con 'c' de cádiz

«A ver, yo vivo en Bratislava, pero no soy de los que echa de menos el mar, la Caleta y esas cosas»

josé juan lópez revuelta. periodista

José Juan es uno de esos tipos que disfruta allí donde le toque estar, y aunque eche en falta la tranquilidad que le ofrece su tierra no se pone más horizontes que los que presente la vida

José Juan es un apasionado del ciclismo y de, cuando se la gana, la cerveza checa. l. v.
Alfonso Carbonell

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¿Hay algo peor que toparse con un chovinista? Pues seguramente, pero por si acaso no lo haya, quedar con personas que huyen, sin repulsión, ojo, de ese estereotipo es altamente recomendable para la apertura de miras. José Juan López Revuelta (Sevilla, 1984), «Juan Larra por el rollo periodista», es un tipo de esos que la vida cruza en tu camino para que puedas aprender de una filosofía tan sencilla como repleta de experiencias.

'Juanpe' 'pa' los amigos (por lo de Juan Periodista) es un Compañero con los que da gusto hablar y más aún entrevistar porque ahí donde se ven y se venden, buena parte de los periodistas del sistema son lo más escrupulosos con sus declaraciones, opiniones o informaciones no vayan a topar con algún poder interesado. Pero no, afortunadamente, Juanpe no es de este tipo de seudoperiodistas y lo primero que entona en cuanto pongo la grabadora a funcionar es acercase a ella y exclamar: «De lo que yo diga, pon lo que te salga de los huevos». Y claro, así da gusto y hasta hace a un servidor reconciliarse con un oficio en el que buena parte de sus profesionales trabaja con las rodilleras puestas.

Cádiz, Sevilla, Cádiz y Bratislava son las paradas de un tren de la vida que José Juan López Revuelta no sabe dónde llegará pero en el que está seguro viajará de categoría. A él poco le importa el destino si en donde está puede ganarse la vida. Ahora, tras un periodo reinventándose como asesor financiero de Amazon, el destino le ha vuelto a poner sobre un teclado para escribir acerca de lo que más le gusta en esto del ocio y el trabajo: el ciclismo. Friki de los pedales, este gaditano con cuna en Sevilla forma parte de una de las webs más prestigiosas de un deporte que el verano rellena las vacaciones de mucha gente. Ya esté en Eslovaquia, Bélgica o España, 'Juanpe' es más que nada un apasionado de la conversación tranquila y profunda, como la que ha tenido a finales de este verano con un servidor.

-No sabía yo ni que era de Sevilla ni que se 'llamaba' Juan Larra. ¿Eso por qué?

-Pues mira, lo de Juan Larra es cuando me puse el email por el rollo periodista y ya se me quedó para las publicaciones.

-¿Y lo de Sevilla? ¿Cómo llegó a Cádiz?

-Mi padre es de Cádiz, pero fue a una boda en Sevilla en la que se casaba mi tío y en la que conoció a mi madre. Y de esa boda nací yo porque mi madre es sevillana. Pero vamos, que he vivido en Cádiz desde siempre.

-¿Dónde estudió y pasó su infancia?

-Salesianos, donde mi padre era profesor. Y soy de Trille.

-¿Barrio conflictivo en aquellos tiempos?

-¡Nooo, muy tranquilito! Yo era de Trille, Segunda Aguada; al lado del Alberti. Para mí fue una infancia maravillosa. Y mira, mi abuela vivía en El Cerro del Moro y yo tenía mi caminito para ir a comer a su casa después del cole y nunca veía nada raro. Yo jugaba en el Alberti cuando dejaban entrar o cuando nos podíamos colar por las rejas. Allí he jugado toda mi vida; o en Salesianos, que tenía muchísimas pistas para jugar al fútbol.

-¡Mítica Liga En Marcha!

-Eso es. Los fines de semana, la liga, y todas las tardes allí jugando. Básicamente esa era mi infancia. Mucho futbito.

-Siendo su padre profesor, ¿por qué le dio por el Periodismo?

-No, a mí nunca me tiró lo de profesor. Yo escuchaba a García a muerte.

-¡Hooombre, ya somos dos! Grande la España de Clemente. Y recomendable para esos amantes como usted que nacieron con un fútbol español dividido.

-Hay que verla, hay que verla. Yo siempre tenía la radio puesta, y siempre Deportes. Mucho más los fines de semana. También leía mucho; no era yo mucho de tele. Y cuando terminaba de leer y daban las doce me ponía al García.

