Viggo Mortensen posa antes de la entrevista
Viggo Mortensen posa antes de la entrevista - ignacio gil

Viggo Mortensen: «Soy testarudo, me cuesta decir que sí»

El actor de ascendencia danesa incide en «Jauja» en una trayectoria reciente marcada por el cine de autor

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

«Cuando digo: 'Voy al baile con esta', me quedo bailando con la que llevé al baile». Así explica Viggo Mortensen su fidelidad a los proyectos que elige, últimamente películas alejadas de los grandes estudios. Filmes pequeños y que plantean un reto al espectador, como « Jauja», que le trae a Madrid y de la que habla con ABC con ritmo pausado y deje argentino, herencia del país en el que se crió tras nacer en Nueva York. Su ascendencia, sin embargo, es danesa, la misma nacionalidad que su personaje en este filme. Un militar que deambula por la Pampa argentina en busca de su hija.

«Uno se siente bien, porque llevo un recorrido de cuentos muy interesantes. Pero toma su tiempo, y desgasta bastante (ríe).

Uno se cansa, tiene que hacer mucho esfuerzo para que la gente se dé cuenta de que existen estas películas. No tenemos un estudio detrás que puede poner pósters por toda la ciudad», admite sin resignación. Con la misma serenidad con la que describe la diferencia entre trabajar en el cine comercial y el independiente.

«Estas películas, a veces, tardan tres años en encontrar el dinero para financiarse, y durante ese periodo te llegan propuestas que se van a rodar este día, que tienen fecha de distribución. Muchas veces un actor está esperando y aguantando, y han pasado uno o dos años. Y dice: 'Lo siento, voy a rodar esto porque tengo que ganarme la vida'. Se entiende. Yo soy bastante testarudo, tardo en decir que sí. Sé lo que es preparar, rodar y promocionar bien una película, lleva su tiempo y requiere energía. Pero cuando digo que sí, me quedo con ella».

Quien dijo no fue el Instituto Danés de Cine cuando Mortensen acudió para plantearles una colaboración, no necesariamente financiera. «Y se resistieron. Me dijeron: 'Esto no es una película, es un guion de veinte páginas'. 'Les juro que va a ser una película, y es muy probable que vaya a Cannes'. Es una lástima, creo que se arrepintieron un poco», cierra Mortensen sin acritud. Porque el filme, efectivamente, fue a Cannes, donde recibió un premio. Y no es menos cierto que el libreto apenas ocupaba dos decenas de folios.

«Yo leo ese guion y entiendo que va a ser un largometraje, porque conozco el cine de Lisandro Alonso, y he hablado con él y me explica cómo va a rodarla», explica el intérprete, que se volcó en labores de producción. Y que se felicita por el debate que suscita «Jauja» allá por donde va. «Tiene un lado muy existencial, perturbador, no tiene una lectura fácil. ¿De qué se trata, de dónde viene, dónde va, es un sueño, algo que está siendo soñado por alguien o algo, un perro, una niña?». La respuesta no sale de sus labios.

Para todos los gustos

Aunque lleva un buen puñado de años sin pisar una superproducción, Mortensen matiza: «No es una decisión consciente, son los cuentos que encontré». No cierra en absoluto la puerta a Hollywood, y se muestra conmprensivo al analizar el aluvión de sagas y cintas de superhéroes. «Me parece lógico que en películas que cuesten 200 o 300 millones la forma de rodarlas no sea tan distinta a lo que se ha visto antes. No se van a arriesgar, van a contar algo que ha funcionado antes».

Como integrante de la trilogía de «El señor de los anillos», sabe de lo que habla. «Las dos primeras de 'El Hobbit' las fui a ver el primer día con niños, me puse los anteojos 3D, en primera fila, hice la cola, entré, pagué y vi la película. E iré a ver la tercera también», cierra. En su muñeca izquierda, una pulsera de San Lorenzo de Almagro, el equipo de fútbol (argentino) de sus amores, al que animará en el próximo Mundial de clubes.

Ver los comentarios