasada Semana Santa Expiración pudo hacer su estación de penitencia desde su sede a pesar de que se habían realizado las gestiones e incluso se adaptó el palio de la Victoria para salir del convento de Santa María. De hecho, esa es la única cuestión que ya está definida para el próximo Viernes Santo de 2017. «Le quitamos unos centímetros al paso, que ya está preparado y tenemos el permiso y la verdad que allí nos han acogido muy bien y la salida procesional será desde Santa María».

Otra de las problemáticas que ha tenido que superar la junta de gobierno ha sido que la hermandad tuvo que abandonar el local en el que guardaba los pasos y enseres en la calle Regimiento. «Era un local propiedad del Ayuntamiento. El contrato era por veinte años y por ley teníamos que dejarlo aunque eso ya lo tenemos casi arreglado. Los pasos ya se encuentran en un nuevo local que lo tenemos compartido con otra hermandad un local compartido con otra hermandad y ya lo que nos queda es hacer el ultimo traslado de mudanza», explica Fernández.

Pese a que la coporación del Viernes Santo tenía que convocar ahora cabildo de elecciones, ha pedido una prórroga de cuatro meses para poder hacer frente a las distintas circunstancias. «El cabildo será en octubre y bueno de momento tengo que pensar si me presentaré. Tomé la decisión por mis compañeros y porque la cofradía estaba en un gran escollo y en ese aspecto estamos satisfechos porque lo estamos llevando bastante bien, incluso el tema económico que nunca es fácil». Si la junta actual toma entonces posesión se ratificará el acuerdo que esta misma semana se hacía público con la Agrupación Musical Virgen de las Lágrimas de San Fernando para sustituir a los Polillas tras el Cristo de la Misericordia. La banda gaditana y la hermandad han zanjado veintiséis años de unión por algunas diferencias. «han sido distintas cosas pero el principal motivo ha sido el económico», comenta Fernández con respecto a este tema.