LABORAL
El impacto de la huelga del Metal pone en jaque la imagen de Cádiz
Segundo intento fallido para una varada técnica de la fragata 'Numancia' en el astillero de Cádiz
El retraso en los suministros aeronáuticos afecta a la cadena de producción de Airbus

El quinto día de huelga indefinida en el sector del Metal de Cádiz empieza a pasar una seria factura a la actividad industrial de la provincia. No hay que olvidar que las protestas arrancaron la semana pasada con dos días de paro, el miércoles 18 y el jueves 19, y la situación se recrudeció el domingo 22 cunado UGT firmó con la patronal Femca un principio de acuerdo para el nuevo convenio que rechazó CCOO.
Esta división sindical entre UGT y CC OO es lo que, en cierto modo, ha marcado el devenir de la huelga indefinida, capitaneada por la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM), que agrupa a los sindicatos minoritarios y sin representación en las mesas de negociación. Esta Coordinadora es la que se ha hecho con el poder en la calle y es la encargada de orquestar las movilizaciones y forzar para que UGT y CC OO firmen un convenio con sus exigencias.
Siete días de huelga, (dos de paro puntual y cinco de indefinida) han puesto al sector industrial de Cádiz en jaque y a la imagen de la provincia por los suelos. El impacto es brutal.
La semana pasada, Navantia tuvo que lidiar con la dirección de la compañía Carnival Cruise Line para retomar su relación comercial y evitar problemas de futuro. No hay que olvidar que el crucero 'Carnival Liberty' se encontraba secuestrado en el astillero de Cádiz por la industria auxiliar y era rehén de estos trabajadores. No querían que el barco saliera del astillero hasta que hubiera un acuerdo para la firma del convenio.
Finalmente, un grupo de trabajadores de Navantia lograron poner la proa del crucero fuera del dique y lo liberaron, aunque sin la obra terminada, Carnival rematará con un astillero de Marsella la obra que tenía contratada con Navantia Cçádiz y que por la huelga no se ha podido terminar. Esta situación ha llevado a Carnival a pedir daños y perjuicios por la retención del crucero en el astillero y le reclama 4,5 millones de euros, además no descarta revisar el contrato de reparación que mantiene con Navantia desde 2018.
Otro de los frentes abiertos en Navantia con la huelga toca de lleno a la reparación de buques de la Armada. La fragata 'Numancia', con sede en la Base de Rota, tenía previsto entrar en el astillero de Cádiz el pasado 11 de junio para una varada técnica, sin embargo, la amenaza de huelga impidió este trabajo de mantenimiento. La Armada dejó para este 27 de junio el acceso al astillero, pero el segundo intento también ha sido fallido,. Lo que está claro es que esta varada no se llevará a cabo en Ferrol como se temía en algunos sectores industriales.
Otro de los barcos que espera una intervención en el astillero de Cádiz es el 'Global Mercy'. Se trata de un buque hospital que viene a Cádiz para 45 días de faena. De momento, se encuentra atracado en el muelle comercial de la factoría a la espera de ser intervenido
El impacto también es muy negativo en el astillero de San Fernando, que trabaja en la construcción de tres corbetas para la Marina saudí y de un patrullero para Marruecos.
En el campo aeronáutico, el impacto de la huelga está siendo especialmente grave para Airbus que tiene subcontratadas su logística y el mantenimiento industrial. Distintas fuentes han confirmado que la llegada de suministros es complicada y está afectando a su cadena de producción.
Lo mismo ocurre en Dragados Offshore que ya se encuentra a pleno con la construcción de las plataformas eólicas Borwin 4 y Dolwin 4, pero se ha retrasado esta semana con la huelga.
El sector del metal en la provincia, que agrupa a unas 5.000 empresas y cerca de 30.000 trabajadores, sigue envuelto en la incertidumbre. El nuevo texto plantea cambios de largo alcance. Su vigencia se extendería hasta el año 2032 y, según sus defensores, incluye subidas salariales ligadas al IPC, avances en materia de toxicidad y penosidad, y una nueva regulación de los fijos discontinuos. Para UGT, se trata de un «convenio de futuro» que recoge «mejoras negociadas durante más de un año».
Pero para CCOO, el texto es justo lo contrario: un paso atrás. Su portavoz en Cádiz, Pedro Lloret, ha calificado el pacto como «un día triste para la clase obrera y para esta provincia». El principal escollo, a juicio del sindicato, es la introducción de los llamados «contratos de acceso»: una figura para personas sin experiencia, con un salario del 75 % durante los primeros 18 meses. Lloret considera que esta medida «devalúa las condiciones de entrada al empleo» y que el conjunto del acuerdo «empeora las condiciones laborales y aumenta las desigualdades».
La Coordinadora de Trabajadores del Metal ha sido aún más tajante, calificando el documento de «basura de acuerdo», y centenares de manifestantes han protagonizado hoy cortes en la avenida de Astilleros de Cádiz, bloqueando los accesos a Navantia San Fernando y causando un colapso de tráfico que se ha saldado con la intervención de la Policía y tres detenciones, que han despejado la avenida principal de Cádiz imponiéndose en número a los manifestantes y buscando sospechosos hasta dentro de los bares.