-¿Nos ha podido defraudar con el tiempo García ahora que está hasta en la sopa?

-Nooooo, para nada. Para nada.

-Jajajaja ¿Nooo? Pelín cansino ya el hombre, ¿no?

-No, no, no. A ver, evidentemente es un coñazo porque lleva repitiendo lo mismo veinte años, pero de ahí a defraudar no. Es verdad que puede resultar cansino, pero... No sé si has visto la entrevista esa famosa con el Loco de la Colina.

-La que habla de Florentino Pérez.

-Esa, pues desde entonces no habló más hasta ahora. Pero vamos, que sigo escuchándolo cada vez que hable pese a que es verdad que es cansino y, dependiendo de con quien hable, puede ser hasta incómodo. Pero se echa de menos.

-Sí que se echa. Más que a él, esa guerra entre medios o con presidentes, futbolistas o entrenadores. Ahora todo es bienquedismo e impostura. Una pereza absoluta en la que nadie dice lo que piensa por miedo a salirse del marco social que nos gobierna.

-Claro, claro. Yo es que odiaba a De la Morena, pero también tengo que decir que cuando se fue García me tuve que pasar. Y me lo comí.

-¿Dónde estudió la carrera de Periodismo?

-En Sevilla.

-¿Y qué le tiró más del Periodismo; prensa, radio o televisión?

-Yo ahí estaba con una caraja mu gorda y la verdad que me dediqué a disfrutar. Tú sabe; esto, lo otro, la birra... y no tenía muy claro nada.

-¿Pero sabía que estaba estudiando Periodismo? Jajaja.

-Jaja. Por supuesto, por supuesto. Sobre todo porque yo siempre quise estudiarlo. Y también sabía que lo que quería era trabajar en un periódico. Yo quería papel. Por eso, aunque me atraía más las asignaturas de Comunicación Audiovisual me metí en Periodismo.

-¿Y?

-La carrera me decepcionó muchísimo. Digamos que poco a poco fui perdiendo interés por todo lo que me había ilusionado de adolescente. En general, todo. Los medios, la radio...

-¿Por qué?

-Yo estaba en un Colegio Mayor un poco elitista donde la gente, por así decirlo, tiraba más hacia la derecha y a la vez (estaba) en una clase de Periodismo donde la gente tiraba bastante más hacia el otro lado. Yo estaba ahí en medio pensando 'tío, tengo 20 años y estoy viendo a la gente ya tan radicalizada'. Ya veía todo muy tal; yo empecé a estudiar en 2002. Fue una época bastante movida porque pilló después lo del 11-M en donde los profesores se mojaron demasiado. A mí todo eso me desilusionó muchísimo.

-¿Una Universidad muy politizada?

-Claro. Después, a posteriori lo he entendido y le he restado importancia. Puede que en ese momento, con 20 años, los masifiqué, por así decirlo. Pero sí, me molestaba mucho que todos los ejemplos positivos fueran de 'El País'... Ese tipo de cosas. Y ojo, sin ser yo de ningún espectro político determinado. Y después, cuando estaba en el Colegio Mayor (Hernando Colón) que todo lo bueno fuera lo que ponía el 'Abc'. No sé, todo me decepcionó mucho.

-¿No se os ocurriría marcaros un 'Elías Ahuja'?

-No, no, qué va. Teníamos la Facultad de Arquitectura en frente. Jajaja.

-Jajaja. Bueno, y sale de la Universidad un tanto desencantado y qué.

-Pero salí yo, eh. Es culpa mía. Pero es verdad que me fui viniendo abajo.

-No es el primer compañero que me lo dice.

-También digo una cosa; el inicio de internet me hizo muchísimo daño. Empecé a leer poco a poco menos, empecé a ver series y películas porque no había podido hacerlo nunca y por eso digo que acabé la carrera como habiendo perdido entusiasmo. Lo que pasa es que justo cuando acabé cuarto de carrera me fui con unos colegas de Interrail a Francia y Holanda; eran dos chavales que estudiaban Informática. Pues al año en siguiente, en quinto de carrera, uno de esos chavales empezó a trabajar en una empresa y me llamó. Aquello sería 2008.

-¿Qué empresa?

