De los Obama a los Sussex, Hollywood se rinde al polémico reclamo de las parejas famosas

Harry y Meghan han firmado un contrato de 126 millones para producir contenido para Netflix: «No pueden cobrar lo mismo que Shonda Rhimes»

María Estévez

El Príncipe Harry y Meghan Markle han firmado un acuerdo multimillonario con la plataforma Netflix para producir contenido exclusivo. En su primer trabajo después de abandonar sus obligaciones como miembros de la Familia Real británica y mudarse a California, la pareja anunció esta semana su intención de crear documentales, películas y series para esta gran plataforma de internet. Siguiendo los pasos de Barack y Michelle Obama , los Sussex quieren ser productores para educar a la audiencia. Según apuntan varios medios británicos, Meghan y Harry cobrarán 150 millones de dólares (127 millones de euros) por cinco proyectos y, al parecer, no informaron a la Reina Isabel de la firma de su contrato y dejaron que se enterara a través de su comunicado a la prensa. Recientemente, los Sussex han comprado una mansión de 14 millones de dólares (12 millones de euros) en Santa Bárbara, para la que al parecer pidieron una hipoteca a treinta años, por lo que firmar un nuevo acuerdo en Hollywood indica su intención de echar raíces cerca de allí .

En el Reino Unido se sorprendieron de que fueran los asistentes de la Reina quienes informaran a Su Majestad, de 94 años, sobre la nueva aventura profesional de su nieto, que involucra a una compañía de producción, sin nombre todavía, dedicada al público infantil. Los Sussex nunca han producido televisión por lo que sorprende que Netflix haya firmado un contrato de larga duración con la pareja. «Su Majestad es muy consciente de los peligros que supone para la Institución que los miembros de la realeza se embarquen en proyectos lucrativos: el fracaso de la productora del príncipe Eduardo y algunos de los acuerdos que Sarah Ferguson son buenos ejemplos», explicó una fuente cercana al Palacio de Buckingham a «Daily Mirror».

Un productor nominado al Oscar admitía esta semana al «New York Times» que Hollywood se ha rendido a las parejas de éxito . Es decir, que los Sussex son los nuevos Obama y tienen salarios comparables en la industria. «Si yo fuera su agente, le habría pedido a Netflix que les diera el dinero de Obama y no la cantidad de un productor conocido en Hollywood». Netflix pagó a la creadora de los éxitos «Anatomía de Grey» y «Cómo defender a un asesino», Shonda Rhimes , 150 millones de dólares (127 millones de euros); a Kenya Barris , creadora de «Black-ish», cerca de 100 millones de dólares (85 millones de euros) y a Ryan Murphy , el creador de «American Horror Story», 300 millones de dólares (253 millones de euros) durante 5 años. «No creo que les hayan dado más de 2 millones de dólares (1,6 millones de euros) al año. Ellos son productores, no creadores de contenido como Rhimes o Murphy», dice la misma fuente.

Brindar esperanza

No se ha revelado cuánto ganaron los Obama en su acuerdo con Netflix, o cuántos años durará el contrato con Harry y Meghan. Lo que sí sabemos es que lanzarán una compañía de producción y desarrollarán una serie de documentales sobre la naturaleza y una serie animada que celebra a mujeres inspiradoras . La plataforma pagará a los Sussex por una serie de documentales, series de no ficción, largometrajes, programas con guión y programación infantil a través de su compañía de producción, según han confirmado ambas partes al «New York Times».

La pareja ha comentado que su enfoque será la creación de contenido que «informe y brinde esperanza», así como programación familiar. Además, señalaron que el acuerdo con Netflix, que tiene 193 millones de suscriptores en todo el mundo, les brinda un «alcance sin precedentes para compartir contenido impactante con la intención de provocar cambios en la sociedad».

Sin experiencia en el sector

Aunque Markle fue actriz durante años, la pareja no tiene experiencia previa en producción. Sin embargo, tienen una serie animada en desarrollo centrada en inspirar a las mujeres y Netflix lanzó la semana pasada «Rising Phoenix», un documental sobre los Juegos Paralímpicos con el Príncipe Harry de protagonista, ya que fue el fundador de los Juegos Invictus para veteranos heridos en combate.

No cabe duda de que Meghan sigue con el gusanillo de Hollywood en las venas, con ganas de expresar sus emociones a través de historias que conmueven al público. En su afán por despertar a las minorías, Meghan usa su fama para empoderar a las mujeres. La exactriz participó como invitada de honor en un evento especial de United State of Women y de When We All Vote, donde hablaba del reconocimiento del derecho al voto de la mujer y, sobre todo, de las mujeres negras. No resultará extraño que estos temas sean el contenido central del nuevo contenido de los Sussex para Netflix.

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