Chiclana
Conflicto por la nueva Zona Naranja de Chiclana: malestar entre los trabajadores de la provincia e «incertidumbre» en la hostelería
El Ayuntamiento de Chiclana prevé recaudar en torno a 1 millón de euros, que serán destinados a «sufragar el gasto público»
Los trabajadores de fuera del municipio tendrán que abonar 120 euros por los cuatro meses de verano: «Vamos a trabajar, no a disfrutar», denuncia Alba Ruiz, una joven isleña que trabaja en un bar de copas en La Barrosa
Los chiclaneros están exentos de pago
Horeca propone habilitar tres zonas de aparcamiento exclusivas para trabajadores
El color naranja impera por las calles de La Barrosa y el Novo. El Ayuntamiento de Chiclana ha impulsado una nueva Zona Naranja para regular el aparcamiento, durante los cuatro meses de verano, en todo el litoral chiclanero, con el objetivo de «evitar los coches aparcados durante días en la zona de la playa» y «sufragar los gastos públicos». Los residentes que abonen su sello de circulación en el municipio estarán exentos de pago; sin embargo, los trabajadores de fuera de Chiclana tendrán que pagar por aparcar 120 euros por los cuatro meses. «No es justo que se les impute esa tasa a los trabajadores», denuncia Maite López, responsable de Acción Sindical de Servicios en CCOO-Cádiz, sindicato que cada viernes se concentra en contra de esta iniciativa en la puerta del Ayuntamiento.
La idea de regular el estacionamiento en todo el litoral chiclanero no es nueva. En principio, la zona naranja iba a ponerse en marcha el verano pasado; pero un recurso interpuesto por una empresa del sector del estacionamiento y las smartcities, ante el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales de la Diputación de Cádiz, hizo «inviable» que se cumplieran los plazos para su implantación. Ha sido en los últimos días, con el pintado de numerosas calles de La Barrosa y el Novo, cuando la ciudadanía ha tomado constancia de la nueva normativa, que entrará en vigor el 10 de junio y estará vigente hasta el 30 de septiembre.
«Con esta iniciativa lo que pretendemos es mejorar la movilidad y rotación de los vehículos para que podamos también aparcar cuando vayamos a la zona de la costa y evidentemente obtener ingresos adicionales para mejorar las políticas de empleo del municipio, además de para sufragar aquellos gastos del autobús lanzadera, que ya ponemos para aquellos trabajadores y trabajadoras que vengan de otros municipios o propiamente sean de Chiclana y se puedan desplazar«, explica José Manuel Vera, delegado de Movilidad, quien añade que parte de los ingresos se van a destinar a »mejorar el turismo« con políticas que »fomenten convenios con los hoteles para aumentar el empleo y se mantenga todo el año«.
Según ha informado el Ayuntamiento de Chiclana, el importe mínimo por estacionamiento de una hora será de dos euros, pero la franja de cuatro horas permitirá estacionar en cualquier zona naranja por 3,50 euros. También, los visitantes tendrán la opción de pagar un bono semanal de 20 euros o quincenal de 30 euros. Para aquellas personas que tengan una residencia en Chiclana — es decir, que paguen el IBI por ser propietarios—, pero no abonen el sello en la localidad, tendrán una tarifa especial de 30 euros por los cuatro meses, es decir, 0,26 euros al día.
Una cantidad que desde CCOO verían lógica que se estableciera también para los trabajadores. «Que si al final hay algo que pagar, pues que sea como un segundo residente: 30 euros por los 4 meses. Eso estaría la gente dispuesta a asumirlo, pero no lo que están planteando», reivindica la responsable de CCOO nada más terminar la concentración. Según Vera, el bono específico ha sido fruto del diálogo y de la negociación tras las reuniones que establecieron con representantes de UGT y CCOO. «Antes de la aprobación de la ordenanza les invitamos a que realizaran alegaciones para tenerlas en cuenta. Tanto es así que tuvimos en cuenta este bono, que no estaba previsto», explica el delegado de Movilidad, quien asegura que «para llegar a un acuerdo ambas partes tienen que ceder». «La parte sindical pedía el gratis total, nosotros no teníamos contemplado nada. Entre el gratis total y el no contemplar nada, hemos sacado un bono de un euro al día. Yo creo que hemos sido generosos«.

En este sentido, Vera ha puesto en valor la bonificación para trabajadores de fuera de la localidad y ha comparado la situación con los municipios cercanos. «Ojalá nos cobrara la ciudad de Cádiz, la de Jerez, o la de El Puerto de Santa María, un euro al día por aparcar en esa ciudad de cada vez que nos desplazamos», ha defendido. En Cádiz capital no hay ningún tipo de bonificación para aquellos trabajadores que se desplazan hasta allí, al igual que sucede en Jerez, que no hace ningún tipo de distinción para trabajadores y mantiene las mismas tarifas durante todo el año.
