Tres Caídas y Misericordia desafiaron a la amenaza de lluvia y procesionaron en el Jueves Santo de San Fernando

Luces y sombras en el Jueves Santo de San Fernando. La Hermandad de Tres Caídas y de Misericordia decidieron realizar Estación de Penitencia; mientras que el Perdón y el Silencio, suspendieron sus salidas procesionales por la previsión de lluvias en la tarde-noche en La Isla.

El barrio de la Bazán volvió a darse cita en la Iglesia de la Sagrada Familia para esta vez sí ver la Cruz de Guía plantada en la calle. Con muchísima expectación, se abrieron las puertas del templo y el paso de misterio recorrió sus primeros metros con la marcha «Un quejío al cielo», interpretada por la Agrupación Musical Los Polillas, de Cádiz.

A paso acelerado pusieron rumbo al centro de la ciudad. Aunque en un principio no había intención de cambiar el recorrido, tan solo aumentar el ritmo, la Hermandad decidió modificar su itinerario de vuelta por Almirante Cervera, Real, Augusto Miranda , Escaño y Montañeses de la Isla. Durante el recorrido de ida, realizaron toda la calle Escaño en silencio para que las personas con Autismo también pudieran disfrutar de la procesión. Con el Castillo de San Romualdo de fondo, se produjo uno de los momentos más emotivos: la levantá dedicada a la Hermandad de El Huerto. «Por la Hermandad de El Huerto al cielo».

Por su parte, tanto El Perdón como El Silencio decidieron suspender sus correspondientes salidas procesional tras estudiar diversos partes meteorológicos. Pero quien sí lo hizo fue la Hermandad Sacramental de la Misericordia, que modificó su recorrido y desafió al mal tiempo. La salida de la Iglesia de la Divina Pastora fue vibrante. La banda de cornetas y tambores Rosario y Victoria tocaba tras el misterio mientras que los aplausos y las caras de emoción se sucedían en una plaza a rebosar y con muchas ganas de cofradías y procesiones, que por culpa de mal tiempo no pueden disfrutar. Finalmente, la lluvia dio una tregua y ninguna de las dos Cofradías que decidieron realizar Estación de Penitencia sufrieron algún tipo de contratiempo.

Tampoco hubo Madrugá. La Hermandad del Nazareno decidió prevenir y suspendió la salida procesional por la amenaza de lluvia. Las puertas de la Iglesia Mayor se mantuvieron abiertas de tres a cuatro y media de la madrugada. De esta manera, los fieles y devotos pudieron ver y rezar a Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores.

A pesar de que dos de las cuatro Hermandades suspendieron sus salidas procesionales, se pudo disfrutar del Jueves Santo en San Fernando después de que el Miércoles Santo ninguna de las tres Hermandades procesionaran por las calles de la ciudad.