Feijóo pronuncia la Ofrenda al Apóstol a la que el alcalde de Santiago da plantón

Santiago de Compostela vive este sábado uno de sus días grandes más polémicos que se recuerdan, con la ausencia del alcalde de la capital y de todos sus concejales en la Ofrenda al Apóstol. La nueva corporación está presidida por Martiño Noriega, delfín del histórico nacionalista Xosé Manuel Beiras, que se alzó con el triunfo en las elecciones municipales bajo el paraguas de Compostela Aberta, plataforma donde confluyeron varias formaciones de izquierda.

El regidor se ampara en su forma de entender la laicidad, corregida por los obispos gallegos, para no participar en la ceremonia religiosa, a la que sí asistirán ediles del PP y el PSOE. Noriega, no obstante, sí se encargará de recibir a las autoridades en la plaza del Obradoiro y de la posterior recepción en el Ayuntamiento.

La invocación al Apóstol será realizada por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, tal y como avanzó la pasada semana ABC. En él ha delegado el Rey, que el año pasado, en la primera festividad después de su Proclamación, viajó a Compostela con la Reina para pronunciarla él mismo.

Casi cuatro siglos de tradición

Don Felipe y Feijóo se vieron este mes en una larga reunión en la Zarzuela en la que le confío este puesto, que el líder gallego ya protagonizó en 2009 tras su primera victoria electoral. Normalmente el Rey solo desempeña esta función en los años santos, algo que no sucederá hasta 2021. En 2014 se realizó una excepción como símbolo de continuidad con Don Juan Carlos, que imploró al Apóstol -una tradición real con casi cuatro siglos de historia- por última vez en el Xacobeo de 2010.

Feijóo debía haber repetido de nuevo en 2013, pero el accidente ferroviario de Angrois hizo suprimir la celebración. En los últimos años el cometido recayó en nombres como la presidenta del Parlamento gallego, Pilar Rojo, o el exalcalde Ángel Currás.