Los Sigman, los «dueños» de la vacuna contra el Covid-19 en Argentina

El matrimonio formado por Hugo Sigman y Silvia Gold, íntimo de Manuela Carmena, fabricará y distribuirála vacuna de Óxford

Silvia Gold y Manuela Carmena BELÉN DÍAZ

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Hugo Sigman , considerado uno de los 10 hombres más ricos de Argentina, suele destacar la «transición española y los pactos de la Moncloa» como «un ejemplo para que el mundo aprenda». En las entrevistas y foros de los que suele participar, nunca se olvida de recordar el préstamo que le dio su suegro en 1977: «Eran 400.000 dólares». Por entonces, una fortuna. Aquel crédito, «con devolución», fue decisivo para fundar con su mujer, Silvia Gold , Chemo y desarrollar lo que hoy es el Grupo Insud , un emporio, de matriz farmacéutica, diversificado en un ecosistema de empresas culturales (con productora de cine incluida), protección medio ambiental, diseño, naturaleza y turismo. Su facturación anual se estima en torno a los 1.500 millones de dólares .

Silcia Gold y Hugo Sigman

El doctor Sigman, psiquiatra que abandonó la profesión porque «sufria cobrando a personas enfermas», tampoco olvida en sus intervenciones públicas, agradecer a su mujer y contarle a todos que, sin ella, no existiría ninguna de las empresas que fundaron y hoy tienen presencia en 40 países. En los Coloquios de la Embajada de España en Buenos Aires, hace apenas tres años, este filántropo y hombre de negocios en simultáneo, mencionaba a « Silvia » en cada comentario que tenía que ver con el éxito de aquellas ideas que pensaron, trabajaron y construyeron juntos en la Barcelona que, como el resto de España, inauguraba democracia. Mientras, en su país, Argentina, se desataba la dictadura más cruel de su historia.

Con Carlos Slim

Estos días su nombre volvió a ser noticia. Fabricará y distribuirá la vacuna contra el Covid 19 en la planta de la biotécnológica mAbxience. Lo hará con apoyo financiero de Carlos Slim y en colaboración con la farmacéutica mexicana , AstraZeneca. «Hemos empezado a producir, a riesgo, 150 millones de dosis con la fórmula de Oxford», confió a Radio Mitre. Si resulta efectiva, Argentina y Latinoamérica (a excepción de Brasil) podrán despedirse definitivamente del Coronavirus. Lo harán al mismo tiempo que Estados Unidos y Europa pero, advirtió, «si falla, tendremos que tirar todo». Ahí, está el riesgo.

El Presidente Alberto Fernández , hizo el anuncio oficial. Ni Hugo Sigman ni Silvia Gold estaban presentes. El matrimonio procura mantenerse al margen de la política pero el apellido Sigman suele aparecer en el entorno de la Casa Rosada y en los círculos peronistas. Durante meses, las quinielas que apostaban a que sería Embajador en Madrid o el elegido para ese destino sería su hijo Leandro, el CEO de la compañía, se cotizaron al alza. Finalmente, se designó a Ricardo Alfonsín, hijo del expresidente, Raúl Alfonsín.

A la doctora Silvia Gold (oro), la industria farmacéutica le viene de lejos. Sus padres tenían un laboratorio en la ciudad de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, donde empezó a trabajar de jovencita. «La empresa era la familia. Yo, estaba educada en eso», declararía en un Foro del diario La Nación. La experiencia le ayudaría después a trabajar «24 horas», con el padre de sus tres hijos: Mariano, Leandro y el más joven, Lucas . Acostumbrada a exprimir las horas, terminó la carrera de Bioquímica con los dos primero zascandileando en Argentina pero «el tercero, nació en Barcelona». «Superados los esfuerzos, fueron muchos los beneficios». Entre otros, lograr un tratamiento para combatir el chagas, la enfermedad de los pobres de Latinoamérica.

Presidenta de la Fundación Mundo Sano, creada por su padre, Roberto Gold , «valores» es la palabra que más repite en sus intervenciones y en la que confía. «Creo más en los valores que en la genética», afirmaba en La Nación. «Pasión y ética» son también señas de identidad con las que se identifica. Otra que no mencionó y también le ajusta como un guante es, solidaridad. La ejerce en el combate a enfermedades de marginales y olvidados (fiebre amarilla, dengue…) y en ayudar a otras organizaciones sin fines de lucro vinculadas a la salud física y mental como la española, Fundación Manantial.

Estanislao de Grandes, por entonces embajador de España en Buenos Aires, recordó en la Embajada que Hugo Sigman era «el primer inversor» argentino en España. Pero, también fue el primero en instalar una planta en China para luchar contra un quebradero de cabeza: la fiebre Aftosa en el ganado . De la mano de su suegro, «consejero y con gran influencia en mi», recorrió y conquistó Europa antes de que cayera el muro de Berlín.

Fundadores y únicos accionistas del grupo Insud, Hugo Sigman y Silvia Gold comparten un acervo cultural envidiable y un ojo clínico para producir, con , películas formidables como «Relatos salvajes», «El último Elvis» o la eterna «Plata quemada». Lanzaron con éxito la editorial Capital Intelectual y editan la versión argentina de Le Monde Diplomatique. Son amigos de los hermanos Almódovar , de Manuela Carmena y de Felipe González y Mar García Vaquero «hinchas» del Barcelona aunque su casa está en Madrid y amantes del arte.

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