Las 'narcogasolineras' toman definitivamente todo el caño de Sancti Petri

Narcotráfico | cádiz

Las 'narcogasolineras' toman definitivamente todo el caño de Sancti Petri

En los últimos días la actividad de las 'petaqueras', las lanchas que llevan gasolina a las embarcaciones de los narcos, es constante

Los tripulantes son en su mayoría vecinos de La Línea y extranjeros que ni viven ni trabajan por la zona

Vídeo: Persecución por el muelle de Gallineras por el caño de Sancti Petri este pasado sábado. La Voz

M. Almagro

25/10/2022
Actualizado a las 14:29h.

Durante todo el día. Al servicio las 24 horas. Cuando se les necesite. Así se mueven las 'narcogasolineras' que en los últimos días han tomado con cada vez más fuerza e impunidad todo el caño de Sancti Petri en un continuo ir y venir por sus aguas hasta arriba de garrafas de combustible; las petacas que traen y llevan a los narcos que se encuentran apostados en sus 'neumáticas' por esas zonas, más mar adentro, esperando el momento para entrar y descargar los cientos de fardos de hachís que llevan como mercancía.

Por tanto, ellos les sirven de surtidores, también de apoyo para cambiar la tripulación si es necesario, llevarles un mecánico si la 'goma' o los motores sufren algún problema, o aprovisionarlos de comida, ropa y aparatos electrónicos y baterías. Es decir, facilitarles y colaborar con ellos en su cometido que no es otro que traficar con droga.

Pues, según confirman las informaciones e imágenes llegadas a este periódico, en los últimos días, la actividad de este puntal de la logística del narco en toda la zona de Chiclana y San Fernando está siendo incesante. Continua. Pareja a los constantes intentos de alijos que, también, se están produciendo. No solo por esta zona sino sobre todo en dirección a la desembocadura del Guadalquivir por Sanlúcar.

«De seis a nueve gomas por día»

Los avisos del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) y las detecciones de embarcaciones sospechosas del Servicio Marítimo de la Guardia Civil están siendo persistentes. Tanto de día como de noche. Así lo insisten y alertan las numerosas fuentes consultadas por este medio que advierten de que esta actividad ilícita de transporte de fardos y descargas ha alcanzado un ritmo frenético en el último mes. «De seis a nueve 'gomas' por día», aseguran.

Y así por ejemplo lo ilustra el vídeo que acompaña a esta información y en el que se puede ver como un helicóptero de Vigilancia Aduanera persigue a una embarcación que, presumiblemente, iba cargada de petacas. La imagen se tomó el pasado sábado por la tarde en el muelle de las Gallineras de San Fernando, en el caño de Sancti Petri. La lancha intenta escapar de la nave a toda velocidad a plena luz del día y en un lugar además de tránsito habitual de otras embarcaciones con las que podría, por ejemplo, chocar.

A las horas, el domingo por la mañana aparecía una embarcación llena de petacas de combustible embarrancada en la misma zona. Llevaba setenta garrafas que dejaron abandonadas.

Pero esto no ha sido lo único en las últimas horas. El Servicio Marítimo también el domingo interceptó otra de estas lanchas por estos esteros de Chiclana. En ella viajaban cuatro ocupantes que también transportaban petacas y, al parecer, habían hecho un cambio de tripulación.

Y ha habido más. Esta pasada madrugada también se detectaba otra embarcación con sesenta garrafas que llegaron a cargar en la zona de Gallineras para lo que usaron una furgoneta de alquiler. Se identificaron a otras dos personas.

Por tanto, y por la repetida coincidencia de este mismo 'modus operandi', se podría decir que el caño de Sancti Petri se ha convertido ya en el punto neurálgico del 'petaqueo' donde estos surtidores cargan y se echan al agua, tomando además como referencia el castillo.

Linenses y marroquíes

Otra de las circunstancias más coincidentes que se están dando en estas últimas detecciones e incautaciones es que los tripulantes de estas embarcaciones de 'apoyo' son ciudadanos que no son vecinos de la zona ni que tampoco tienen un trabajo 'legal' u 'oficial' en las proximidades.

Se trata (en su mayoría) de linenses y también de ciudadanos de origen marroquí, todos varones, cuyas edades oscilan entre los 40 y los 25 años y muchos de ellos, con antecedentes por delitos contra la salud pública. Además las barcas que llevan muchas veces tienen matrículas duplicadas o falsas o es de propiedad dudosa o de un tercero.

La presión policial ejercida en la zona del Campo de Gibraltar ha trasladado a estas redes a otros puntos de la costa de Cádiz. El riesgo que les supone que le intercepten tanto la droga como la 'goma' (valorada en unos 300.000 euros las más potentes) es alto, por lo que ya no las acercan tanto a costa hasta no estar plenamente seguros. Además hay que recordar que el Gobierno aprobó un decreto que las prohíbe.

De ahí que necesiten de estas 'auxiliares', 'petaqueras', para poder cerrar sus planes sin ser interceptados y detenidos. Y para esperar fondeados o escondidos o apretar la velocidad necesitan gasolina. Poner estas lanchas a máxima potencia desde prácticamente Marruecos hasta el lugar de alijo gasta mucho combustible. Puede salirles a 120 ó 130 litros por motor de unos 300 CV y hora de navegación. Y más con el peso que llevan en fardos de hachís, entre dos y tres toneladas y media de esta droga. Además están usando otras lanchas neumáticas de señuelo, lanchas que para moverse y 'despistar' necesitan también de combustible.

Por tanto el papel que desempeñan estas 'narcogasolineras' se ha hecho fundamental para el narcotráfico. Agentes de la Guardia Civil, Policía Nacional o Agencia Tributaria insisten en la necesidad de ordenar y endurecer la norma en cuanto al almacenaje y transporte de estas petacas, al considerar que es una cuestión ya básica en la logística de estas organizaciones criminales. Y, además, alertan que suponen un «evidente peligro» en cuanto a que se trata de una mercancía altamente inflamable que estos individuos trasladan y guardan de cualquier manera y en cualquier sitio. «Están actuando con total impunidad»