TRIBUNALES
El asesinato de Eva en Valdelagrana, un disparo a bocajarro de su novio «sin posibilidad de defensa»
La Fiscalía respalda al completo la investigación que hizo la Policía Nacional de este crimen que estremeció a toda España y que fue la primera muerte por violencia machista de 2023
Detenido en El Puerto tras matar presuntamente a su pareja en su casa de Valdelagrana
Carlos, el presunto asesino de su pareja en El Puerto: «He matado a Eva, al amor de mi vida»

A las siete de la mañana del 8 de enero de 2023 los bomberos forzaban la puerta de un piso situado en la quinta planta de Bahía Sherry, en Valdelagrana. Allí, al otro lado, en esta vivienda de El Puerto, descubrían el cuerpo sin vida de una mujer, Eva Haza. Entonces ya estaba detenido su presunto asesino, su pareja de hacía poco, un hombre de entonces 40 años y que momentos antes había sido apresado por la Policía fuera de sí, pegando tiros en otra casa cerca de allí. «¿La habéis encontrado ya, no?», les preguntaba. Los agentes en esos instantes no se imaginaban que estaban ante el presunto autor del primer caso de violencia de género perpetrado y consumado aquel año en España. La provincia enmudeció ante la crudeza de este caso. La víctima era una mujer joven, trabajadora y madre de dos hijos.
Ahora, próximamente, tras la instrucción realizada, se celebrará en la Audiencia de Cádiz un juicio con jurado contra este único acusado, Carlos D. La Fiscalía ha emitido ya su escrito de calificación provisional y solicita que sea condenado a una pena de 25 años de prisión como autor responsable de un delito de asesinato.
Según expone el Ministerio Público, este hombre y la víctima mantenían un noviazgo desde aproximadamente un año antes del crimen, sin que existiera convivencia ni descendencia entre ellos.
Sobre las 02.30 horas del día 8 de enero de 2023, el acusado se encontraba con ella en este piso de Valdelagrana, y tras una discusión surgida entre ambos, «en la que se reprochaban entre ellos la desaparición de alguna sustancia estupefaciente», el acusado, «movido por el ánimo de acabar con la vida de su compañera sentimental», utilizando un revólver que el mismo poseía, aunque careciendo de licencia para ello, disparó en la cabeza a la víctima, provocándole un traumatismo craneoencefálico abierto, que determinó la destrucción de centros vitales nerviosos secundarios, provocando su fallecimiento.
Como añade la Fiscalía, el acusado perpetró el ataque letal descrito de «forma sorpresiva y repentina, encontrándose la víctima sin ninguna posibilidad de respuesta o defensa, al haber realizado el disparo a bocajarro, en contacto directo con la región frontal de su cráneo en dirección descendente, asegurándose así la producción de la muerte y en una zona completamente vital, como si de una ejecución se tratara». Eva no contaba con ningún arma para repelar el ataque, encontrándose en una clara situación de inferioridad de medios.
Con posterioridad a estos hechos, el acusado, portando el arma se dirigió hacia el edificio sito en Avenida Río San Pedro, donde comenzó a realizar disparos contra una de las viviendas, siendo necesario solicitar la intervención de agentes de la Policía Nacional.
Al tiempo de llegar los agentes, el acusado fue detenido, tras varios acometimientos realizados frente a ellos y una gran resistencia. El procesado permanece en prisión provisional desde su arresto en 2023.
En concepto de responsabilidad civil, la fiscal pide que el encausado pague diversas cantidades a cada uno de los hijos de la fallecida, a sus padres y a un hermano por los daños morales ocasionados. Además solicita una medida de libertad vigilada por cinco años y prohibición de acercamiento a una distancia no inferior a 1.000 metros a la familia de Eva.