Shaila Dúrcal: «En mi familia nos hemos querido y nos hemos odiado»

No es habitual ver a Shaila Dúrcal por estas tierras, desde que hace años se instalara en Estados Unidos, donde ha edificado su carrera artística y su vida en común junto al mexicano Dorio Ferreira, con quien se casó hace siete años. Pero la Navidad trae de vuelta a quienes un día dejaron su país y, en esta ocasión, la hija de los inolvidables Rocío Dúrcal y Junior ha regresado temporalmente a España por motivos laborales y familiares. «Aquí siempre he tenido mucho trabajo, aunque en su día opté por centrarme en México y Estados Unidos. Eso sí, cuando vengo en verano, recorro el país de arriba abajo». Ahora prepara en la intimidad de su hogar, y en colaboración su marido, el lanzamiento de un nuevo trabajo discográfico, con el que, asegura, abre una nueva etapa: «Supone una mezcla de sonidos e influencias culturales.

¡Estoy emocionada!», explica.

¿Qué meta se ha impuesto ahora mismo con este disco?

Meta concreta no tengo, pero sí quiero cumplir el objetivo de satisfacer a mi público en España y en América. Soy muy afortunada de contar con el público de mi mami y con el mío propio.

¿Es una vida fácil la de transitar entre EE.UU y España?

Siempre me gusta volver a mi país; de hecho, nos planteamos pasar temporadas más largas aquí. Viví ocho años en México, dos en Los Ángeles, ahora resido en Miami... He buscado lugares desde los que me resulta más fácil viajar.

¿Qué hay de Rocío Dúrcal en Shaila Dúrcal?

Además del físico, me parezco en el carácter. Siempre pensé que mi madre pertenecía a la gente. Su público me aceptó desde que aparecí por primera vez de su mano. Y cuando ella se fue, a ellos les quedó un pedacito de Rocío Dúrcal a través de mí.

¿Se considera una continuación de ella?

Sí, en cierto modo. Jamás pensé que interpretaría las canciones mexicanas de mi madre, pero fue el público quien lo reclamó. La recuerdan a través de mí. Aunque ahora he decidido cambiar de tercio y centrarme en el pop.

¿Qué ha aportado Dorio, su marido, a la carrera de Shaila Dúrcal?

Ha hecho de todo. Desde levantarme los días más grises y tristes, hasta producir la mejor música que puedo cantar. Es maravilloso tener a mi pareja, mi compañero, mi marido a mi lado.

¿Piensa en la maternidad?

La verdad es que no paro. Mi madre siempre me decía «paciencia, hija, todo llega». Tener hijos ahora resulta complicado. Somos jóvenes y debemos exprimirnos al máximo. Pero en algún momento seré madre.

A la gente le sorprendieron los problemas familiares surgidos tras el fallecimiento de tu madre. Usted, sin embargo, consiguió mantenerse al margen de esas disputas entre su padre y sus hermanos Carmen y Antonio.

Esos follones ocurren hasta en las mejores familias. Yo siempre me he llevado bien con mis hermanos. Sentí la necesidad de estar en medio y calmar los ánimos, porque si estás cabreado puedes sacar las cosas de contexto. Mis padres lo hicieron lo mejor posible.

¿Qué cree que hubiera pensado Rocío Dúrcal sobre aquellas disputas?

No lo sé. Ella sabía que nos queríamos hasta morir o nos odiábamos hasta matar, lo mismo que en cualquier familia. Pero íntimamente pienso que jamás se habría imaginado algo así.