-Era la empresa del actual vicepresidente del Betis, José Miguel López Catalán, y que se dedicaba a aplicaciones para móviles. El tema es que yo ese último año de carrera me voy de Erasmus y me quedo un poco loco.

-Ahora iremos a ese año loco, que suena mejor que la Universidad.

-Jajaja. Bueno, no es para tanto. Era una expresión jejeje. El caso es que cuando vuelvo, hice prácticas en Sevilla TV, estuve aquí también de prácticas en el Diario de Cádiz, en fin. Y cuando salgo me llama la empresa esta de López Catalán.

-¿Ya había terminada la carrera?

-Sí, pero no. Me quedaba una asignatura, pero ya había salido y me llama esta empresa para hacer contenidos para móviles de Deportes.

-Explíquelo.

-Trabajábamos con el antiguo internet, antes del smartphone. Era el rollo WAP, por el que tenías que pagar dos euros por la información. Entonces, era una putada si tú te metías en los antiguos móviles por internet porque te clavaban tela e iba lentísimo además. Entonces, lo que había eran servicios de, por ejemplo, la Liga. Pagabas dos euros al mes y podías acceder a comentarios en directo, noticias, imágenes de los partidos... También hacíamos MotoGP, Fórmula Uno..., de todo.

-¿Y ahí está trabajando cuánto tiempo?

-Nueve años.

-Tiempo más que sobra para ir experimentando a caballo los avances tecnológicos de internet, móviles y demás soportes técnicos.

-Imagina. Pasamos al smartphone y en esa época intentamos ya hacer una aplicación de fútbol como la de BeSoccer. De hecho. hicimos una de Fórmula Uno que se llamaba F1 Live24 y lo petó mucho, lo que pasa es que cometimos alguna irregularidad con el nombre de la app y la Fórmula Uno nos prohibió usar su nombre y la app desapareció.

-¿Cómo se llamaba la empresa?

-Genera Mobile. Creábamos aplicaciones de fútbol. Hice la Eurocopa 2008, el Mundial 2010. Veía los partidos y los comentaba minuto a minuto, pero no funcionó y lo que hizo este López Catalán fue llegar a un acuerdo con LaLiga para hacer los comentarios de los partidos para la aplicación oficial de LaLiga. Así estuvimos varios años.

-Está bueno. Vayamos a ese último año de Erasmus. ¿Dónde se fue?

-A Rennes, la Bretaña francesa. Allí estuve muy bien, lo que pasa es que es verdad que me pierdo un poco y no llego a terminar la carrera.

-Eso, eso. ¿Cuál fue la asignatura que se le atragantó?

-Bueno, seguramente te suene porque al profesor lo acaban de elegir en el Congreso por Andalucía, el Sierra.

-¡Bueeeeeeeeeeeeenoooooooooooo! Personajazo al aparato. Ese fue el que despreció e ignoró a la candidata de Vox sin mirarle siquiera a la cara en un debate electoral en Canal Sur. Gran toquetazo, sí señor.

-Jajaja Ese, ese. Paco Sierra Caballero, profesor de Teoría de la Información. 

-Muy conocido entre los estudiantes de Periodismo en Sevilla. Me consta que no fue el único que le quedó su asignatura. Especialito el hombre, qué le vamos a hacer.

-Efectivamente, gran personaje. Pues me quedé con esa asignatura varios años.

-Pero vamos, que el Erasmus mereció la pena.

-Buah, qué te voy a contar. Brutal. Fue brutal.

-No me cuente nada mejor que ya me lo puedo imaginar. Jajaja.

-Eso, eso, mejor. Jajaja.

-Hasta que vuelve.

-Vuelvo y en septiembre me saco casi todas las asignaturas menos esa y hago algunas cosas más como prácticas y tal hasta que llego a Genera Mobile, donde voy evolucionando hasta a un nivel bueno gracias a que LaLiga sacó un rollo de juegos deportivos por móviles, pero no funciona demasiado bien. Así que digamos que me quedo ahí como estancado, muy estancado hasta que en 2016, después ya de 16 años, que ya eran eh. Porque con la carrera y los nueve años en la empresa llevaba unos catorce años ya en Sevilla. Vamos, que estaba completamente apalancado. Era como estar en el trabajo con el que soñaba de adolescente, es decir, escribiendo comentando partidos tranquilito, pero claro, ya llegaba un punto en el que no tenía ninguna evolución. Además, la empresa derivó ya por otro lado y se especializó en juegos y la parte deportiva, que era lo importante al principio, fue menguando. De hecho, al principio con lo que lo petábamos era con las secciones de fútbol, chistes.

