Sucesos
Detenido otra vez el 'Hijo de Satán' acusado de nuevo de estafar a ancianos
Carlos Javier R., al que le constan dos condenas, una de ellas por engañar usando ritos en los que invocaba al maligno, fue arrestado hace dos semanas en El Puerto
La Policía Nacional lo investiga por suplantar identidades de ancianos a los que cuidaba para comprar en su nombre móviles de alta gama y luego venderlos
El hijo de Satán, el hijo de Carmen y Francisco que adora al maligno
Carlos Javier R., conocido como el 'Hijo de Satán', y condenado ya en dos ocasiones por engañar prometiendo cosas que jamás cumplía pero que cobraba, entre ellas el poder de sanar a través de extraños ritos con animales, y quedándose con el dinero de sus víctimas, ha vuelto a caer en manos de las fuerzas policiales acusado -otra vez- de estafa. Esta vez ha caído en El Puerto y ha sido arrestado junto a una mujer, M. R. R., de 38 años.
Según informa la Policía Nacional, el Hijo de Satán utilizaba esta vez su labor como cuidador de ancianos para perpetrar sus engaños, usurpando las identidades de estas personas mayores para comprar móviles de alta gama en su nombre sin que ellos tuvieran constancia.
La investigación se inició en febrero de 2022 a raíz de varias denuncias después de que las víctimas detectaran un elevado coste en su factura. Según afirmaron, les había ocasionado un perjuicio económico de 9.000 euros. Así el grupo UDEV de la Policía Nacional de El Puerto de Santa María-Puerto Real , comenzó las pesquisas sobre esta posible usurpación y la venta posterior de estos terminales.
Los agentes constataron que ambos sospechosos eran además de vecinos de las víctimas, sus cuidadores por lo que fueron ganándose su confianza para poder acceder a sus teléfonos y datos bancarios.
Según la Policía, el 'modus operandi' de los detenidos era usar sus datos personales sin su consentimiento, para adquirir los móviles de alta gama valorados en 9.000 euros y posteriormente venderlos en el mercado a un coste muy superior. Finalmente, los agentes detuvieron a Carlos Javier el pasado 18 de mayo. Él y la mujer implicada fueron puestos a disposición del Juzgado de instrucción en funciones de guardia número 5 El Puerto , quedando en libertad con cargos.
Dos condenas y hasta 18 antecedentes
A Carlos Javier R. le consta un generoso historial delictivo, con hasta 18 antecedentes según fuentes consultadas por este periódico. Además de dos condenas. La primera de ellas impuesta por la Audiencia de Cádiz por estafar a más de una veintena de clientes unos 400.000 euros con la venta de vehículos en el concesionario que regentaba en San Fernando, Autos Desi.
La segunda, de tres años y medio, que se le impuso en 2020 también la Audiencia gaditana. Tras la celebración del juicio la Sección Cuarta consideró que el conocido como Hijo de Satán engañó a las personas que acudían a él para que les hiciera 'trabajos espirituales' basándose en su adoración por el maligno. Para ello realizaba en su casa de Los Gallos en Chiclana ritos con animales muertos, tripas y sangre, con mantras y güijas, cartas... todo un despliegue para invocar a Satán y que intercediera por sus clientes.
Como explicaba la sentencia, Carlos Javier lograba ejecutar sus mentiras contactando con personas que, «ya fuese por tener personalidades influenciables o por hallarse en una situación problemática, detectó que eran fácilmente manipulables». Así hasta obtener, según la investigación que realizó la Guardia Civil, unos 600.000 euros, mientras que a su paso dejaba a familias enteras en la más completa ruina, cuyos testimonios se pudieron escuchar durante el juicio. Además en este fallo también fue condenado por vender coches con el cuenta kilómetros trucado.
Durante este ir y venir en sus tropelías, Carlos Javier llegó a estar en busca y captura durante un tiempo por no acudir a un juicio que tenía tras haber sido denunciado por agresión sexual por una cliente de su concesionario. Fue localizado y detenido en Argentina en 2012. Desapareció aunque antes pasó previo pago por diferentes programas del corazón después de que saltara a los medios nacionales por su peculiar arresto como un supuesto líder satánico.
«Sí, mi dios es Satanás, pero eso no es ningún delito. Jamás nadie puede ser condenado por sus creencias religiosas», afirmaba bastante nervioso ante los magistrados en su último juicio. «Ellos sabían que mis trabajos eran con Satán y no con la Virgen María , siempre les fui claro. Aceptaron mis trabajos e hicieron donaciones de manera voluntaria», insistía ante el tribunal llorando.
