Ferreiro y Noriegan rechazan participar en la Ofrenda del Antiguo Reino de Galicia

Martiño Noriega y Xulio Ferreiro, que con toda seguridad recibirán la confianza del resto de formaciones de la izquierda para gobernar en Santiago y La Coruña, no acudirán este domingo a la Ofrenda al Santísimo en nombre de los siete alcaldes de la capitales que conformaban el histórico Reino de Galicia en la Catedral de Lugo. Ambas formaciones confirmaban esta mañana que no acudirán justificándose en «su principio de neutralidad religiosa».

Desde que Martiño Noriega definiese la relación que mantendría con la Iglesia como «porosa», no han parado de escrutarse los gestos del futuro alcalde de la capital gallega con respecto a la institución eclesiástica. El azar del calendario ha querido que apenas 24 horas después de ser nombrados regidores, Noriega y Ferreiro tuviesen su primera prueba: participar en la Ofrenda que este año corresponde realizar precisamente al alcalde de Santiago.

Durante todo el día de ayer, desde Compostela Aberta mantuvieron el interrogante sobre la participación o no de Noriega en este acto simbólico organizado por la diócesis lucense. Lo que siempre se ha considerado un acto debido y asociado al cargo, deja de estarlo tras la decisión de Noriega de desvincularse de cualquier celebración religiosa. El futuro alcalde se ha referido a su relación con la Iglesia como «necesaria y respetuosa», pero ya avanzó que no va a participar en actos como la Ofrenda al Apóstol u otros eventos de similar naturaleza.

Hasta el momento, y con motivo de los festejos por su elección como alcalde, sólo está convocada este mismo sábado una «romería abierta» en el Parque de Belvís de la capital.

Tradición desde 1925

La decisión de no acudir de Martiño Noriega supone la ruptura de una tradición que se remonta al año 1669 y que se concreta como ofrenda anual y rotatoria al Santísimo desde 1925 a través de los regidores de La Coruña, Tui, Mondoñedo, Betanzos, Orense, Santiago y Lugo. En todo caso, y según pudo confirmar ABC, la diócesis de Lugo organizará la celebración y los obispos gallegos acompañarán a monseñor Carrasco en la celebración de la Eucaristía en la Catedral de Lugo.

Tanto Ferriro como Noriega insisten en «respeto y diálogo», pero son partidarios de escenificar un distanciamiento. En el caso de Noriega, su ausencia de los actos religiosos va a ser amortiguada con un teórico golpe de efecto: quiere sacar el máximo partido a una institución como el Real Patronato, presidido por Su Majestad el Rey.

Según ha confirmado ABC, Noriega tiene «clarísimo» que es necesario reactivarlo y no dudará en invitar al Jefe del Estado para que pueda reunirse este órgano impulsado por Don Juan Carlos y que se convirtió durante los años 90 en elemento fundamental de la modernización de la capital. Precisamente en este Real Patronato, la Corona y la Iglesia son determinantes.