Infraestructuras ferroviarias
¿Por qué el AVE no llegará a Cádiz, como mínimo, hasta el año 2050?
Renfe instaurará durante los seis próximos años el servicio en Bilbao, Pamplona, Almería, Huelva, Burgos, Salamanca, San Sebastián, Vitoria y Soria; mientras que la provincia de Cádiz queda al margen
El Pleno de Chiclana reclama de forma unánime los estudios para la llegada del AVE a la Bahía de Cádiz
El AVE une a la provincia de Cádiz
La línea ferroviaria que conecta Madrid con Andalucía volvió a sufrir otro episodio dantesco el pasado fin de semana. Mientras aún perduraban en el recuerdo las imágenes de 35.000 viajeros varados en medio de la nada durante el día del apagón que afectó a toda España, teniendo que ser rescatados a altas horas de la madrugada de más de 100 convoyes; en la jornada del domingo, miles de viajeros vieron, de nuevo, como sus trenes sufrían retrasos importantes. La alta velocidad.
El Gobierno, a través del ministro de Transportes, Óscar Puente, habla de un «sabotaje» en la línea ferroviaria, ya que se produjeron robos coordinados de cables con cobre en al menos cuatro puntos de la provincia de Toledo, en concreto en los municipios de Los Yébenes y Manzaneque, que afectaron al sistema de señalización de la línea de alta velocidad Madrid-Sevilla, con retrasos significativos en el servicio tanto el domingo como el lunes.
Estos dos episodios en apenas una semana han puesto de relieve la fragilidad del sistema ferroviario español, clave en la movilidad en España, una movilidad desigual según los territorios. La provincia de Cádiz persiste en su reivindicación histórica para su inclusión en la red de alta velocidad, ya que la falta de conexión directa con Madrid mediante el AVE perpetúa y acrecienta el aislamiento ferroviario de la provincia.
Actualmente, solo trece capitales de provincia de España no cuentan con el AVE, pero Renfe tiene planes de instaurar el servicio en Bilbao, Pamplona, Almería, Huelva, Burgos, Salamanca, San Sebastián, Vitoria y Soria. De esta forma, solo Logroño, Santander, Jaén y Cádiz quedarán aislados en el mapa de la alta velocidad española.
Sin AVE hasta el año 2050
El sueño del AVE es una pretensión histórica de la provincia de Cádiz desde que en el año 1992, coincidiendo con la EXPO, se inaugurase la línea Madrid-Sevilla. A pesar de que en 2024 hasta 671.000 viajeros cogieron el Alvia entre Cádiz y Madrid, a día de hoy, el Gobierno no tiene un plan encima de la mesa para que este servicio sea una realidad para Cádiz, con una población de 800.000 habitantes si se suman la comarca de la Bahía de Cádiz y Jerez. Por lo tanto, habrá que esperar, como mínimo, hasta el año 2050.
En una visita a la capital gaditana, el propio Óscar Puente rechazó la llegada del AVE a la provincia de Cádiz debido a que, «nos va a suponer un montón de dinero» y se trataría de una inversión «bestial».
El Ejecutivo justifica en razones económicas la ausencia del AVE en Cádiz, debido a que el coste de la operación rondaría los 3.500 millones de euros. Por otro lado, existen dificultades técnicas, con curvas pronunciadas en el recorrido que hace el tren por la Bahía de Cádiz, sobre todo en el tramo entre Puerto Real y la capital, que limita la velocidad del tren. Estos convoyes requieren trayectos para alcanzar sus velocidades óptimas que superan los 200 kilómetros por hora, y que en Cádiz, en algunos tramos, tendrían que reducir a 50 kilómetros por hora.
A su vez, y a diferencia de lo que ocurre en otras líneas de AVE en España, el tramo entre Cádiz y Sevilla comparte vía con trenes de Cercanías, Media Distancia y Larga Distancia. Además, por el pequeño tramo entre San Fernando y Cádiz, también circula el tranvía metropolitano de la Bahía de Cádiz. Por otro lado, existe un impedimento a nivel técnico. La línea convencional que une a las provincias de Sevilla y Cádiz utiliza el ancho ibérico (1.668 mm), mientras que las líneas de alta velocidad están diseñadas para el ancho internacional (1.435 mm). Esto significa que los trenes AVE, diseñados para circular sobre vías de ancho internacional, no pueden circular directamente sobre las vías de ancho ibérico sin una adaptación de la infraestructura.