-¿Chistes como cuáles?

-No sé, lo típico de poner la voz de un cateto en un audio, o la del cuñao...

-Jajajaja Bueno, bueno, eso hoy, en la cultura de la cancelación en la que vivimos, sería hasta denunciable.

-No creo, no creo que lo pudiéramos hacer.

-Jajajajajajajaja. No quiero, no puedo, no debo. ¡No debemos, no podemos!

-Jajajajaja.

-Sí que derivó a otros temas la empresa. Ya veo, ya. Entonces, la deja y qué hace con su vida.

-Me vuelvo a Cádiz.

-¿Y cómo vio Cádiz para volver a vivir tras cerca de quince años fuera? ¿Estaba Teófila o ya Kichi?

-Lo vi y lo veo muy tranquilo. Ya estaba Kichi porque era el 2017. Y lo que veo es una ciudad, desde el punto de vista juvenil, muerta. Pero desde el punto de vista mío, que lo que quería era tranquilidad ya, la disfruté mucho.

-¿Y qué hace ese tiempo?

-Pues me puse a estudiar idiomas; mejoré el francés de Erasmus y le di caña al inglés. También entré en contacto con Rubén (López) y comencé a colaborar con él en la Cope y más adelante entré en LA VOZ en la sección de Deportes, donde estuve un verano sustituyendo y cuando terminé ese contrato me dice José Mari (Aguilera) de hacerme otro como colaborador comentando series y televisión.

-Después de pegarse quince años en Sevilla vuelve a Cádiz y tiene la oportunidad de trabajar como periodista. ¿Cómo ve la prensa deportiva en ese contacto que tuvo con ella?

-A nivel personal lo disfruté mucho porque yo me había alejado del Cádiz muchísimo. Yo había sido socio desde el primer año que bajamos a Segunda B hasta que me voy a Sevilla, que es el año antes del ascenso a Segunda, es decir, yo me fui en 2002 y el Cádiz sube en 2003.

-'To' lo mejorcito se comió... Por los co...razones.

-Jaja. Ya ves. Además, yo es que no he sido el típico que me venía todos los fines de semana de Sevilla, la verdad. Yo vivía mi vida en Sevilla y allí que estaba muy felizmente apalancado. Aparte también curraba los fines de semana.

-¿Y cómo vivió ese contacto con el periodismo diario esos tres meses en una redacción de Deportes?

-La experiencia de ese verano en LA VOZ la disfruté muchísimo; se me quedó muy corta porque, claro, fui adquiriendo mecanismos que realmente nunca había adquirido ya que yo apenas había hecho un par de meses de prácticas en el Diario de Cádiz, que por supuesto también fueron muy satisfactorias. Disfruté siguiendo al equipo en algunos entrenamientos, partidos...

-Lo poco que dejan ahora todos los clubes...

-Evidentemente, experimenté a Grima, vamos, lo que es un departamento de comunicación de un club de fútbol y puedo decir que es lo peor que he experimentado profesionalmente en mi vida.

-Jajajajaja.

-Te lo digo en serio, eh.

-No, no. Doy fe. Se lo digo o se lo cuento.

-Es que me pareció increíble, pero bueno, dentro de todo eso, el rollo de ir por ahí siguiendo al equipo un par de amistosos, fue bonito.

-Eso respecto al Cádiz CF, pero ¿cómo era hacer televisión?

-Empecé escribiendo sobre series y televisión, que era un tema que me gustaba mucho. Estaba muy metido, veía a tope de series y disfruté muchísimo. Después, por exigencia de lo que la gente más consume, pues comencé a escribir de televisión, de cotilleos; mucho Paz Padilla, mucho Toñi Moreno y durante un tiempo lo disfruté también mucho pero poco a poco me fui apalancando. Es verdad que mis circunstancias habían cambiado.

-¿Por qué?

-El 1 de enero de 2018 me voy a Bratislava y allí empiezo a trabajar en Amazon en el departamento de finanzas; entonces para mí ya no era tan fácil estar encima del tema de moda. Los números comenzaron a no ser los que fueron durante una época y aquello se terminó. Pero fue muy bonito. De hecho, hubo una época que siempre miraba si mis noticias estaban en el Top 5 de las más vistas de LA VOZ y casi siempre estaban y cuando no, me picaba más al día siguiente para que volvieran. Estuvo chulo aquello, sí. El hecho de escribir de una cosa u otra nunca me ha importado. Si he tenido que escribir de un partido de fútbol, de una serie o de Paz Padilla, al final lo que estoy haciendo es escribir, y eso es lo que me gusta.

