La fuerza de Mónica Naranjo arrasa en Chiclana

Mónica Naranjo se presentó en Sancti Petri con su Mimétika Tour para presentar su último trabaja discográfico y repasar algunas de las canciones que más han marcado su carrera musical. Muy buen ambiente en el recinto de Concert Music Festival para recibir a la catalana.

Puntual, se apagaron las luces y comenzó una intro con el cuerpo de baile haciendo la primera de sus exhibiciones y arrancando la primera ovación de la noche sin necesidad de que la cantante estuviera en escena. Mientras, en la pantalla del fondo del escenario, se veía el videoclip de Eterna. Cuando acabó, salida al escenario vestida de negro con cristales para dar brillo. El pelo corto platino se sumaba a la imagen para dar un look de diva rockera.

Y así arrancó su concierto con Europa. Bien conocido es el torrente de voz de Mónica Naranjo y, aún esperándolo, sorprende en el directo por su fuerza. A ello se le añade su magnética presencia que hace imposible apartar la vista de la cantante en las dos horas de espectáculo.

«Otro año más para mí que estoy encantada de estar aquí», dijo en sus primeras palabras, para después reconocer estar «fascinada con el olor a pescaíto frito» que se colaba del exterior. Y después, una clara declaración de intenciones: «Hemos preparado un repertorio al 99% para vuestro gusto. Si pensáis que vais a estar sentados y relajaditos, este concierto no es para vosotros». Y, para demostrarlo, arrancó con Desátame, canción que, 26 años después de su lanzamiento, sigue intacta en la memoria. Por ello, fue uno de los temas más cantados de la noche. Con Solo se vive una vez, cerró el primer bloque antes de abandonar el escenario para descansar y cambio de vestuario. Los bailarines volvieron a desplegar talento sobre las tablas para que Mónica Naranjo se lo reconociera y, además, añadiera un «me alegran la vista cada vez que los veo».

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De negro nuevamente, y con brillos y transparencias, volvió la catalana a salir al escenario para Sherezade. Después de Hoy no, llegó otro de los momentazos de la noche. Mientras colocaban un piano en el escenario, Mónica leyó una pancarta «Soy Eva. ¿Cantamos juntas?». Y después de leerla, contó la historia de Eva Paúl, una joven chiclanera que fue al programa de televisión Idol Kids con Desátame, pero con un resultado no satisfactorio al estar enferma. La cantante le mandó ánimos a través de sus redes sociales y, además, le permitió resarcirse sobre el escenario. Eva se arrancó con la canción y Mónica la acompañó en todo momento, muy cariñosa con la joven, que también ha pasado por Tierra de Talentos y que actuó en el CMF Kids este verano. Con un emotivo abrazo, los aplausos y gritos emocionados de la familia y un «los sueños se cumplen», Eva se bajó del escenario después de haberse quitado la espinita.

Casi sin tiempo para recuperar de la emoción previa, llegó Sola, que cerraba la segunda parte. Volvió la catalana, esta vez de dorado, con ¡Ey!. «De sobra es sabido que mi carrera empezó en el pop, pero que tengo el corazón lleno de rock y a veces hago cosas como esta», declaró antes de Entender el amor, una canción que está considerada un himno para la comunidad LGTBI. Pista y grada se desataron y acompañaron con sus voces a la cantante que, casi sin descanso, retomó para cerrar bloque con Usted.

Para amenizar la espera, derroche de sensualidad de los bailarines sobre el escenario hasta la vuelta de la cantante, esta vez de negro y rojo. Pantera en libertad inauguró esta última parte. Mónica Naranjo dirigió el micro al público en varias ocasiones para que cantaran con ella. La sonrisa cómplice desvelaba satisfacción con el resultado. «Antes de comenzar, he comentado que el 99% del repertorio lo habíamos escogido pensando en vosotros. Queda un 1%. Me gustaría presentaros la canción que más nos gusta a todo el equipo de este último disco, Mimétika», fue la introducción perfecta para Quién me salvará de mí. Gran ovación al final que, según sus palabras, tienen mucho sentido «porque es cuando siento que he hecho las cosas bien».

Y, entonces, llegó sin duda uno de los momentos más esperados de la noche. «Acordaos no de sobrevivir, sino de vivir», fueron las palabras que introdujeron Sobreviviré. En la pista se desató la locura para vivir esta canción con la intensidad que se merece. Y cuando acabó, la despedida. O el amago de despedida. La gente pidió más y Mónica se lo dio.

Volvió para cerrar con dos versiones. Si tú no vuelves de Miguel Bosé con música de piano fue la primera de ellas. Y, para cerrar por todo lo alto, Diva, canción de Dana International y ganadora de Eurovisión en 1998. Últimos bailes, últimos aplausos y últimos minutos de una noche de gran espectáculo en Sancti Petri.