De izq. a der., Johnny Rotten, Steve Jones, Paul Cook, Sid Vicious y el manager Malcom McLaren en 1977
De izq. a der., Johnny Rotten, Steve Jones, Paul Cook, Sid Vicious y el manager Malcom McLaren en 1977 - AP

El hijo de los padres de los Sex Pistols quemará recuerdos punk valorados en seis millones

Joseph Corré, dueño de Agent Provocateur, protesta porque hasta Buckingham apoye el 40 aniversario del movimiento

Londres Actualizado: Guardar
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En arte, el tiempo lleva todo a la aceptación o al simple olvido. La provocación dadaísta se estudia en las universidades. El urinario de Duchamp aburre en los museos. El punk es un asunto cultural, celebrado por las más venerables instituciones inglesas. Joseph Corré, de 48 años, tuvo como padres a las dos mentes que pusieron en marcha a los Sex Pistols, el taimado mánager Macolm McLaren y su mujer de entonces, la celebrada diseñadora Vivienne Westwood. Corré, uno de los fundadores en 1994 de la firma de lencería Agent Provocateur, se ha rebelado contra la aceptación del punk por parte del establishment. Su queja la expresará fiel a la escuela de sus padres: provocando.

Anuncia que el 26 de noviembre, cuando se cumplirán 40 años de la publicación del single de los Pistols «Anarquía en el Reino Unido», quemará en Camden Town recuerdos del punk de su propiedad valorados en unos seis millones de euros.

«Cuando la Reina aprueba el 40 aniversario del punk debemos saber que algo ha ido rematadamente mal», se queja Corré, quien asegura que Buckingham ha entrado en contacto con las oficinas de su madre para colaborar en el evento.

Isabel II fue una de las dianas de los Pistols para publicitarse. En su canción «God save the Queen», en su hora un comentadísimo golpe de irreverencia y hoy un clásico del rock, acusaban a la Reina de ser la cabeza de un régimen fascista y se preguntaban si es un ser humano.

Corré, que además de vender lencería es un activista en causas ecológicas y sociales, lamenta que «el mainstream [las corrientes culturales y sociales para el gran público] se ha apropiado de la cultura alternativa punk. Ahora el punk se ha convertido en un jodido museo, en un homenaje».

El 40 aniversario de la irrupción de las hordas de las crestas, la distorsión guitarrera, el baile pogo, los taquicárdicos ritmos sincopados y los escupitajos físicos y metafóricos contará con el apoyo de Boris Johnson, el alcalde de Londres, de Lotería Nacional, que lo apoya con una subvención, y según Corré, hasta con el visto bueno de la Reina.

Joseph Corré y su madre, Vivienne Westwood, en 2012
Joseph Corré y su madre, Vivienne Westwood, en 2012 - ABC

El hijo de Westwood y McLaren invita a quienes tengan recuerdos punk a sumarse a la hoguera de Camden. Pero faltan meses hasta noviembre y habrá que ver si al final prende fuego a su pira millonaria, porque todo puede ser una maniobra de autobombo, al estilo de las que con pérfido genio instigaba su padre.

La diseñadora Vivienne Westwood y su pareja Malcolm McLaren, cuya relación acabó con durísimos reproches de ella, auspiciaron el nacimiento del más célebre de los grupos punk -con permiso de los Ramones-, los Sex Pistols. Todo se fraguó desde la boutique de ambos en la calle Kings Road de Chelsea, llamada Sex. Hoy a Kings Road le ha pasado como al punk: está tomada por un rosario de tiendas estándar de conocidas cadenas y hace mucho tiempo que lo creativo o lo alternativo han volado de sus coquetas aceras.

McLaren animó a un empleado de su boutique Sex y algunos de sus amigos a formar los Sex Pistols. Fue el cerebro de las provocaciones airadas que los pusieron enseguida en órbita. Falleció en abril de 2010 en Suiza, por una extraña forma de cáncer y con un pésimo cartel, el de un intrigante lleno de talento, pero capaz de pisotear a quien fuese y lo que fuese en el altar de su yo. Tal vez todo venía del magisterio de su abuela, una sefardí portuguesa de opulenta familia, que solía repetir al niño Malcolm esta singular enseñanza: «El mal es bueno, porque el bien es aburrido».

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