Rocío 2023

Sanlúcar vive su jornada más rociera

La hermandad del Rocío de la localidad embarcaba al mediodía seguida por un cortejo de centenares de Romeros que acompañaban al Simpecado

El presidente de la Junta, Juanma Moreno, acompañó a la hermandad del Rocío de Sanlúcar en el último tramo de su trayecto antes de cruzar el río Guadalquivir

Romeros de la hermandad de Sanlúcar embarcan en Bajo de Guía Antonio Vázquez

Jesús Mejías

Sanlúcar vivió uno de sus días más intensos con el embarque de la hermandad del Rocío en Bajo de Guía para comenzar su peregrinación hacia la aldea de El Rocío. A las ocho de la mañana arrancaba la jornada con la solemne misa de Romeros en la calle San Jorge con el Simpecado de Nuestra Señora del Rocío, y tras el rezo de la Salve y la entronización del Bendito Simpecado, la comitiva iniciaba su romería.

Si la jornada del martes, en la que embarcaron la gran mayoría de las hermandades de la provincia de Cádiz, la tónica predominante fue la lluvia, bastante intensa en algunos momentos, el miércoles amaneció soleado, con unas temperaturas suaves que fueron aumentando con el paso de los días.

No había noticias de los paraguas ni los chubasqueros, que eran sustituidos por las gafas de sol y por la crema solar, ya que al mediodía, justo en el momento en el que embarcaba la hermandad de Sanlúcar, hacía bastante calor en Bajo de Guía.

Aunque el Simpecado embarcara al mediodía, horas antes los primeros romeros cruzaban al otro lado del Guadalquivir, y prácticamente desde las diez de la mañana el ambiente en Bajo de Guía era de día grande. Multitud de sanluqueños esperaban el paso de la hermandad detrás de las vallas de seguridad, y el acceso a la Avenida Bajo de Guía era incluso más complejo que el martes.

Los romeros se preparaban para el embarque a base de cerveza, rebujito, y bocadillos de tortilla. «Hemos abierto a las nueve de la mañana y hemos podido vender más de cincuenta bocadillos de tortilla en una hora», comentaba un camarero del bar Paco 18, uno de los que establecimientos que presentaba un mejor aspecto en la mañana.

A las once de la mañana el Simpecado aparecía al fondo de la Avenida Bajo de Sanlúcar seguido por una comitiva de centenares de romeros. Estuvo acompañado en el tramo final de su recorrido antes del embarque por Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, quien recibió una medalla de la hermandad por parte del Hermano Mayor, Rafael Gálvez González, quien agradeció su presencia al presidente.

Uno de los momentos más emotivos de la mañana fue la visita del Simpecado a la Capilla del Carmen de Bajo de Guía, al grito de «Viva la Virgen del Rocío», por parte de muchos romeros. Posteriormente, la hermandad embarcaría y cruzaría el Guadalquivir para seguir su travesía por el Parque Nacional de Doñana.

Una de las miles de romeras gaditanas que harán el camino al Rocío en 2023 es Ana, que a sus cuatro meses de edad era llevada en brazos por su madre Eva. «En cuanto crucemos la vamos a bautizar».

Habitualmente, los rocieros que hacen por primera vez el camino son bautizados por otros romeros. Este año, por la sequía, muchos romeros fueron bautizados el martes con el agua embarrada que habían dejado las fuertes lluvias. «No sé como lo vamos a hacer, pero si tiene que ser con fango, la limpiamos después y listo».

Tras el embarque de Sanlúcar, sería la hermandad de El Puerto la segunda en hacerlo este miércoles. A las ocho de la mañana tenía lugar el traslado del Simpecado desde San Joaquín a la Ermita de los Caminantes, espacio en el que se celebró la Misa de Romeros. A las doce del mediodía se rezaba el Ángelus en el monolito de la 'Finca las Marías'.

Aproximadamente 650 romeros portuenses acompañan al Simpecado en este camino del año 2023 a su hermandad, que cruzaba el Guadalquivir a las tres y media de la tarde.

La última de las hermandades sería la de Jerez. Partía desde el convento de Santo Domingo, el rezo del Ángelus fue en el Barroso y el rengue del almuerzo tenía lugar en Ventosilla. La hermandad pernoctará en Marismilla y seguir con su romería al Rocío.

Las doce hermandades de Cádiz ya han cruzado el río Guadalquivir y se encuentran en el Parque Nacional de Doñana para emprender su camino a la aldea de El Rocío. Cádiz busca el reencuentro con la Blanca Paloma.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación