SAN FERNANDO
La nueva cafetería del Hospital San Carlos, para finales de 2024
La empresa concesionaria anunció el cese de la actividad a finales de mayo.
La cafería, o lo que queda de ella, está totalmente deshabitada. Cuesta incluso imaginarse la disposición que tenía. Una valla de madera separa el espacio para los familiares de los pacientes del reservado para el personal del Hospital San Carlos. Allí merienda en silencio una trabajadora del centro. «Ahora se utiliza como comedor, pero solo en la teoría porque no hay ni microondas para calentar la comida», declara.
El 29 de mayo del pasado año, la empresa Modemar Hostelería SL, que disponía de la concesión desde 2013 y durante veinte años, comunicó por correo electrónico el cese del servicio de cafetería de manera unilateral. Diez días después, el centro recibió el escrito de confirmación del cierre definitivo por parte de la concesionaria. Desde entonces, los trabajadores sanitarios y los familiares tienen que desplazarse al bar más cercano para tomarse un simple café. Con ella, también se fueron las máquinas expendedoras que estaban repartidas por la sala de urgencias, las plantas y la entrada.
Antes de su cierre, las protestas por el funcionamiento de la cafetería eran cada vez mayores. Desde los horarios hasta los precios de los productos. «Al final, abrían y cerraban cuando querían, cada vez estaba menos horas abierta e incluso los precios últimamente eran abusivos«, expresa. El malestar de la plantilla de trabajadores es generalizado y sienten que «los han dejado desmantelados».
El quiosco del hospital comenzó a vender agua y refrescos a raíz del origen del problema, pero al cerrar por las tardes, no llega a cubrir las necesidades. La alternativa es caminar hasta el establecimiento más próximo y si está cerrado, llegar hasta la estación San Fernando-Centro. Los empleados llevan la comida, que no tenga que ser calentada, y el agua de casa. «Nosotros parecemos que venimos de camping en vez de a trabajar».
Por otra parte, a muchos familiares de los pacientes les pilla por sorpresa la carencia de este servicio y, según la hora del día, no tienen forma de comprar una simple botella de agua, un sándwich o un café. Para minimizar los inconvenientes a pacientes, familiares y profesionales, la Dirección del centro, que decidió estudiar las medidas legales al respecto del abandono de la concesión, habilitó dos fuentes en la zona de la cafetería. Pero el agua «sabe a tierra», lo que las hace totalmente inservibles.
A finales de 2024... buenas noticias
El final del problema parece estar más cerca. Una vez iniciado el expediente de contratación para la nueva cafetería, «la licitación de la concesión se encuentra en tramitación», según el SAS y prevé «la formalización del contrato para finales de este mismo año«. Mientras tanto, se han tomado medidas para reducir el problema.
Hasta que se firme el nuevo contrato, se instalarán máquinas de 'vending' por varias zonas del hospital en este mes de febrero. De esta manera, se subsana, en cierta forma, la ausencia del servicio de cafetería. Serán tres conjuntos de máquinas expendedoras: una en la sala de espera de Urgencias Generales, otra en la zona de cafetería destinada al público en general y la otra en la reservada para los empleados. Cada conjunto de máquinas estará formado por una de bebidas calientes, como cafés e infusiones, y otra de agua, refrescos y comida refrigerada empaquetada.
Sin duda, la instalación de estas maquinarias ayudará a amenizar la espera de la llegada de la nueva empresa a la cafetería y terminará, en parte, con una preocupación para familiares, pacientes y trabajadores.