En cambio, según fuentes del Ayuntamiento portuense, en El Puerto de Santa María no existe ningún tipo regulación del aparcamiento en la localidad. En Rota, el Consistorio roteño ha impulsado esta semana un bono de 3 euros mensuales para residentes y trabajadores para los meses de verano que aparquen en la Zona Morada.
«Comparan Cádiz con Chiclana y no es comparable. En Cádiz tú tienes un montón de medios públicos de transporte para acceder. La mayoría de gente que llega a Cádiz son funcionarios, su poder adquisitivo no tiene nada que ver con los trabajadores de la hostelería», sostiene Maite López, quien define el Novo Sancti Petri como un polígono industrial. «En ningún polígono industrial de esta provincia se le cobra a los trabajadores por aparcar». Desde el sindicato advierten que «si el Ayuntamiento no rectifica o no negocia, el problema lo van a tener las empresas, a las que le tocará solucionar el problema de sus trabajadores«.
Preocupación e incertidumbre entre los hosteleros
«Creo que se implementa la medida sin pensar en el impacto que va a tener en los usuarios del Novo, sobre todo los trabajadores. Allí hay un gran número de hoteles y hay muchísimos trabajadores que vienen de fuera», opina Antonio de María, presidente de HORECA, quien ha solicitado una reunión con el alcalde de la localidad, José María Román, para trasladarle una propuesta que podría suavizar el impacto en los trabajadores. «Hemos detectado que hay tres zonas en el Novo que están libres, que son zonas donde no existe ningún tipo de construcción ni de servicio. Entonces, queremos trasladarla a ver si las podríamos habilitar para que aparquen exclusivamente los trabajadores», propone el presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería de Cádiz, que confía en que el alcalde atienda su petición.
Pero no parece que vaya a salir adelante. O al menos este año. El delegado de Movilidad ha descartado medidas para rebajar y apaciguar el ánimo y la preocupación de trabajadores y empresarios. «La ordenanza está plenamente en vigor ya como está y va a empezar ya a desarrollarse», responde Vera, quien hace un «llamamiento a la calma» al ser el primer año y deja la puerta abierta a implementar mejoras de cara al futuro.
Antonio de María ve importante diferenciar entre aquellas personas que van a estacionar para disfrutar de la playa o cenar en un restaurante, por ejemplo, y las que van a trabajar. «El trabajador es que tiene que ir, porque si no, ¿cómo se presta el servicio?». El hecho de que los trabajadores de fuera de la localidad tengan que abonar 120 euros para estacionar cree que no va a agravar el problema que tienen los hosteleros para confeccionar sus plantillas. «Ahí lo que va a pasar es que si a los trabajadores no se les soluciona el aparcamiento, de momento están contra el Ayuntamiento, pero luego irán contra las empresas».
Entre los hosteleros de Chiclana reina la «incertidumbre». «No sabemos qué resultados va a tener esto. Son cuatro meses y especialmente en dos hay problemas de tráfico y de escaso aparcamiento realmente», valora Vittorio Canu, presidente de la Asociación de Hosteleros de Chiclana, quien teme que el aumento del gasto provoque una bajada del consumo en los bares y restaurantes del litoral chiclanero.
«Vamos a trabajar, no a disfrutar»
Alba Ruiz es una de las 1.200 personas que no viven en Chiclana pero trabajan en algún establecimiento de su litoral. Durante los cuatro meses de verano, trabajará, como en años anteriores, en un bar de copas de La Barrosa, en el que la gran mayoría de la plantilla es de La Isla. Como a todos sus compañeros, la noticia le pilló por sorpresa.
«Encima que ya nos cuesta la gasolina y vamos a tener que pagar eso, ¿qué vamos a ir a trabajar por 10 o 15 euros el día?», denuncia Alba Ruiz, quien confía, en caso de que el problema no se subsane, en que la empresa les cubra parte de los gastos originados por la Zona Naranja. «Vamos a trabajar, no a disfrutar», reivindica la trabajadora isleña.
El PP presentará una moción en el próximo Pleno
Los populares han registrado una moción que se debatirá en el próximo Pleno municipal para «exigir una moratoria de un año en la aplicación de la »zona naranja« en el litoral chiclanero». «Son muchas las personas que están en contra de una medida puramente recaudatoria, que impone un nuevo gasto a los trabajadores que, en muchos casos, sólo encuentran empleo durante la temporada estival», denuncia María José Campo, concejala popular.
Por el momento, y ya con todos las plazas de aparcamiento correspondientes pintadas de naranja, se espera que la medida entre en vigor el próximo 10 de junio.