La inesperada decisión de Beatriz de York tras el escándalo del Príncipe Andrés

Hace unos meses Beatriz de York anunciaba emocionada su compromiso con el empresario italiano Edoardo Mapelli . Tras varias experiencias fallidas en el amor, la hija de Sarah Ferguson y el Príncipe Andrés , parece haber encontrado a su compañero de vida. Sin embargo, a pesar del feliz anuncio y sus deseos de pasar por el altar -una boda cancelada , por el momento, debido a la pandemia- la nieta de la Reina Isabel II tuvo que hacer frente al escándalo protagonizado por su padre tras salir a la luz su amistad con el pedófilo Jeffrey Epstein , un episodio que consiguió ensombrecer los preparativos de su enlace y que afectó incluso a la fiesta previa.

Una polémica que se vio aún más agravada por la entrevista que el Duque de York concedió en la televisión pública británica para limpiar su nombre y con la que únicamente consiguió que surgieran aún más dudas. A día de hoy, el favorito de la monarca está alejado de sus deberes reales -anunció su retirada tras la desastrosa emisión de su entrevista- y se encuentra en el punto de mira internacional después de que el FBI le acusara de mostrar «cero cooperación» con las autoridades estadounidenses que investigan la red de tráfico sexual de menores de Epstein, que se quitó la vida en prisión antes de la celebración del juicio.

Según desvela ahora el escritor y experto en realeza Phil Dampier en el programa australiano «New Era», la hermana mayor de Eugenia de York estaría planteándose abandonar definitivamente el Reino Unido y alejarse de la Familia Real británica, tal y como han hecho los Sussex, para instalarse con su futuro marido en Italia. Y es que ya hace unos meses el entorno de la joven señaló que lo estaba pasando realmente mal por su padre y que no paró de llorar durante días después de la intervención del Príncipe Andrés en televisión.

Beatriz está « considerando mudarse a Italia por el escándalo del Príncipe Andrés» con el firme deseo de «comenzar una nueva vida y alejarse de todo», señala Dampier. Y añaden: «Ella ha tenido que aguantar mucho, postergando su boda y también el escándalo de su padre con el caso Epstein».

Lo cierto es que la nieta de Isabel II no forma parte de los miembros de primera línea de la Casa Real, aunque sí cumple con diversos compromisos reales a lo largo del año, y Mapelli, que gestiona un negocio millonario de venta de inmuebles, puede llevar a cabo su trabajo desde cualquier parte. De hecho, los Sussex dejaron entrever su malestar cuando a ellos la monarca no les permitió ser financieramente independientes «cuando existe un precedente para que otros miembros de la Familia Real -señalaron en un comunicado- busquen empleo fuera de la institución».

Por el momento habrá que esperar para conocer la decisión final de la pareja, que podría prolongarse bastante en el tiempo debido a la situación de emergencia sanitaria. Pero de darse, sería la segunda marcha del país después de la de Meghan Markle y el Príncipe Harry , y la tercera teniendo en cuenta la retirada del Duque de York de la vida pública.