-Dice que se fue el 1 de enero a Eslovaquia a vivir. Año nuevo, vida nueva en su estado más puro. ¿Por qué se va?

-Me voy porque mi novia, que es de Murcia y la conocí en Sevilla, estaba allí. Ella, periodista también, se doctoró en Comunicación con una tesis sobre Cultura Soviética en la II Guerra Mundial. El tema es que cuando acaba no le sale nada aquí y se va para Bratislava al mismo tiempo que a mí me sale lo LA VOZ, que era un dinerito y me daba la opción de poder escribir desde donde quisiera. Y me moví.

-¿Se defiende allí con el inglés?

-Allí se habla fundamentalmente eslovaco aunque en los trabajos que he tenido me he podido comunicar con el inglés. Por ejemplo, a la vez que trabajaba para LA VOZ me salió en febrero otra colaboración en una web de baloncesto.

-¿Cómo le salió esa colaboración?

-Lo de la web de basket me surge por José Morón, que es el jefe de Punto de Break, que quizás es la web de tenis más especializada y potente de España. Él es un chico de aquí de Cádiz, de Los Porches, y es amigo mío de toda la vida. Él sabía que yo estaba buscando cosas, me lo comentó y empecé con él.

-¿Y cómo fueron esos primeros pasos en Bratislava?

-Bratislava en aquellos tiempos era una ciudad todavía barata y ahora se ha ido de mano, es una locura. Cuando yo llego allí, aunque las colaboraciones que tengo no supusieran mucho dinero sí que al menos me servían para aportar algo en casa.

-¿Alquileres por las nubes?

-No, los alquileres no han subido tanto desde que llegué y por eso se puede vivir, pero en cuanto a los supermercados, restaurantes, pffff.

-¿Cuánto tiempo 'vive' de las colaboraciones con medios de España desde Eslovaquia?

-Así me pego un año.

-¿Y cómo lo lleva?

-Bueno, yo estaba en casa, apenas conocía a gente, tan solo amigos de mi novia y de su trabajo. Por lo tanto, apenas gastaba, pero es verdad que poco a poco se fue haciendo aquello complicado. También los inviernos allí son jodíos jeje. Y lo que me pasó es que además los impuestos para los autónomos fueron subiendo y el dinero fue bajando. Aparte de que mi vida ya me pedía más. Así que tuve que ponerme de guía turístico, tío.

-Qué arte. ¿Cómo le fue?

-Pues estuve unos meses y está guay porque al final es aprenderte un guión. Es verdad que al final te vas interesando más según lo que la gente te va preguntando y vas perfeccionando y completando cada vez más la guía. Además, como me gusta mucho el rollo histórico de la II Guerra Mundial pues me empapé con sumo gusto todo lo que pasó allí y las batallas que hubo en Bratislava. Estuvo muy guay, la verdad.

-¿Y por qué lo deja?

-Estuve muy poco tiempo porque empecé en Amazon; necesitaba un curro estable. Estuve un par de meses, tres simultaneándolo, pero tuve que dejarlo porque era demasiado.

-¿Y cuánto tiempo se pega en Amazon?

-Estuve unos tres años en el departamento de finanzas, pero lo dejo porque contacta conmigo, otra vez a través de José Morón, una empresa holandesa que estaba creando webs y necesitaba a alguien con inglés y que le encantase el ciclismo. Al principio me dedicaba más a traducir artículos y contenidos de inglés a español, pero como estaba en Amazon tampoco le podía dedicar mucho tiempo. Lo que hacía era, como cobraba por artículo, echarle un rato después del curro y me sacaba una pasta extra y además leyendo sobre ciclismo, que siempre me ha encantado. Así estuve unos meses hasta que el dueño me propuso trabajar a tiempo completo y que además yo hiciera también mis contenidos. Así que genial. Empecé el pasado febrero y ahora hemos abierto otra de tenis.

-¿Qué carreras ha ido a cubrir?

