Juzgan a unos ladrones de Chiclana once años después de cometer los robos

Dos acusados de haber robado entrando a la fuerza en casas de Chiclana y agredido a los agentes que les detuvieron en 2012 han sido juzgados ahora: once años después. No ha sido hasta hace unas semanas cuando se han tenido que poner frente al tribunal de la Audiencia de Cádiz y asumir las consecuencias de lo que hicieron. Dicho retraso, de más de una década, les ha beneficiado en el cómputo total de la pena impuesta ya que en todos los delitos por los que se les procesaba se les ha aplicado la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas.

Tal y como reproduce el fallo, facilitado por el TSJA, el 20 de agosto de 2012 por la tarde los dos procesados, «puestos de común acuerdo y con evidente ánimo de enriquecerse a costa de lo ajeno», se dirigieron a una casa de la localidad. Una vez allí, rompieron la puerta de la terraza ubicada en la planta superior y accedieron al interior. Iban con tres llaves inglesas a fin de apoderarse de cuantas cosas de valor encontrasen.

De esta manera desenroscaron la grifería del baño situado en la planta de arriba y apilaron los marcos y hojas de aluminio de las ventanas de la planta baja. Pero en ese momento, una vecina que escuchó los ruidos alertaba a la Guardia Civil. Los agentes se personaron y les ordenaron que salieran, sin embargo, lejos de hacerlo, los ladrones bloquearon la puerta y subiendo a la terraza comenzaron a huir saltando por los tejados.

De esta forma uno de ellos entraba en otra casa y se escondía tras un sofá. Cuando los guardias civiles entraron a por él éste comenzó a tirarles muebles y a darles patadas y manotazos por lo que resultaron heridos.

Lo mismo ocurrió con el otro procesado que, en su huida, llegó a entrar en otras dos casas y se enfrentó a sus moradores. Los agentes lo interceptaron pero de nuevo se resistió a su detención provocando diversas lesiones a los actuantes.

Desde entonces, una década después, la causa ha sufrido «distintas paralizaciones» en el juzgado de instrucción y hasta 2021 el Ministerio Fiscal no pudo formular su acusación. Ante la celebración del juicio los procesados y sus abogados decidieron llegar a una conformidad, por lo que la pena ha quedado minimizada.

De esta manera y, según ha acordado la Sección Cuarta, uno de los acusados, para el que la acusación solicitaba algo más de un año de cárcel por todos los delitos, ha sido condenado finalmente a tres meses de prisión que se han sustituido por seis meses de multa (1.080 euros), más el pago fraccionado de unos 1.300 euros por la resistencia y el daño a los agentes. Y el otro encartado a dos meses de cárcel que se sustituye por una multa de 720 euros, además de la indemnización, también fraccionada, de unos mil euros.