Hay vida (y arena) más allá de la playa de Regla. Lo saben los chipioneros, lo intuyen los viajeros que van un poco más allá del chiringuito fácil... y ahora también lo ha descubierto National Geographic, que ha posado sus ojos en uno de los rincones más especiales del litoral gaditano: la Playa de Camarón – La Laguna, un paraíso de 2.300 metros rodeado de dunas, vegetación y silencio salado.
Esta playa de nombre y paisaje singular no solo conquista por su estética: lo hace también por su valor ecológico. Su sistema dunar propio, que actúa como refugio natural de especies protegidas, convive con un entorno cuidado y accesible gracias a pasarelas de madera que respetan el ecosistema.
Corrales
Cuando la marea baja, aparece otra de sus joyas ocultas: cuatro corrales de pesca tradicionales, que revelan siglos de historia marinera entre camarones, piedras y mareas sabias. De ahí, por cierto, el nombre de la playa. Todo esto, sin renunciar a servicios públicos, zonas deportivas y esa brisa atlántica que siempre trae algo de libertad.
Desde wind-surf hasta footing al amanecer, pasando por largos paseos con mascotas (permitidas del 2 de noviembre al 27 de febrero, según la Junta de Andalucía), la playa de Camarón – La Laguna tiene un poco de todo... excepto masificación.
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