-Estuve en la París-Roubaix, en el norte de Francia. Fue una experiencia brutal. Es una clásica de primavera que dura un día pero se trabajó de lujo; estuve allí hablando con los ciclistas y trabajando muy cómodo. Ahora mismo estamos empezando y no es que haya mucho presupuesto, pero cuando la web vaya creciendo hay unas ideas muy bonitas. También he ido a las dos últimas etapas de la Vuelta, la de la Sierra de Madrid y la de Madrid del último domingo.

-¿Cómo se llama la web?

-Ciclismo al día.

-¿Y su cargo en la empresa es?

-Yo soy el que lleva las webs en español y a medida que se vayan creando más seré el responsable.

-Volvamos a su vida en Bratislava. ¿Cómo es aquello?

-La vida en Bratislava es. Ehhh...

-¿Cuánto vale una cerveza? Para entendernos.

-No, a ver. La birra es lo mejor.

-Jajaja

-La birra es lo mejor. La birra checa, porque hay mucha más checa que eslovaca por tema de tamaño, la verdad que es lo mejor en cuanto a la calidad y el precio. Mira, cuando yo llegué había muchos bares de birra que cobraban el medio litro a un pavo, pero ya ha subido. Sigue siendo barata. Por ejemplo, una birra buena, una gran pinta te puede valer tres euros.

-¿En dónde se ha notado más el incremento de los precios?

-En la compra. Date cuenta que allí casi todo es importado porque allí tienen poca cosa. Pero la vida en Bratislava digamos que la parte de verano está muy bien; cuando digo verano digo de abril a octubre. Y está de puta madre porque la ciudad está rodeada de lagos para irte con la bici por ahí. En realidad, el país entero es para pedalearlo; no tiene ciudades muy bonitas, la verdad, pero tiene muchos castillos y muchas zonas verdes. Vayas por donde vayas te darás con muchos lagos, castillos, ríos para hacer canoa, bici, montañismo todo ese rollo.

-Como parte del telón de acero que fue, ¿se nota aún restos del comunismo de la Unión Soviética?

-Cada vez menos, pero sí. Además del tranvía, mantienen arquitecturas de aquella época; la forma de los edificios, con patios en medio. Ahí, ahí, sí. La parte positiva aquella de esos barrios familiares que tenía el rollo comunista sigue estando guay, la verdad. O también, varios edificios unidos en el medio por un parque infantil para niños en el medio. Así hay muchos.

-¿Cómo se está viviendo entre la gente de Bratislava la guerra de Ucrania?

-Hombre, aquello está petado de ucranianos porque tiene frontera directa por el Este; al lado de mi casa, uno de cada cuatro coches es ucraniano. Obviamente, la gente defiende a Ucrania. Por ejemplo, el castillo de Bratislava se iluminó con la bandera de Ucrania al principio de la guerra. El posicionamiento es claro, aunque ellos dependen del gas ruso y, claro, una cosa es la postura política y otra la económica. La electricidad subió una barbaridad.

-¿Cuáles son sus planes de futuro? Ya sea personal o en pareja.

-Ni idea. Sabemos que no queremos vivir allí toda la vida, eso lo tenemos claro. Ella habla eslovaco, yo no. Al final, como la gente joven en la empresa habla inglés, pues con eso tiro. La gente mayor habla menos porque hablaban ruso; si te alejas del centro solo se habla eslovaco. Pero el idioma, desde luego, no es un problema para mí.

-¿Y lo de volver a Cádiz se plantea o le gusta venir de paso según se ve en su trayectoria vital?

-A mí sí me gustaría vivir en Cádiz. O sea, si no en Cádiz, en la bahía, pero sí me gustaría vivir en Cádiz. Pero a ver, yo estoy en Bratislava y... a ver, no soy de esos que echo de menos el mar, ni La Caleta ni esas cosas que se dicen.

-Jajajajajajajaja

-En absoluto, en absoluto.

-No sabe lo que me gusta encontrarme con gente que está bien allá donde le toque estar solo por el privilegio de estar. Y sobre todo, saber estar.

-Jaja. Dicho eso, sí que es verdad que cuando volví me di cuenta de que esa tranquilidad es la que busco. A mí me gusta mucho la tranquilidad, lo que pasa es que objetivamente, si volvemos a España lo normal sería irnos a Madrid o Barcelona porque es donde están las empresas y donde está el trabajo. Para yo pensar en volver a Cádiz, a saber.

-Pues por aquí estaremos. O no. Un gusto.

-El gusto es mío.

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