Un millar de personas cruzan el Canal de la Mancha en un solo día y marcan un nuevo récord
Tres desaparecidos en el intento de llegar desde Francia al Reino Unido por mar
En torno a un millar de personas cruzaron este jueves el canal de la Mancha , entre Francia y el Reino Unido, rompiendo así un nuevo récord diario y superando al más alto hasta el momento: 853 migrantes el pasado 3 de noviembre.
En lo que va de año, más de 23.000 personas se han lanzado al agua en pequeñas e inseguras embarcaciones con el fin de llegar a territorio británico, un número muy por encima de las 8.404 personas que lo hicieron en 2020. Muchas de las embarcaciones que cruzaron el jueves fueron avistadas por la patrulla fronteriza, que las escoltó hasta tierra, y posteriormente las autoridades confirmaron que hay al menos tres desaparecidos , que se suman a otros dos fallecidos en las últimas semanas.
En esta época del año los intentos de cruzar el Canal suelen disminuir, pero las suaves temperaturas de los últimos días han sido una ventana de oportunidad para miles de personas que esperan el momento adecuado para pasar de un lado al otro.
Un portavoz del Ministerio del Interior describió la situación como «inaceptable», y aseguró que la población británica está «cansada de ver morir gente en el Canal, mientras que bandas criminales despiadadas se benefician de su miseria» y advirtió de que el nuevo plan del Ejecutivo para controlar la inmigración tiene como objetivo ponerle solución a un sistema «que alienta a los migrantes a realizar este viaje letal».
Los nuevos cambios, que aún no han sido aprobados por el Parlamento, pretenden que quienes lleguen al país por medios ilegales no tengan derecho a solicitar asilo, una idea que ha sido duramente criticada por organizaciones como la Cruz Roja o Amnistía Internacional, que denuncian la falta de rutas seguras para quienes huyen de la guerra o del hambre de países tan variados como Siria, Irak, Afganistán, Somalia o Etiopía, entre otros.
El gobierno de Boris Johnson ha insistido en numerosas ocasiones en que lo prudente es que la solicitud de asilo se haga en el primer país seguro al que lleguen los migrantes, en lugar de arriesgar su vida cruzando las frías aguas del Canal, en el que muchas personas han muerto en los últimos años, pero muchos tienen ya una red de apoyo en Gran Bretaña formada por amigos o familiares que han llegado antes. Además, la Convención de las Naciones Unidas sobre los Refugiados no exige que la solicitud de refugio se haga en un lugar determinado. Se calcula que el 98% de las personas que llegan a Reino Unido solicitan asilo, un proceso que puede durar meses o incluso, años.
Fuentes anónimas del Gobierno citadas por la prensa local acusaron a Francia de haber perdido el control de la situación, al permitir que tantas personas salgan desde sus costas, incluyendo a niños y niñas, sobre todo cuando Reino Unido está a punto de desembolsar los 54 millones de libras esterlinas prometidos para aumentar las patrullas en el Canal.
Acusan a Francia de «hacer la vista gorda»
No obstante, esto no parece ser suficiente, o al menos así lo cree John Vine, exinspector jefe de fronteras y migración, quien declaró en un programa de la BBC que es «posible patrullar los doscientos kilómetros de la costa francesa durante un período de tiempo muy, muy largo» sin toparse con barcos de inmigrantes o bandas criminales. Según ‘The Telegraph’, una fuente de Whitehall aseguró que «el Gobierno francés no cumplió con su deber de proteger la vida y mantener el acuerdo conjunto para evitar que los botes pequeños salgan de Francia», permitiendo así «que cientos de personas zarparan potencialmente hacia la muerte mientras solo paraban a un par de embarcaciones». «Parece que han cedido territorio soberano a criminales traficantes de personas», continuó la fuente, que acusó al país galo de politizar la situación debido al Brexit : «Está todo lo relacionado con la pesca, el protocolo de Irlanda del Norte y las relaciones generales entre el Reino Unido y Francia».
En esta línea, Tony Smith, exjefe de la Fuerza Fronteriza, acusó por su parte a Francia de «hacer la vista gorda» ante las muertes y el enriquecimiento ilícito de los traficantes de personas, y acusó a los franceses de «despecho» por el Brexit.
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